Incandescente

Tiempo

"Dícese del período determinado durante el que se realiza una acción o se desarrolla un acontecimiento."

Se siente terriblemente incómodo.

Atrapado en unas ropas a las que no suele estar acostumbrado.

El cuello de la camisa blanca que ha elegido le oprime con demasiada fuerza la zona de su cuello, complicando la tarea de tragar, la corbata lo hace sentir atado y la americana negra no le permite moverse con normalidad.

Aún así está dispuesto a plantarse en ese lujoso hotel ubicado en el centro de la capital donde Noemí celebrará un pequeño festejo por su reciente  compromiso. 

Solo de pensar en la mujer que lo cuido durante buena parte de su vida contrayendo matrimonio con otro hombre le hace tener sudores fríos, no quiere ni imaginar que su nueva pareja tenga algo en común con Rubira. 

La Navarra y Luis han iniciado una nueva tradición entre ellos, todos los lunes compartirán juntos un almuerzo rápido antes de volver a su puesto de trabajo. Fue en esa pequeña reunión cuando Amaia viendo la intranquilidad del chico ante el evento le aseguró que sería algo muy informal e íntimo entre los amigos más cercanos a la pareja y la familia del novio, un picoteo sencillo acompañado de una melodía tranquila de la que la misma Amaia se encargará.

Apunta en su cabeza que lo primero que debe hacer al llegar es discutir con ella sobre el termino informal.

Miriam llama a la puerta de su habitación y se adentra en ella para robarle un beso en la mejilla que el gallego acepta encantado. No es muy usual en ella repartir muestras de afecto con él por lo que ni siquiera hace falta que le mire a los ojos para saber que hay algo que le preocupa.

-Estas muy guapa - afirma el joven cogiéndola por una mano y dándole una vuelta sobre sus pies haciendo que emita una carcajada - Ese traje te queda espectacular.

-Mi idea era ponerme el vestido rojo, pero no me sentía del todo cómoda - suspira mirándose en uno de los espejos recolocándose un par de mechones - Ya sabes que desde el parto se me ha quedado el cuerpo raro y ya se que no debería preocuparme por esas cosas, pero lo hago.

-Estas preciosa con lo que te pongas, no te preocupes por eso. Recuerda que tu cuerpo ha conseguido dar vida a tu hijo, eso es lo mas importante-deja una caricia sobre su pelo y se dirige al baño donde presiona el frasco de colonia un par de veces para rociar su cuello y muñecas - Ya estoy listo ¿Los demás ?

-Por eso venía, Miguel no quiere venir - pone los ojos en blanco, levantándose con rapidez al escuchar el llanto del bebé desde la otra habitación - Habla con él, te le pido por favor.

Van con el tiempo justo así que en un par de zancadas se coloca en el cuarto que Roi ha cedido a compartir con el catalán desde hace unos días, aunque suelen acabar las noches discutiendo por las historias que Miguel le cuenta para aterrorizarlo.

Examina desde la distancia el cuerpo del chico, que descansa sobre la silla de ruedas, que de forma involuntaria le suma varios años por encima. El catalán no es capaz de apartar la mirada de la ventana y Luis esta casi seguro de que se ha quedado cautivado de la maravillosa luz del atardecer.

La imagen que hay ante sus ojos despierta en Luis una gran tristeza, que se agrava aun mas al identificar el cable transparente situado bajo las fosas nasales del muchacho, conectando su cuerpo directamente al oxígeno portátil que la doctora le entregó a Roi en cuanto salieron por la puerta del hospital.

Durante esta semana Miguel ha avanzado bastante, ya es capaz de andar varios metros sin cansarse, vestirse, salir a por el pan e incluso ducharse sin necesitar ayuda. Pero siempre atado a una máquina que se encarga de suministrarle el oxígeno necesario que requieren todas estas actividades que para cualquier persona serían de lo más corriente.