"Imperfectos"

Capítulo 7: Un cocodrilo en furgoneta

7-Un cocodrilo en furgoneta

**Kenpachi**

Muerdo el palillo de entre mis dientes mientras agarro la manguera de la gasolina mirando cómo el contador de litros empieza a subir. Tsk! que aburridos son los turnos de noche, pensé que sería más emocionante coger este turno por si alguien intentaba atracarme y podía darle una buena paliza, pero solo vienen pajilleros o puteros que buscan los locales de alterne de la carretera para echar un polvo rápido. No puedo culparles sinceramente...porque yo normalmente lo hago cuando me dan el sueldo del mes. Joder...a ver si me dan la próxima paga porque estoy a dos velas...

-¡¡Oye tú!! ¡¡me has echado más litros de los que te pedí!!-

-Ah ¿y qué? –

- ¿Cómo qué y qué? ¡no pienso pagar la diferencia!!-

-Oh ¿no? ¿estás seguro de eso, pequeña cucaracha??- miro letal al cliente que parece cagarse de miedo al sentir mi instinto homicida y se mete corriendo en el coche intentando arrancar hasta que nota cómo estoy pateándole la matrícula de atrás haciéndole gritar.

-¡¡Quédese con todo!! ¡¡no pienso volver a este sitio!! ¡ladrón!!- suelto una carcajada cuando engancho al vuelo los billetes que me ha tirado por la ventana antes de salir pitando y los cuento uno por uno. Perfecto...ya tengo la paga que necesitaba para enterrar mi polla en el culo de algún putito...

-Kenpachi- abro los ojos al escuchar esa molesta voz a mi espalda y al girarme, encaro la fría mirada de mi hermano Ganryu y el cual viene bastante bien acompañado. Toda mi atención pasa de él al chico bajito y delgado, de piel pálida, cabello negro atado en una coleta baja y unos grandes ojos azules grisáceos inexpresivos enmarcados tras unas gafas de ver, que se mantiene callado observándome. Este chico...

-Acabo de ver la escenita, hermano ¿no te da vergüenza? - Ganryu me arrebata de la mano el dinero que había conseguido haciéndome gruñir y no tarda en señalarme al chico.

-Se llama Kuchiki Haruka. Desde hoy trabajará contigo a jornada parcial-

- ¿Este enano va a trabajar en una gasolinera?? ¿por la noche??- el chico entrecierra los ojos tras sus gafas a modo de desdén lo que me hace reír con más malicia. –Venga ya Ganryu, este es un nuevo culito que te has echado y has venido a restregármele por la cara-

-Controla lo que dices, hermano- Ganryu me amonesta como si fuera un niño y veo que el chico resopla conteniendo su rabia hacia mí. Ju, me hace gracia la cara que se le pone al enfadarse. Le hace más follable.

-Tú seguirás ateniendo a los clientes fuera de la gasolinera y Haruka atenderá la tienda. Es mucho más listo que tú para hacer los cobros y de paso me aseguraré de que no me sigues robando-

-Joder Ganryu, tú eres el puto dueño de todas las gasolineras de Karakura y yo el encargado de ésta que está a las afueras a tomar por culo ¿no debería tener más compensación? -

-Es la gasolinera que menos beneficios me da y a la que nadie quiere venir por tu culpa. Este sitio necesita un lavado de cara y Haruka es perfecto para ello-

-Nunca me has llamado feo tan directamente, cabronazo- le gruño a Ganryu el cual se limita a alzar la barbilla desafiante. De verdad que detesto que él sea el hermano mayor, que tenga todos los privilegios y que para colmo, sea un puto alfa.

-Me suda los huevos a quien pongas en la tienda, pero cuando los clientes vean a este crío, le intentarán violar una y otra vez ¿no ves la cara de omega que tiene? -

- ¿Cómo sabes que soy un omega? - por fin escucho hablar al chico que no ha podido resistir seguir callado y su mirada fría sigue atravesándome. Me limito a sonreírle y hago un gesto alrededor de mi cuello haciendo referencia al suyo cubierto por un collar de cuero. Está claro que es un omega y no solo por eso, sino por su aspecto. Joder...es precioso el jodío.