•Alex•
Volví al departamento cansada pero muerta de ganas por ver a mi Pipes.
El vuelo había sido tranquilo y nada relevante, pero demasiado largo para mi parecer... Habían sido a penas un par de días, pero yo la extrañaba como si no la hubiera visto en años.
Eran cerca de las cuatro de la mañana, y los faroles del patio a penas cumplían su función, más sin embargo el cielo por fin despejado dejaba a la luna alumbrar todo a su paso.
Estaba un poco fresco el aire, pero la brisa era agradable; siempre he sido partidaria de los climas fríos a diferencia de mi esposa.
Sonreí solamente de pensarla seguramente acostada boca abajo en mi lado de la cama.
Caminé por la acera de entrada nuestro departamento, cargando la maleta para que las ruedas no hicieran ruido, no quería despertarla, quería solo verla dormir, enamorarme aún más (como si fuera posible) de ella y contemplarla...
Abrí la puerta despacio y dejé mi maleta a penas al pie de la escalera cuidando otra vez el no hacer escándalo. Me quité los zapatos que llevaba y subí de puntillas apresurada hacia la habitación.La ventana estaba abierta, y las cortinas se ondeaban dejando entrar el aire fresco de la madrugada, al igual que los delicados rayos de la luna que caían como cascadas sobre la cama.
La habitación estaba fresca, más de lo que resulta agradable, pero no al grado de decir que estaba fría.
Puse especial atención a la cama destendida y tal y como lo imaginé, Pipes dormía de mi lado de la cama boca abajo abrazando mi almohada. Las sábanas estaban enredadas colgando a sus pies, mientras que ella estaba completamente descubierta.
Lo primero que hice fue cerrar la ventana, no quería que fuese a enfermar.
Me quité los pantalones despacio y luego la blusa, quedando solo en ropa interior, pensé meterme solo a la cama y descansar que vaya falta que me hacía.
Debería ponerme pijama, pensé, pero quería sentir la calidez del cuerpo de mi hermosa esposa y no había mejor manera de disfrutarlo que piel con piel.
Volví mi vista hacia ella, hacia mi esposa que estaba durmiendo tan tranquila que ni siquiera había escuchado mi presencia.
Llevaba un short de seda que debido a sus movimientos al dormir dejaba ver más de lo que debería. Sus largas piernas estaban descubiertas hasta donde su torneado trasero comenzaba, podía verlo bajo la tela de su short asomándose de a poco levantado y precioso. Me senté a su lado en la cama y pasé mi mano por lo largo de su pierna, haciendo que ella se estremeciera a penas un poco; subí mi mano por su piel hasta su trasero y lo acaricié despacio debajo de la tela del short.*Piper: -Alex...- suspiró haciéndome sonreír.
*Alex: -¿Cómo sabes que no ha sido el vecino que se coló en la casa para verte dormir?- bromeé bastante complacida por haberla escuchado suspirar mi nombre a penas la toqué.
*Piper: -Porque conozco muy bien tus manos y tus caricias... Por un momento pensé que estaba soñando... Te he extrañado tanto, amor...- se dió la vuelta adormilada y como si de imanes se trataran, mis labios fueron al encuentro de los suyos con suavidad.
*Alex: -También te extrañaba princesa, mucho...- dije a penas nos separamos.
Bajé mi mano para jalar el cuello de mi camiseta que ella llevaba puesta y pude ver sus pequeños senos erizados. -Mmm...- dije seductora y ella en seguida se sacó la camiseta.Mi Pipes era preciosa, su piel blanca y suave estaba como un lienzo en blanco frente a mí, solo esperando a que mis caricias dibujaran amor sobre ella.
Más que deseo sexual tenía ganas de cercanía, quería sentirla y que me sintiera, que ambas supiéramos que no había más distancia, que estábamos piel con piel de nuevo.
Acaricié su mejilla, su cuello... Pasé mis dedos sobre sus pechos haciendo círculos a penas rozando con mis uñas sus pezones y provocando alteraciones en su respiración.
Acaricié su abdomen delicioso que se arqueaba conforme iba bajando mis manos.
Sus manos me apretaban contra ella, me acariciaban...
La besé otra vez en los labios, había extrañado tanto su sabor que parecía casi irreal; bajé con besos por su cuello, pensé en avanzar rápido porque anhelaba el sabor de su excitación en mi boca, pero me contuve... Dos días sin ella y yo quería adorarla, quería hacerla sentir amada con cada beso, con cada caricia, con cada sonido...
Besé sus clavículas, sus pechos, sus pezones que erectos me mostraban su excitación, ella desabrochó mi sostén con delicadeza y lo deslizó por mis brazos para lanzarlo lejos, al tiempo que sus labios fueron al encuentro de mis pechos, solo los besó con quietud, con mucha suavidad mientras mis ojos se grababan aquella imagen tan sublime.
Volví a besar sus labios y continúe mi descenso con besos a penas suaves. Besé también su abdomen sonriendo, porque poco a poco me acercaba a dónde más quería llegar.
Mientras bajaba con besos lentos la observé, tan hermosa mordiéndose el labio inferior y moviéndose por el placer que sentía; con mi nariz rocé bajo el elástico de su short.
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OK, I'M HERE
FanfictionDespués de tantos problemas y años de estar separadas, el destino se encargó de unir a Piper Chapman y Alex Vause una vez más... ¿Será que por fin tendrán su "felices para siempre"? No te pierdas ésta última parte de mi trilogía Vauseman. [Parte 3/3...