Dentro del Juego (Completa) (#1 Golden State)

Capitulo Uno: La regla de los tacones.

Amber

Octubre 2016

Camino lo más rápido que las zapatillas me permiten. Si tan solo hubiese sabido que tendría que venir a la arena de entrenamiento no me habría puesto en modo ejecutiva trayendo estos estúpidos tacones a juego con la falda de tubo y la blusa blanca que justo ahora se adhiere a mi espalda debido al sudor que la caminata me ha provocado, sin contar el calorón que hace en las calles de Oakland. Soy más aficionada al frío.

—Estúpido Richard — empujo otra de las puertas faltándome solo dos para llegar a mi destino —. Estúpidas puertas.

Nadie nunca me advirtió que ser la encargada del área de publicidad de un equipo de baloncesto sería tan difícil. Nunca fui aficionada de practicar deportes, me gusta hacer ejercicio, pero ¿practicar algún especie de juego? Gracias, pero no gracias. Aunque puedo sentarme y ver alguno que otro partido.

—Buenas tardes señorita Rimes — el guardia que se encarga de evitar que alguien interrumpa la practica me saluda. Puedo estar enojada, pero eso no quiere decir que seré una perra con todo el mundo, al menos no con él.

—Buenos días, Tobby. Sabes que no molestaría a las estrellas si esto no fuera urgente.

—¿Richard? — él lo sabe a la perfección —. Debería decirle que no es su esclava.

—El piensa que todos somos sus esclavos. Es un idiota.

—No paga mi sueldo, aunque si lo hiciera de igual forma concuerdo con usted — le doy una enorme sonrisa antes de que me abra la puerta.

Lo primero que veo al ingresar es a Drake Grayson corriendo a toda velocidad de un extremo de la cancha al otro mientras del entrenador le grita que lo haga más rápido.

Busco con la mirada al causante de mis dolores de cabeza, divisándolo en una de las esquinas del lugar hablando con lo que deben ser el equipo de grabación.

Hace algunos años este equipo no era nada, ahora Golden State es la sensación de la NBA. La temporada esta por empezar lo que trae a todo el mundo como loco trabajando, haciendo preparativos y en mi caso, trabajando en el área de publicidad.

El mundo quiere saber más sobre este equipo, en especial del par de "hermanos" que se encuentran tirando del lado contrario al que me dirijo.

Steven Collingwood y Kayden Tyson o como los medios los han nombrado: Splash Brothers.

El sonido de mis tacones debe hacer mucho eco porque todos dejan de hacer sus actividades para mirarme. Estoy tan acostumbrada que todo lo que hago es sonreír y continuar con mi caminado.

—¿Porque tardaste tanto? — no me esperaba un mejor recibimiento si soy sincera. Me abstengo de rodar los ojos y le dedico una sonrisa forzada.

—Había mucho tráfico — es la simple respuesta que le doy. Aunque la verdad es que me encantaría contestarle que mi tardanza quizás se deba a que estaba en una reunión para ver todo lo relacionado con el arranque de la temporada, reunión a la cual el debió asistir, pero claro que solo lo pienso. Es capaz de sacarme alguno de sus comentarios machistas si llego a hacerlo.

¿Porque justo cuando conseguí el empleo el anterior gerente de marketing decidió retirarse? 

Richard Willis es el jefe con el que esperas jamás toparte, pero con el que por desgracia yo he chocado. Si el hombre no fuera un machista, reconociera cuando hago un buen trabajo y no me mirarse siempre como si fuese su almuerzo, podría caerme bien. Pero el cabron tenía que ser exactamente eso. Maldito pervertido machista.