Capítulo 25

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Los vi y les sonreí a todos, ahora que recuerdo debo disculparme con Aomine.

-Oye, Ahomine. –Él me volteó a ver rodando los ojos divertidamente. –Lamento haberte confundido con una pantera, cuando me enfermo comienzo a decir estupideces y también me disculpo con todos. –Me rasqué la nuca nerviosa, me acomodé aún más la bufanda para que me llegara hasta la nariz.

Kagami y Akashi se acercaron a revolverme el cabello. –No te preocupes, no fue molestia ir a cuidarte. Luego de unos minutos te quedaste dormida. Además, logramos conocer a tu amigo explosivo y a su tierna pareja. –Habló Akashi.

-Por cierto, ¿a dónde vas? –Me preguntó Kagami.

-Tengo que ir a trabajar, les conté, ¿no? –Miré que el perrito estuviera bien, por suerte seguía dormido. -¿Y ustedes qué hacen por aquí? –Les miré dudosamente.

-Queríamos ver que Aki-chin estuviera bien. –Murasakirabara habló con su típico tono desinteresado, Himuro asintió con lo que dijo él.

-¿Y cómo sabían que no estaba en la escuela?

-Akashi-kun intuyó que te habían regresado a casa. Conociéndote, habrías ido a estudiar y tuviste alguna recaída, así que te mandaron a casa. ¿Acertó? –Miré sorprendida a Akashi, él solo sonrió arrogantemente.

-Wow... -Sacudí mi cabeza. –Sí, acertó.

-Akashicchi da miedo. –Se acomodó sus lentes y su gorrito el rubio del grupo.

-Bien, pero tengo que irme chicos. –Iba a seguir caminando, pero Takao me tomó del brazo.

-Akira-chan, te acompañaremos. –Sonrió, los miré y todos asintieron a lo que dijo el pelinegro. Suspiré y me acerqué a Kise.

-Hoy me cargarás tú. –Le miré directamente a los ojos. – ¿Puedo, Kasamatsu? No te vayas a poner celoso. –Kasamatsu sonrió divertido y asintió.

-P-Pero, ¿por qué yo? –Comenzó a hacer un puchero.

-Porque sí y ya, da la espalda que estoy cansada. –Le miré aún más seria que antes, él sólo se quejó y finalmente me cargó. Me acomodé de tal manera que el perrito no se aplastara.

-Vaya... Y pensamos que sólo Akashi daba miedo. –Habló Aomine, todos se rieron por lo dicho.

Intenté acomodar al cachorrito nuevamente, pero se despertó y comenzó a ladrar. Todos se detuvieron y voltearon a verme, Kagami rápidamente se colocó detrás de Aomine. Eso me extrañó.

-¿Por qué llevas un perro, Akira? –Me preguntó Himuro.

-A pues... Me lo encontré hoy y tenía la patita rota. No lo quise dejar solo, mírenlo, es tan tierno. –Todos soltaron un "oww", a excepción de Kagami. Me bajé de la espalda de Kise y me acerqué a Kagami, él solo tomó como escudo a Aomine.

-¿Por qué te escondes? –Le miré.

-Le dan miedo los perros, nanodayo. –Se arregló los lentes Midorima, yo sonreí cínicamente. Y comencé a acercarme más a Kagami y a intentar acercar al perrito, el cual solo miraba confundido todo y movía su colita.

-Pero es tan tierno, míralo. –Y comencé a correrlo ya que estaba huyendo, pero luego de unos segundos paré y me acerqué nuevamente a Kise para que me cargara. –Estoy cansada como para correr mucho, así que vamos al Starbucks.

Todo siguió con normalidad, excepto por Kagami. Kuroko me dijo que tenía un perrito que se llamaba Nigou, aunque también le decían Kuroko #2 y me dijo que le decían así por los ojos del perrito. Me lo mostrará otro día.

Unic (BNHA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora