Innegable © YoonMin

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Los labios de YoonGi son suaves y para JiMin son como algodones tocando los suyos, dejando besitos dulces y sin prisas.

YoonGi siempre es delicado en sus toques, pero incluso, cuando la pasión es desbordante, cambiará y será un tanto más agresivo.

—¿Algo que celebrar? —Preguntó, un tanto tímido debido al asalto que sufrió.

Los labios de YoonGi aunque suaves, también tenían ese toque de alcohol que le atraía.

—Nada.

YoonGi sonrió, separándose de golpe y chupando sus propios dientes.

Parpadeando, el bailarín se levantó de la cama y siguió con la mirada los pasos cansados e inestables de YoonGi.

—¿Estas bebiendo?

—Estoy estresado, es normal hacerlo de vez en cuando.

Entendía eso, pero lo que no tenía sentido era que de repente YoonGi tuviese esa fijación de mierda. Sabía que su novio no era bueno con el alcohol, entonces.. ¿su estrés resultaba así de alarmante? Porque a ese paso, cada uno sería un alcohólico.

YoonGi se encerró en el baño y lo dejó de nuevo sobre la cama, aturdido por los besos y extrañado por la repentina actitud tosca de su mayor.

Frunció el entrecejo y negó, frotando sus ojos con ambos puños y decidido a resistir hasta que YoonGi saliera y pudieran tener una de esas charlas de novios que en ocasiones también necesitaban.

Podía sentir la tensión que YoonGi emanaba y el temor que él mismo demostraba al creer que su relación quizá se estaba debilitando.

JiMin lo amaba con cada pedazo de su alma.

Gruñó y regresó a la cama, tratando de evadir los pensamientos inseguros que rondaban en su cabeza y todas esas actitudes negativas que no le llevarían a nada.

Necesitaba ser fuerte, hablar y compartir sus inseguridades con su pareja y escuchar también la parte de YoonGi, para juntos llegar a una solución.

Confiaba plenamente en que sus palabras serían escuchadas y que todo regresaría a la normalidad, incluso a pesar de su apretada agenda.

Excepto que no fue así.

Cuando YoonGi salió, con gotitas de agua resbalando por su pecho, se abalanzó de regreso sobre su cuerpo, abriendo sus piernas y acomodandose, mordiendo y chupando la sensible piel de su cuello e incluso de sus mejillas.

Le hizo el amor con fuerza, transmitiendo su frustración y un montón de cosas que no podía entender del todo, mientras le embestia una y otra vez, dejando marcas que serían imposibles de ocultar y jadeos rudos que se grabarian a fuego en sus recuerdos.

JiMin lo tomó, lo sintió y lo amó como lo hizo desde la primera vez en que ambos compartieron intimidad y se aseguró de susurrar las palabras exactas, esas que sentía por la persona que se refugió en sus brazos cuando todo terminó.

YoonGi lucía asustado de todo y JiMin.. solo deseaba que por todo el amor que compartían, pudiesen solucionar lo que sea que estuviese mal.

Realmente lo amaba como a nadie mas.. incluso más que a sí mismo.