•僕らの夢• (Haruka Nanase × Oc) [Road to the world]

賭け金 Kakekin

Las primeras horas de la tarde empezaron tranquilas. Blanquecinas nubes adornaban el brillante forro celeste del cielo, desvaneciéndose y moviéndose al compás de las pocas ráfagas que movían con delicadeza las copas de los árboles. Los jóvenes habían pedido un permiso al entrenador para salir un poco antes del entrenamiento, para reunirse con Makoto en la estación del tren antes de ir a Shimogami. El trayecto fue tranquilo, no hubo mucha plática; Natsumi noto el destello de una vaga tristeza reflejado en los ojos de Haru, una vez ya sentados dentro del vagón, por lo que decidió no intervenir en el ambiente. Esto era mucho más de ellos que de ella, solo los estaba ayudando; no le parecía correcto interrogarlos sobre lo que sea que hubiera ocurrido. Al llegar, fueron directamente hacia la alberca, aun sabiendo la baja probabilidad que había.

—Nos dijiste que hoy no practicaban, ¿verdad, Natsu? —inquirió Asahi, asomándose a la alberca a través del cristal templado.

—Sí, o por lo menos eso es lo que me dijeron —asintió Natsumi, copiando la acción del pelirrojo, solo para ver las instalaciones —. Pero más vale comprobar que dejarlo a información ajena.

— ¡¿Entonces no les creías?! —exclamó Asahi —. ¿Inclusive siendo tus amigos cercanos?

—Con esos dos nunca se sabe —señaló la de ojos verdes —. Uno es lo bastante olvidadizo como para perder un teléfono en menos de tres meses, y la otra casi siempre anda en las nubes o con proyectos personales. Así que solamente prefiero corroborarlo.

—A esta hora todavía deben tener clases —comentó Makoto —. Todavía es temprano, además que nosotros nos estamos saltando las nuestras.

— ¿Sabes en que especialidad está? —cuestionó Haru.

—Eso creo, no estoy del todo segura —respondió la chica, sacando su teléfono de la bolsa de su pantalón, entrando a la conversación por la cual le habían mandado la información —. Los mensajes de Hotaru no son muy claros. Los mandó en forma de lista, pero no sé a qué se refiere con cada uno. Pienso que quiere decir literatura al decir «Lt». ¿Probamos?

—Claro —sonrió Makoto —. Al fin y al cabo no perdemos nada, ¿verdad?

—Tal vez tiempo si es que no significa eso —mencionó Asahi —. ¿A quién se le ocurre mandar eso? ¿Qué espera que entendamos? Sin ofender, Natsu.

—No te preocupes —negó levemente Natsumi —. Yo también me pregunto lo mismo. Quizá estaba en clase o en medio de un proyecto de cinematografía cuando se lo pregunté, y no se quería arriesgar para que lo descubrieran, así que optó por acortarlo. O es lo que quiero pensar.

—Bueno, eso ya no tiene importancia —dijo Makoto — Ahora lo más importante es tratar de encontrar a Ikuya.

—Vamos —dijo Haru, ya abriendo la puerta principal de la estructura. Natsumi no se había dado cuenta de cuando este se había apartado del grupo, a su parecer tenía una ansia inmensa que ocultaba a la perfección para encontrar al chico; tragó una pequeña risa al aludir la coincidencia. — ¿En dónde está?

—Por la entrada del campus, según lo que entendí —contestó Natsu —. Habría que regresar por donde llegamos, y cortar por uno de los jardines adoquinados.

—Bien —murmuró antes de cruzar bajo el marco de la puerta —, gracias por... todo esto.

— ¡Haru, espéranos! —gritó Asahi, empezando a correr tras el de ojos azules.

—Lo siento, Natsumi —se disculpó Makoto —. Haru suele apresurarse mucho con cosas como esta.

—No hay por qué. Me acostumbraré sobre la marcha —dijo Natsu antes de salir del lugar.