"Imperfectos"

Capítulo 9: Unas mallas provocativas

9-Unas mallas provocativas

**Renji**

Sujeto el delantal con los dientes mientras corro por uno de los pasillos del hipermercado mientras al mismo tiempo me hago una coleta rápida. ¡Joder, hoy me he dormido!! Y para colmo no sé en qué sección me toca ¡últimamente estoy muy distraído!

Bueno no, miento. No he estado distraído, sino que me he estado acostando a las tantas de la madrugada buscando información sobre los deltas en los libros de la Biblioteca general de Karakura. No es que haya mucha información sobre ellos, parece que como si hubieran querido destruir la información, pero lo poco que he podido aprender, es suficiente para poder conocer un poco más a Byakuya, o al menos intentar saber qué se siente al estar en su piel. La verdad es que ser un delta es una mierda, porque podrían ser mejores que los alfas y todo, pero como no pueden dar descendencia y encima tienen ese carácter tan agresivo aparte del olor a vinagre...uf, si es que no me extraña que esté tan cabreado con la vida. Yo también lo estaría.

Freno casi derrapando con las zapatillas de deporte cuando veo a Sasakibe hablando con Byakuya el cual ya tiene puesto su delantal con la placa y está escuchando las explicaciones del jefe. Ahora entiendo por qué nadie puede apreciar su fuerte olor. Lo está ocultando a la perfección, pero eso le cansa demasiado, como le pasó la vez que tuve que acompañarle a casa. Por no hablar del celo...joder, son super irregulares, aunque al menos no les dura tanto como a los omegas, pero todo siguen siendo desventajas...

-Bien, Kuchiki-san, entonces sustituirás hoy a otro compañero en la sección de ropa interior masculina y...- abro los ojos de par en par cuando el jefe dice eso y en mi mente solo puedo pensar en ideas atropelladas terminando en un mal presentimiento. Ropa interior masculina es igual a diferentes tamaños, igual a dolor en el orgullo de Byakuya por no "llenarlos" adecuadamente. No, no, no ¡ni loco le hago pasar ese mal trago!

- ¡Jefe! - me acerco a ellos viendo como ambos se sorprenden, aunque Byakuya rápido me lanza una mirada letal que me eriza hasta los pelos de la nariz. Imaginaba esa reacción después de lo que descubrí así que intento ignorarle pese a mi voluntad y miro directamente a Sasakibe-san.

-Jefe, déjeme a mí en esta sección, Kuchiki-san aún no conoce la distribución de los estantes y las distintas categorías de ropa interior. Sabe que se me da muy bien engatusar a los clientes que suelen pasar por aquí-

-Mm...en eso tienes razón, Abarai-san. Bien, quédate aquí entonces. Kuchiki-san, vuelve a la zona de alimentación- cuando el jefe se retira, yo me aparto el sudor de la frente, aliviado hasta que Byakuya se detiene al pasar por mi lado paralizándome con su agresivo y ronco tono de voz.

- ¿Te atreves a burlarte de mí? -

- ¿Qué? ¡no! ¿porque dices eso? A mí me mola esta sección, aparte estoy falto de calzoncillos así que ya aprovecho para...-

-Deja de tratarme como a un imbécil ¿acaso te crees que me impresiona trabajar en esta sección? ¿piensas que no uso la misma ropa que tú por mi defecto? Aún sigo teniendo una polla y seguramente más grande que la tuya- me sorprende que me suelte eso directamente porque no me pega en su habla tan "educada", así que intuyo que está tan cabreado que tiene que soltar adrenalina a través de palabras "brutas".

-No quería decir eso...la verdad es que no sé qué hacer para que no malinterpretes todo lo que digo, aunque lo entiendo y...-

-Tú que vas a entender- me escupe esas palabras antes de largarse dejándome con la palabra en la boca como siempre. Cojo aire profundamente y lo expulso lenta y pausadamente. Me tengo que tranquilizar...si fuera otro le habría partido la boca por encararme, pero ya no soy un crío, soy un hombre con sentido común...o un poco...