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YoonGi observó los movimientos nerviosos de JungKook y suspiró profundamente.

Esa no era una buena bienvenida después de su primer descanso oficial y aunque amaba la tranquilidad de una habitación, el silencio que ahora se extendía por el lugar, no le hacía sentirse muy cómodo.

—Deja de romperte la cabeza. No has hecho nada mal y aunque así fuese, nadie tiene el derecho de tirarte en cara si gustas de alguien o no. —Comentó hacia JungKook, rodando los ojos.

El chico levantó la mirada tras su última palabra y asintió, aunque no se veía para nada seguro.

—Estoy seguro de que voy a estar en problemas después de esto.

—Fuiste tendencia mundial, probablemente la mira esta en ti.

YoonGi frunció los labios ante el comentario de TaeHyung y el último encogió los hombros. Había cierta tensión en el chico y no dudaba en expresar sus más motivadores pensamientos.

—Relajate. He pasado por esta situación, JiMin también. El hecho de que parezca que ahora gran parte de los fans quieren darte la espalda, no quiere decir que lo harán. Al menos no todos.

JiMin subió una de sus piernas sobre la suya y echó la cabeza hacia atrás, descansando sobre el respaldo.

—No estás ayudando, YoonGi. —Reprochó. —Lo que queremos decir, JungKook, es que parece que el mundo se te cae a pedazos en este momento y no es debido al montón de notas estúpidas que giran alrededor de, bueno, un malentendido. Sabemos que lo que te tiene de ese modo es el shock inicial. Estoy seguro de que no pensaste que tus propios fans te iban a dar la espalda por algo así ¿no? Pensaste que te apoyarían de ser verdad que estabas en una relación o gustas de alguien, pero ahora te ha tocado ver el otro lado de la moneda y estas, más que nada, decepcionado.

YoonGi acarició el muslo de su chico y asintió. Ellos habían estado en esa posición y aunque las cosas fueron incluso peores, podían entender el feo sentimiento de opresión y angustia.

—No pienses ni por un segundo que tienes algo que lamentar. —NamJoon finalmente habló. —JiMin y YoonGi tienen razón y después de todo, se trataba de nuestro período de descanso. Nadie tenía el derecho de sacar provecho de esto y tú no tenías porque esconderte junto a tus amigos.

JungKook gruñó, tirando de los mechones largos de su cabello.

—Ahora voy a recibir un sermón, una posible prohibición y cientos de quejas por ser un chico normal y divertirme.

—Para la próxima no abraces a nadie. —Jin bromeó, golpeando el hombro de un HoSeok totalmente dormido y ajeno a todo.

JiMin cambió de posición y pronto se acurrucó en los brazos del rapero, pasando un brazo por su costado y formando un pucherito que fue besado.

Claro, estaban preocupados por todos los acontecimientos que si bien fueron inocentes y sin dobles intenciones, podrían traer problemas para una banda que constantemente estaba en el foco de atención.

La caída de las acciones solo le dieron una pequeña idea de todo el infierno que podrían vivir si otra relación salía a la luz. Y era una mierda, YoonGi lo sabía.

Mordió su mejilla interna, mientras el silencio re aparecía. Quizá las cosas no terminarían tan mal.

Pero ahora estaba más que convencido que algunas de las fans, podrían tener algún tipo de trastorno mental, al idealizar que se casarían con alguna.

Sonrió. Ciertamente le causaba un poco de ternura.

—Amores platónicos. —Susurró solo para él.

Innegable © YoonMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora