Viviendo con 5 idiotas

23|Secretos

-¿Qué queréis que os cuente?

-No sé. Algo que creas importante en tu vida- Zack se encoge de hombros.

-Tú cuéntanos todo lo que quieras- añade Daniel.

-Realmente no os quiero contar nada, pero como eso no es una opción... A ver, mi nombre real, elque tenía antes de llegar a Estados Unidos era Sofía Laya Tomás García, pero mo lo cambié al llegar para que fuera más fácil de pronunciar. Tengo un hermano mayor de casi veinte años, un hermano pequeño y otra hermana pequeña. Estos dos son mellizos, tienen seis años. Mis padres nunca me han prestado demasiada atención porque cuando mis hermanos pequeños no habían nacido, mi hermano mayor siempre lo hacía todo antes y cuando lo hacía yo, no era tan importante. Además de que pensaban que todo lo haría bien, y eso es agotador. Y cuando nacieron mis hermanos pequeños, obviamente toda la atención recayó sobre ellos.

>>Nací en Murcia, una provincia al Sur de España. Allí tenía algunos amigos, entre ellos Sam. Mis padres tienen amigos que tienen hijos. Son seis. Son idiotas, estúpidos, asquerosos y están completamente locos- enumero sonriendo y mirando a la nada-. Pero son como mis hermanos y los quiero muchísimo. Soy la pequeña del grupo y la única chica. Ellos viven en Denver ahora. Pero como he vivido con ellos toda mi vida, se podría decir que soy como ellos, que no me consideran una chica del todo- suelto una pequeña risa.

>>Cuando tenía doce años me mudé a Denver. Los amigos de mis padres vinieron con nosotros. También vino Sam. Antes de venir a Estados Unidos, mi abuelo murió. Me habría encantado quedarme con mi abuela, pero no pude. Cuando fui a Denver agradecí con toda el alma el que Sam estuviera conmigo. Hace un año, ella vino a LA. Por lo menos tenía amigos en Denver. Y, bueno, a principio de curso vine aquí y el resto ya lo sabéis.

-Vale, pero ahora tenemos que hacerte preguntas nosotros- recuerda Zack.

-Adelante.

-¿Por qué te fuiste la semana pasada?- pregunta el chico de gafas.

-Ya os lo dije, me fui de viaje.

-Sí, pero no nos dijiste por qué.

-Porque tenía que ir a ver a mi familia.

-Vale- James agita la mano, llamando la atención de todos-, me toca. ¿Cuándo fueron tu primer beso y tu primer novio?

-Mi primer beso fue con doce años. En mi graduación. Ese verano me iba a ir a Denver. Un amigo me llevó a detrás del edificio y se me declaró. Y me besó. Mi primer novio fue en España también. En cuarto curso. Fue un chico que me caía genial. Comenzamos a salir porque él me lo pidió en su cumpleaños. Rompimos tras unos dos meses, a él le terminó gustando otra. Pero no me importó demasiado, seguimos siendo amigos.

-Donny, te toca- dice Zack.

-Vale. ¿Qué hiciste para quedar así?- pregunta mientras me señala.

-Me metí en una pelea para proteger a mi amigo.

-Ajá, pregunto yo- avisa Daniel-. ¿Qué haces con las manos?

Miro mis manos. Soy idiota. Me estoy despellejando los dedos. Es una horrible manía que tengo. Comer o lavarme las manos es un infierno. Pero no consigo dejar de hacerlo.

-Me despellejo los dedos- contesto sin levantar la cabeza.

-Pues deja de hacerlo.

-La cosa es que no puedo. No soy capaz. Es como un tic nervioso. Te toca preguntar, Nick- cambio de tema.

-Vale... ¿Por qué te mudaste a Denver?

-Por el trabajo de mi madre. Mis amigos vinieron también por trabajo. Y Sam...- pienso en si debería decirlo. Solo lo sabe mi familia-. Prometéis no decirle a nadie que he dicho esto, ¿no?- me aseguro. Ellos asienten de forma efusiva-. Vale, Sam... Sus padres se odiaban y la odiaban. Desde que teníamos seis años, ella siempre se venía a mi casa. Solo pasaba por la suya para dormir, y ni siquiera- trago saliva con dificultad y sigo hablando con un nudo en la garganta-. Su madre...- me callo y agitó la cabeza-. ¿Sabéis qué? Da igual. Esto no ha sido una buena idea.