CAPÍTULO 3

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Tras la pequeña discusión, os pusisteis las túnicas del colegio para estar preparados cuando el tren parase.

Lo que quedaba de trayecto lo pasasteis hablando sobre las casas y en cual creíais que ibais a quedar. Tú no tenías preferencias, las cuatro te parecían buenas casas y te daba igual en cual estar.

Entonces el tren se paró, y salisteis de él. El andén en el que os bajasteis estaba oscuro ya que estaba en la calle, al lado vuestro había unos árboles, y delante de todos los niños se encontraba un gran lago que brillaba y reflejaba las estrellas.

En la orilla de este había unas cuantas barcas vacías, supusiste que así iríais al colegio, pero no había suficientes para todos los alumnos que había ahí.

Entonces, como si alguien te hubiese leído los pensamientos y hubiera decidido resolverlos, una voz dijo:

- Los de primer año a las barcas, los de primer año a las barcas. Los demás ir a los carruajes del bosque.

Buscaste de donde provenía esa voz tan grave y profunda, y para tu sorpresa, viste a un hombre alto como dos y ancho como tres, tenía una gran barba rizada que le tapaba más de la mitad de la cara, y un pelo largo igual de rizado que la barba que ocupaba mucho.

Como erais de primero, os acercasteis al hombre; algunos alumnos hicieron lo mismo, pero la gran mayoría se fue hacia el bosque, ya que serían de años mayores.

- Buenas a todos -dijo el hombre gigante- me complace deciros que estáis a punto de comenzar el primer año en el colegio Hogwarts.

- ¿En serio? ¡No tenía ni idea! Yo pensaba que íbamos a un curso para pelar pescado -le corto una voz entre la multitud. No se veía muy bien, porque era de noche, pero se apreciaba una figura de un chico de pelo negro un poco largo y piel blanca.

Tras ese comentario la mayoría de alumnos se echaron a reír, y viste como el tal James que habíais conocido antes se acercaba al chico de la broma.

- Ya está bien, dejar de reíros ya, ahora -siguió Hagrid- si nadie tiene alguna otra broma, por favor en grupos de tres o cuatro montaros en las barcas, ellas os llevaran.

Inmediatamente, Lily Severus y tú le hicisteis caso y os subisteis en una de las barcas. Cuando todos os hubisteis sentado en cada una de las barcas, ellas solas comenzaron a moverse, tras unos minutos de recorrido, se podía ver perfectamente el colegio.

Llegasteis al colegio, entrasteis y Hagrid os dijo que esperaseis en las escaleras de la entrada. Así hicisteis, y al poco rato una mujer llegó; era delgada, con los rasgos marcados, ojos verdes y el pelo negro agarrado en un moño bien apretado.

- Buenas a todos -dijo la mujer- yo soy Minerva McGonagall, es un placer teneros aquí a todos, en unos momentos, estas puertas se abrirán y entrareis, al hacerlo, dará comienzo la ceremonia de selección; en la que se os dirá a que casa iréis durante vuestra estancia en el colegio estos siete años. Vuestra casa será como vuestra familia, dormiréis y pasareis mucho tiempo en las salas comunes con vuestros compañeros. Podréis pasar tiempo en los terrenos del exterior de Hogwarts cuando no esteis en clase y solo en las horas permitidas. El bosque prohibido esta restringido para los alumnos y a Hogsmeade se puede ir a partir del tercer año. Las demás normas os las dirán vuestros jefes de casa cuando seáis seleccionados. Ahora sí, bienvenidos a Hogwarts.

QUÉ ES LA VIDA SIN UN POCO DE RIESGO - Sirius y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora