Capítulo 36

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Cl- AMIIIIIIII , AMIIIIII , AMIIII - Es lo único que escucho, llorando a mares y gritando estas palabras. Cada vez se escuchan más de fondo hasta que en un momento de golpe paran los sollozos , no se que ha pasado.

Me asusto mucho ya que los llantos de mi niña han parado en seco, no se si le habrán hecho algo, espero que no le hagan nada malo. Me desplazo hasta estar al lado de la ventana, a ver si consigo descubrir algún lado por el que escaparme. Pero nada, no puedo saltar por la ventana ya que la habitación está en una planta alta y si salto me voy a hacer mucho daño. Miro, veo un pequeño camino y para mi sorpresa un coche negro que sale a toda velocidad en dirección contraria a la casa. Eso quiere decir que si sigo ese camino podré llegar a algún sitio en el que me puedan ayudar a llegar a Madrid. Pero, ¿Cómo podré salir de aquí, sin que nadie me vea?. Porque durante todo el rato que he estado aquí he estado escuchando voces y la verdad es que hay más de tres personas en la casa. Espero que en algún momento se vayan para poder salir de alguna manera.

Me levanto de la cama cansada de estar mirando las mismas montañas y el mismo camino. Lentamente doy pasos en la habitación, me acerco a una pared donde hay una especie de librería donde hay varios libros viejos llenos de polvo y de telarañas colocados perfectamente. Sigo por la habitación, al otro lado hay un escritorio bastante pequeño, hay algunas hojas y algunos bolígrafos. En los cajones que hay, encuentro dibujos de niño hechos. No hay nada más, así que decido volver a la cama para descansar un poco y a ver si las horas de me pasan más rápido. Camino hacia la cama, pero me tropiezo con algo que hay debajo de la alfombra que está justo a su lado, la levanto y veo que hay como una trampilla. Cuando la voy a abrir escucho unos pasos que se acercan rápidamente y empiezan a mover los candados que hay en la puerta, así que dejo la alfombra en su sitio y me siento mirando por la ventana. Cuando la puerta se abra, miro hacia allí y veo a uno de los hombres que ha venido antes a quitarme a mi niña de mis brazos y se hacer mucho a mi, yo me tiro hacia atrás pero choco con la pared. Cuando solo quedan centímetros en su cara y la mía me susurra.

?- Vas a pagar por todo lo que nos has hecho durante esta tarde.... - Nada más decir esto se quita el pasa montañas y no me puedo creer quién es-.

***

Han pasado cinco días desde que estoy aquí encerrada, cinco días en los que pienso todo el día en mi niña, en como lloraba cuando se la llevaron, pensando en que no le hagan nada malo. Durante estos días lo único que he hecho ha sido llorar, mirar por la ventana, dormir y utilizar el papel y el bolígrafo que hay en la mesa para escribir un diario. En estos cinco días, Cristina no se ha acercado a la habitación, solo ha venido un hombre de negro que no se quien es, este me trae cada día la comida y la bebida, pero no tengo contacto con el ni con el resto de personas que están en esta casa.

Estoy tumbada en la cama, arrinconada en la pared y tapada hasta la nariz con la sábana y el nórdico. Tengo frío, estamos entrando en diciembre y el frío se hace notar, también se nota cuando no te dejan ponerte nada de ropa. Intento volver a dormirme, es lo único que hago, dormir, ir al baño que tengo en la pequeña habitación, si me tuvieron que enseñar que estaba en una puerta que parecía de armario y comer, la poca comida que me traen durante el día. En estos momentos estoy intentado dormir ya que es como más rápido me pasan las horas. Estoy a punto de dormirme cuando escucho la puerta, se lo que significa así que intento hacerme la dormida para ver si puedo evitar la tortura que me vendrá ahora. Pero no, es inevitable, en cuando entre ese maldito niñato mi sueño será interrumpido a la fuerza. Entra pero no me muevo, es más me encojo un poco más en la cama poniéndome en posición fetal y tapándome más con las sábanas.

?- Ya sabes que por mucho que te hagas la dormida o por mucho que intentes evitarlo, no va a suceder. Vas a ser mía durante toda tu vida porque si no eres mía no serás de nadie.

Maldito mal nacido, quién me mandó a enamorarme de él hace cuatro años, desde que descubrí que sólo me quería por dinero lo intenté dejar, pero me obligo a estar con él durante bastante tiempo, me amenazó y me dijo que sino estaba con él mataría a mi familia. Estuve meses con él obligada hasta que me hice la fuerte y se lo conté a mi hermano que junto a Juan me sacaron de ese infierno. Hasta hora no había vuelto a escuchar sobre él pero el primer día del secuestro se presentó a la habitación y me dijo que si no era suya no sería de nadie.

Como cada vez que entra, viene rápidamente hacia la cama donde estoy, si estoy durmiendo me despierta, tira de las sábanas que hay, se pone encima mío con una pierna a cada lado de mi cuerpo y coge mis manos y las mantiene encima de mi cabeza para que no me pueda mover. Empieza a manosear todo el cuerpo, sus susurros en mi oreja, sus chupetones marcando cada rincón de mi cuerpo, ignorando mis gritos y logrando hacerme mucho daño.

M- NOOOO, NOOOO, PARA POR FAVOR !

Me vuelvo a despertar sofocada,llorando, nerviosa por si otra vez es realidad. Pero no, es la pesadilla desde hace dos noches. La pesadilla que se hizo realidad durante la madrugada y que por más que lo intento no consigo sacarlo de mi cabeza.

¿Imposible amar?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora