Traf

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No podia apartar mi mirada de aquel hombre, lleva el pelo canoso, pero por el paso del tiempo es algo normal.
Nose si el sabrá quien soy yo, lo que si sé, es... que el conocia a mi madre biológica, y por como mi madre le defendia, puedo imaginar que eran buenos amigos e incluso me atreveria a decir que fueron algo más.
Tome mi asiento junto a Sanji, y me quede perpleja, pensando en como ese señor... ese hombre... es el padre de Torao. Torao jamás me hablo de su familia, siempre a sido muy reservado, siempre pensé que seria huérfano, pero está claro que me equivoqué.

-¡Robin!- me llamó padre a la vez yo salí de mi trance.

Le miré pero no me inmute, me quede estatica a la espera de que dijera algo más, continuaba sentada junto a Sanji.

-Vamos Robin, acercate, quiero que conozcas a alguien.- me dijo de segundas.

Yo, como buena hija que soy, me levanté, y me encaminé hacia los tres hombres, pero sin dejar de mirar a ese señor, estoy segura de que es él.
A poca distancia de ellos, frene mis pasos y saludé.

-Buenos dias- sonreí.

-Robin, este es el padre de Torao, el señor Trafalgar.- dijo padre mientras señalaba al nombrado con una sonrisa.

Mi estomago de golpe se hizo un nudo, y mi mente se nublo, recuerdo que mi madre le llamaba Tra o Traf, supongo que era un diminutivo de su apellido.

-Hola señorita Robin, tu padre y sobre todo Law me han hablado muchisimo de ti, tenía muchas ganas de conocerte.- me dijo con una sonrisa mientras alzaba su mano para que yo la estrechase.

Me quede ahi, inmovil de nuevo, ultimamente me pasa mucho, miré su mano por unos segundos, y me decidi a estrecharsela, fué ahi cuando le miré a los ojos  y recorde el momento en el que le conocí.

-Igualmente, Torao nunca me habló de usted- dije con una sonrisa más que falsa.

-Bueno, mi hijo es muy reservado para sus cosas y su familia, tu mas que nadie deberias saberlo, hace tiempo me comento que tuvisteis algo parecido a una relación.- continuaba con su sonrisa y despego porfin su mano de la mia.

No me esperaba ese comentario ¿que es lo que Torao le contó de mi a su padre? Esto va a peor.

-Claro...- fue lo unico que dije.

-Torao podeis marcharos a desayunar tranquilos, tu padre y yo tenemos cosas de las que hablar.- dijo padre despidiéndose de nosotros.

-Ha sido un placer conocerte Robin- Traf me cogió la mano y beso mi dorso.

Estos se marcharon quedando Torao y yo solos de pie, uno al lado del otro.

-Vamos a desayunar.- me dijo Torao.

-Torao ¿que es lo que le has contado a tu padre de mi?- dije un poco enfadada.

-Tranquila Nico, tu secreto está a salvo.- me sonrío.

Ya sin mas dilación le acompañé a la mesa y tomemos nuestros respectivos asientos, todos desayunaban, Torao ya se había animado a comer algo, yo les miraba a todos, todas sus voces se mezclaron en mi cabeza, y miré fijamente al que alguna vez fue mi compañero en la cama. Pude afirmar que no sabía absolutamente nada de su padre, baje mi mirada y comence a desayunar.

Durante todo el día, no volvi a ver ni a padre ni a Traf, estaba preocupada por lo que se podría avecinar.
Las horas se convertían en minutos y los minutos en segundos, la tarde se me hizo eterna, y esque esta noche volveré a ver a mi espadachin.
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Antes de la hora de cenar, decidí llevarme a Sanji y a Franky para hablar, necesitaba una cuartada distinta para esta noche, padre no creera que voy de nuevo a ver la nieve, aunque es cierto que sigue nevando. Decido que el mejor sitio para hablar es en el jardín, sin cámaras ni paredes en las que alguien se pueda esconder y escuchar.

-Bueno mi preciosa flor de cerezo ¿que planes tienes?- me decia Sanji mientras se encencia un cigarro e inhalaba el humo de este.

-Simplemente he pensado, que quizas si le decimos que salimos un rato a tomar algo no lo vea sospechoso.- dije sin más.

-Nolose... Robin, si padre se entera-

-No- le corte la frase a Sanji. -no se enterara, por favor Sanji, eres el unico que puedo evadir a Nami y a Viola, eres el unico en el que confio plenamente, si te cuento todo esto es porque creo en ti- le dije con mis ojos vidriosos.

-Robin, es un plan ridiculo, padre no creera que vienes con nosotros a tomar algo.- le dió otra calada a su cigarrillo.

-Sanji... necesito verle.- le dije muy triste, el me comprendió al instante.

-Esta bien, ya veremos como lo hago y que excusa le echo a padre para que se lo trage, y que conste que lo hago por ti, que sepas que no me agrada nada ese cabeza de alga- dijo esto último algo cabreado.

-Yo me encargaré de llevarte a tu destino- dijo Franky eufórico a la vez que hacia una pose muy rara.

-Gracias Sanji, gracias Franky.- les sonreí.
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Todos estamos sentados en la mesa, padre como siempre la preside, Torao ya no está, y puedo decir que su padre tampoco. Sanji, Franky y yo nos miramos complices, yo espero a que Sanji diga algo pero parece no decidirse.
Nami se levantó para salir de la sala, supongo que se dirige a la cocina o al baño. Sanji aprovechó que su "novia" no estaba para decir:

-Padre, no me encuentro muy bien- dijo Sanji de repente.

-¿Como?- dijo padre.

-Estoy mareado, creo que mi cabeza esta ardiendo y me duele muchisimo la espalda.- dijo sin más poniendo cara de enfermo.

Franky y yo nos miremos y yo con la mirada le preguntaba que hacia, el me respondia encogiendo sus hombros en señal de desconocimiento.

-Llamaré a Torao para que venga- dijo padre.

-¡No!- grito Sanji llamando la atención de manera excesiva.

-Lo que Sanji quiere decir es que Torao tenia planes para esta noche, pero podemos llevarle al hospital- dije saliendo en su rescate.

-Si tan mal se encuentra, adelante, podeis marcharos.- dijo.

-Franky nos acompañará como chofer- le dije.

-Esta bien-

Salimos loa tres de la casa y una vez en el coche comencemos a reírnos.

-Nose como a podido salir bien- decia Franky a carcajadas.

-Ni yo mismo sé como ha salido tan bien- dijo Sanji encendiendo un cigarro.

-Bueno, pues vamonos- dijo Franky a la vez qué arranacaba el motor del coche.

LA LADRONADonde viven las historias. Descúbrelo ahora