Más allá de los espejos [COMPLETA] ✔️ (Draco Malfoy, fanfic)

Capítulo 05 | Los siete Potter

-05-

-Los siete Potter-

Se encontraba sentada en la cabecera de la mesa, rodeada por sus más fieles mortífagos. Le gustaba esa posición, no sólo porque así demostraba que era la líder, la suprema entre todos, sino porque desde aquel asiento podía ver perfectamente la cara contraída de dolor y horror de Charity Burbage, que flotaba sobre la mesa, sin posibilidad de moverse.
 
   De pronto, un desgarrador grito interrumpió lo que ella estaba diciendo a sus seguidores. 

—¡Colagusano! —se encontró diciendo Hope, con una voz que en realidad no le pertenecía, potente y clara, como el fuego de la chimenea de aquella habitación—. ¿No te pedí que mantengas callado a nuestro invitado? 

—Sí, mi señor... En seguida, mi señor... —el hombre regordete que atendía al nombre de Colagusano se precipitó fuera del salón y desapareció escaleras abajo, camino al sótano. 

—Como decía... —continuó hablando antes de ser interrumpida, y ésta vez se levantó de la mesa para pasearse alrededor de quienes se encontraban allí sentados—, yo debo ser quien mate a Harry Potter. Pero me enfrento a un pequeño problema. Y es que mi varita y la de Potter comparten el mismo núcleo. Son, por así decirlo... gemelas. Podemos herirnos pero no hacernos un daño mortal el uno al otro. Si quiero matarlo, necesitaré la varita de alguien más... —Hope ondeó su negra y húmeda túnica con olor a serpiente mojada mientras se paseaba lentamente, hasta que se detuvo tras la persona que deseaba humillar en ese momento—. ¿Qué me dices tú, Lucius? 

El aludido comenzó a tiritar mientras pronunciaba con voz temblorosa:

—¿Mi señor...?

—Requiero tu varita —ordenó ella, implacable como siempre, estirando su mano hacia el desdichado mago caído en desgracia—. Dime, Lucius, ¿de qué es?

—De olmo, mi señor —susurró Malfoy. 

—Olmo... —repitió Hope con burla, para luego volver a pasearse alrededor de la mesa—. ¿Sabe alguien por qué los Malfoy se encuentran tan descontentos con mi presencia aquí? 

—Mi señor —se apresuró a decir la voz emocionada de una mujer situada junto a Narcisa Malfoy—, es un honor tenerlo aquí, en la casa de nuestra familia. Nada podría complacernos más —chilló Bellatrix.

—"Nada podría complacernos más" —repitió Hope—. ¿Ni siquiera lo compararías con el felíz acontecimiento que se ha producido en tu familia, Bellatrix? Me refiero a tu sobrina, y también de ustedes, Lucius y Narcisa, tu prima, Draco. Acaba de casarse con Remus Lupin, el hombre lobo. 

Draco tragó saliva mientras a su alrededor estallaban risas burlonas. Hope miró fugazmente a la persona que se encontraba junto al heredero de los Malfoy, una chica. Cabello negro como la noche y ojos de un iris tan oscuro que apenas se distinguía su pupila. Se veía asustada y temerosa, cual cachorro abandonado a su suerte. 

—¿Qué dices tú, Draco? ¿Te ocuparás de los cachorritos? —le preguntó Hope, mirándolo nuevamente de una forma que le heló la sangre. 

Draco no respondió, estaba tan quieto que parecía que ni siquiera respiraba. A continuación, el cuerpo de Charity Burbage comenzó a moverse hacia el centro de la mesa, guiado por la varita que ahora le pertenecía a Voldemort. 

—Para quienes no saben, hoy nos acompaña la señorita Charity Burbage, quien hasta hace poco enseñaba en el colegio Hogwarts de Magia y Hechicería. Estudios muggles era su asignatura —otra oleada de risas inundó el salón—. Ella cree que los muggles no son tan diferentes a nosotros.