Unic (BNHA)

Capítulo 24

Solo cayó desmayada Akira y todó empezó a levitar. Yo bajé rápidamente a ver cómo estaba, pero Aizawa se me adelantó y la cargó para llevarla a la enfermería. Akira estaba sangrando de la cabeza.

Aizawa corrió como nunca antes y yo le seguía detrás, puta mierda. No debió de hacer un sobreesfuerzo, mejor se hubiera quedado en su casa. El maldito mitad-mitad también venía corriendo, pero ni crea el hijo de puta que lo dejaré acercarce a Akira. Ni de coña.

Finalmente llegamos con Recovery Girl y ella comenzó a atender a Akira, le vendó la cabeza y le colocó un paño en su frente. Luego de atenderla se acercó hacia nosotros.

-Tuvo un sobreesfuerzo y por eso se desmayó, aún no estaba sana del todo, así que por eso está débil. Pero no se preocupen que probablemente en unos minutos despierte. –Nos dijo, Aizawa se tranquilizó. –El golpe en la cabeza fue leve, eso tampoco es un problema. –Luego se retiró la ancianita.

-Bien, yo me tengo que ir así que, cuídenla mientras tanto. Y por favor no se maten, si llego a saber que causaron problemas tengan por seguro que yo los colgaré. –Aizawa miró amenazante a sus dos alumnos y sin más se retiró, el rubio rápidamente volteó a ver al chico bicolor.

-Lárgate de aquí. –Le intentó decir lo más calmadamente posible, Todoroki negó. –La lastimaste, hijo de puta. No mereces hablarle, ya no más. –Le miró con odio.

-Por eso mismo quiero acercarme a ella, para que me perdone. Para que perdone mi maldito error, sé que no debí de haber dicho eso. –El rostro de Todoroki era de completo arrepentimiento, el rubio un poco harto suspiró.

-Explícate. –Le dijo sin más, ambos tomaron asiento.

-Todos estaban diciéndome que ella me gustaba y por los nervios que tuve lo evadí por aquella cruel aceptación, simplemente fue por esa idiotez. Juro que yo nunca le quise hacer daño, yo no pienso así de ella, te lo juro. –Habló sinceramente el bicolor. Katsuki meditó cada palabra del bicolor y sin más se dispuso a salir de la enfermería. -¿A dónde vas?

-Te creeré, así que te dejaré solo para que hables con ella, pero si me llego a enterar que soltó una puta lágrima por ti, lo lamentarás. –Y sin más, salió de la enfermería. Todoroki sonrió con alivio. Si el rubio le cree, Akira tendrá que hacerlo.

Todoroki se acercó más a la camilla en donde estaba Akira y sin dudarlo le tomó de la mano, comenzó a observar el rostro de ella. Sin duda alguna el bicolor había caído rendido ante ella.

Todoroki llevaba ya unos 45 minutos sentado allí esperando a que Akira despertara, justo cuando él estaba apunto de salir de la enfermería escuchó un sonido proveniente de la chica.

-¡Ouch! ¿Pero qué mierda pasó? Me duele la cabeza. –Akira se tomó de la cabeza, estaba apretando sus ojos. Luego poco a poco comenzó a abrirlos y su vista finalmente se aclaró. -¿Qué haces aquí? –Comenzó a buscar saber qué cosa. – ¿¡Y el puto botón para llamar a las enfermeras!? –Comenzó a ponerse histérica.

Todoroki tomó las manos de Akira e hizo que ella lo mirara a los ojos, lo cuál no funcionó ya que ella bajó la mirada. -¡Suéltame! –Comenzó a forcejear. -¿¡Y el puto botón!? –Gritó ya más exaltada.

-Estamos en la enfermería de la escuela, no en el hospital. –Habló tranquilamente Todoroki, Akira dejó de forcejear y Todoroki la soltó.

-Putas películas que me mienten a cada minuto. –Susurró, luego vio al medio albino. -¿Qué haces aquí? Lo mejor será que te vayas. –Le dijo secamente, luego se volteó y lo dejó de mirar. A Todoroki le dolió demasiado que ella actuara así con él, pero se lo merecía.