"Imperfectos"

Capítulo 29: Un regreso salvaje

29-Un regreso salvaje

**Zangetsu**

No puedo despegar mi mirada del frágil niño al que Shukuro está atendiendo mientras Sen y yo permanecemos sentados en una cafetería frente a ellos con una tensión que podría cortar el ambiente. Shukuro se muestra muy risueño mirando al niño mientras le acaricia y el pequeño se limita a hacer leves movimientos de cabeza sin decir nada. Me provoca un nudo en la garganta ver sus ojitos oscuros mirándome fijamente.

-Kanon-chan está muy emocionado de conocerte Zangetsu, aunque no pueda decírtelo con palabras-

-No... ¿no puede hablar? - Sen rompe el silencio tras haber salido del shock inicial cuando Shukuro dijo que el pequeño era mío y éste asiente solemnemente.

-Mi pequeño tuvo muchas dificultades al nacer, fue muy prematuro y eso le ha afectado a nivel cerebral, no puede controlar mucho el movimiento y el habla es dificultoso, pero se comunica a través de gestos y gemidos ¿verdad Kanon-chan? – Shukuro vuelve a sonreír de manera escalofriante mientras peina algunos mechones negros del cabello del niño. –Ha seguido varios tratamientos, pero como imaginaréis no son nada baratos...por lo que he tenido que trabajar muy duro para mantenerle, pero ya es hora de que su padre también colabore en su manutención ¿no crees Zangetsu? -

- ¿Por qué no me dijiste nada? no recuerdo haber pasado ningún celo contigo, me temo que te estás inventando todo esto tomándolo como una venganza personal-

-No me hagas reír Zangetsu ¿tú has visto a Kanon? ¿acaso vas a negar que lleva sangre Coyote en las venas? -

-Podría ser de mi padre incluso ¿Quién me dice que no te has acostado con él? -

-Me ofendes. Sabes que siempre he estado junto a ti ¿acaso has olvidado todas las veces que hemos follado intensamente? En varios sitios...en diferentes posturas...incluso en un celo agresivo que no recordarás, pero fuiste tan salvaje Zangetsu...-

Antes de que pueda hablar, oigo el rechinar de la silla de Sen cuando éste se levanta y sale de la cafetería en silencio. Miro furioso a Shukuro el cual abraza al niño en el carro haciendo que de nuevo me quede sin respiración.

-No es justo que yo cargue con esto solo, Zangetsu...al principio tuve miedo al ver cómo nació Kanon, pensé que le rechazarías porque ya tenías a tu omega y tus hijos, pero...mi hijo merece también la atención de su padre y si no se la das, me veré obligado a tomar medidas legales-

- ¿Cómo te atreves? No tienes nada que hacer contra mí-

- ¿Seguro? Tengo a un hijo con discapacidad ¿crees que un juez no se ablandará al ver a un omega soltero sin recursos teniendo que criar a un niño así solo? Ser omega no son todo desventajas, sino díselo al tuyo- gruño inevitablemente cuando menciona a Sen, lo que hace que no solo Shukuro sino toda la cafetería se encoja un poco de miedo al ver mi reacción. Decido salir del local para seguir corriendo a Sen hasta que consigo darle alcance y cuando le abrazo, siento como me golpea el pecho varias veces llorando.

-Sen...por favor, cálmate...vamos a solucionarlo, esto no quedará así...-

- ¿Qué vas a arreglar? ¿te has fijado en los ojos de ese niño, Zan? ¡es idéntico a Hina!! ¡¡igual a ti! ¿Cómo vas a rechazarle? Encima ese pequeño...oh dioses, Zangetsu ¿por qué? ... Me juraste que yo era el único omega con el que has compartido el celo...me mentiste...-

-¡¡Sen! – le agarro del brazo intentando retenerle y veo como se zafa negándome con la cabeza. Puedo sentir su intenso dolor y eso está haciendo que el mío aumente también.

-Tengo que irme a trabajar. Necesito...estar a solas unas horas. No me sigas- maldigo entre dientes al tener que dejar ir a mi pareja y me restriego las sienes intentando aclarar mis pensamientos. Tengo que arreglar esto como sea. Hay algo que no me encaja, ¡me es imposible creer que dejara preñado a Shukuro! Dios...no esperaba esto en absoluto...maldita sea...