Me acosté con intención de dormir, pero tenía tatuada en los labios una gran sonrisa. Cada día estaba más cerca de pasar la Navidad con mi None. Esa noche me costó conciliar el sueño, fuí a la cocina a buscar un vaso de agua y de regreso a mi habitación ví entrar por el pasillo a una mujer.
Ella estaba vestida de blanco, su cabello era liso negro y largo, al mirar sus pies noté que estaba descalza y sus pies no tocaban el suelo.
Automáticamente se me erizó la piel. No estaba preparada para eso, pero su imagen no me daba miedo, solo me sorprendió. No era la primera vez que tenía una experiencia paranormal.
La mujer caminó hacia a mí y me susurró "te he estado buscando". No entendí él por qué me buscaba si era la primera vez que la veía. La miré a los ojos nuevamente y ella se fue sobre mí. De alguna forma entró en mi cuerpo y me mostró un fragmento de su último momento con vida.
«Iba en un auto con alguien que asumí, era su pareja, por la forma en la que se tomaban de las manos. De pronto en un descuido se escuchó un ruido estruendoso y ví restos de vidrio y sangre por todos lados. Ella era la chica de la premonición. Salvé la vida de mis padres, pero no la de ella. Inmediatamente unas lágrimas rodaron por mis mejillas.
Ella salió de mi cuerpo y me pidió que la ayudara, no era de Falcón, solo estaba de vacaciones con su novio y ambos murieron en ese trágico accidente. Su mayor deseo era poder entregarle una carta a su mamá con algunas claves y decirle donde estaban guardadas algunas cosas que quería que ella conservara y que a su vez le diera paz por la forma en que terminó su vida».
No pude negarme ante su petición, era lo menos que podía hacer por ella. La invité a pasar a mi habitación y me senté en el escritorio a redactar la carta con los datos que me dictó.
Ella no me culpó por la forma en que se dieron los hechos, estaba feliz porque murió junto a su novio y aunque no lograron casarse y tener hijos, ambos habían sido felices, solo le preocupaba su mamá.
Luego de eso, me dió la dirección dónde debía enviarla y al día siguiente me dirigí a la oficina de correo postal. Ella simplemente me agradeció y dijo lo siguiente −hay muchas personas que te quieren y te cuidan desde arriba. Cuídate mucho, no todos los que te rodean te desean bien− y sin darme oportunidad de pedirle explicaciones se desvaneció. «Los fantasmas o espíritus cuando dan un mensaje nunca lo dicen de forma clara, dejan en el aire esa sensación de duda e incertidumbre».
Después de su partida intenté conciliar el sueño hasta que lo logré. Dormí como unas 6 horas, me levanté como a las 9 de la mañana. Me dí un baño y me arreglé rápidamente, convencí a Merly de que me acompañara y pedí permiso para ir a casa de Luis Angel.
Al llegar a su casa le pedí que me acompañará a la oficina postal de Ipostel. Si estaba con alguno de los chicos no me pedirían explicaciones. Mi hermana estaba encantada porque estaba con él, podían hablar y estar un rato juntos. Me encantaba verla animada y sobre todo poderla ayudar con él. Me les aparté un poco para enviar la carta y nos dirigimos de nuevo a la casa de Luis Angel.
Él nos pidió ayuda en su oficina como secretaria y asistente, las mujeres del pueblo hacían fila nada más para bucearlo y hacerle propuestas nada decentes. Obviamente para él la situación ya era bastante insostenible.
A mi me hizo mucha gracia, no podía creer los alcances de las solteronas del pueblo, lanzarse sobre él como si fuera un salvavidas para su eterna soltería. Mi hermana y yo reíamos con cada ocurrencia de las mujeres que él nos contaba; iban desde encuerarse en su oficina para comérselo con todo y ropa, hasta enamorarlo con platos de comidas típicas.
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Malditos Recuerdos (Saga Recuerdos #1)
RomanceEsta es la historia de Natalie, una joven común que no cree en el amor, pero la vida es caprichosa y se encargará de sumergirla en un triángulo amoroso entre dos chicos. Las confusiones estarán a la orden del día y no le permitirán decidirse por uno...