OK, I'M HERE

22 - No más secretos

•Alex•

El asunto con el francés salió mejor de lo que esperaba, solicitaba un puesto medio, quizá ayudando en la evaluación de nuevas tecnologías, es decir, en control de calidad, o podría ser incluso en marketing, pero el tipo tenía ya un puesto para mí: Jefa de exportaciones, ¡y joder! Eso sonaba bastante bien...
Solo lo platicamos y más adelante acudiré a la firma de contrato formal.
Salí de ahí sintiéndome fuerte, era increíble lo que los negocios hacían con mi mentalidad, era más que obvio que no me había equivocado en tomar este camino.
Avancé con rapidez cruzando la avenida con destreza, los autos estaban detenidos debido a un semáforo en rojo, sentía ojos mirándome y me sentí bien, seguramente mi actitud segura estaba haciéndome destilar el efecto "Alex Vause" por todas partes.

'¡Hey guapa! ¿Por qué caminas por la avenida si puedo llevarte en mi auto?'

Escuché a un tipo gritarme mientras sonaba el claxon y se asomaba por la ventanilla, negué con la cabeza sonriendo y me giré hacia él.

*Alex: -Gracias por el cumplido, pero soy lesbiana y estoy felizmente casada, y embarazada por cierto... ¡No me podría ir mejor en la puta vida!- acaricié mi barriga y le guiñé un ojo pensando en mi esposa que me esperaba en la cafetería de en frente, ganándome una sonrisa tímida y unas mejillas sonrojadas mientras el tipo metía la cabeza dentro del auto de nuevo.
Seguí caminando con la sonrisa en los labios hasta ver a Pipes en un rincón mirándome como si yo fuera la mismísima Madonna. Avancé un pie a la vez entornando mi mirada en sus ojos, yo era el depredador y ella la presa. Amaba ver sus mejillas sonrojarse solo por mi mirada, y definitivamente éste depredador ansiaba devorar a su presa.
Me lamí los labios expectante y la vi mirarme con seriedad. Soltó un leve suspiro antes de comenzar a hablar, sabía que algo no andaba bien.

*Piper: -Al, tenemos que hablar.- me dijo terminantemente.

*Alex: -¿Qué pasa? ¿Estás bien?- mi sonrisa se desvaneció y sentí mi vientre tensarse.

*Piper: -Sí, pero no quiero hablar aquí, ¿de acuerdo? Vamos a casa...- asentí y la tomé de la mano depositando un par de billetes en la mesa junto a su taza de café a medio tomar.

Fuimos en el auto la mayor parte en silencio, solo el sonido de la música y los autos avanzando con lentitud, al igual que los claxons de los conductores ansiosos nos acompañaban en el ambiente, hasta que sentí su mirada clavada en mí y en un semáforo en rojo me giré para verla.

*Piper: -Eres preciosa Alex...- Titubeó.

*Alex: -Y exitosa también...- le guiñé un ojo con arrogancia.

*Piper: -¿Sí? Te ha ido bien en la reunión, ¿cierto? Yo lo sabía...-

*Alex: -Sí, seré la nueva jefa de exportaciones... ¡Joder! Suena tan bien...- arrastré las últimas tres palabras como provocación.

*Piper: -Es un título sexy para una chica sexy...- se mordió el labio. Y estábamos ahí, nuevamente cayendo en un juego de seducción a penas iniciado y mi pulso ya se había acelerado.

*Alex: -Tienes una esposa muy sexy y exitosa, ¿cómo te hace sentir eso señora de Vause?- alargué mi mano para acariciar su mejilla y con el dedo pulgar recorrí su labio inferior haciendo que soltara un suspiro.

*Piper: -Muy... caliente...- sus mejillas se tiñeron de rojo y sonreí complacida mientras avanzaba nuevamente por el cambio de luces en el semáforo.