Capítulo 32

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Hace unas horas que el Sol había salido. Creé 8 clones y 5 de ellas se fueron a trabajar, las otras debían esperar hasta que fuera la tarde. El resto de las clones regresaron y se quedaron platicando entre ellas.

Fui a darme una ducha rápida, me coloqué unos pantalones flojos de color negro, una playera blanca gigante y mis botines.

Salí de la casa y me dirigí hacia la estación de trenes, lo abordé y esperé a que pasara todo el recorrido. Me bajé en una estación después de la que normalmente suelo bajar.

Bajé y empecé a caminar hacia el hospital. Entré y le hablé a una enfermera que iba de paso, le pregunté si podía pasar a ver a Hikari. Ella sonrió y asintió, me dirigió hacia su habitación y me dejó pasar.

Hikari estaba dormida. Decidí sentarme en el mismo banco de ayer, me creé una consola y comencé a jugar.

Me pasé 3 horas jugando y Hikari aún no despertaba. Me paré y fui a comprar algo leve en la cafetería de abajo. Compré dos cafés y dos pastelitos.

Regresé a la habitación y me volví a sentar en el banco. Dejé el café y el pastel de Hikari en la mesita de al lado y lo mío me lo comí en ese instante.

Tuve que esperar otra hora y Hikari finalmente despertó.

-Hey... Buenos días, ten. –Le entregué el café, que lo calenté con mi quirk, y le entregué el pastelito.

-Gracias. –Ella me sonrió y comió tranquilamente.

-¿Cómo te sientes?

-Por alguna razón me siento cansada. –Se sentó en la cama y me miró. -¿Cómo harás para pagar mi tratamiento?

-Ya conseguí empleos, tú tranquila. –Ella me miró preocupada.

-Te exederás.

-No importa, recuerda que puedo permanecer varios días sin dormir. Luego de eso, te prometo que descansaré. –Ella suspiró y negó.

-Prométeme que no matarás a nadie. –Yo reí por lo que dijo.

-No trabajo en eso. –Me reí. –Pero, te lo prometo. –Las dos reímos. La mañana y parte de la tarde nos la pasamos así. Masaro llegó un rato a hacernos compañía y también a chequear a Hikari. También nos habló de los síntomas que puede traer la quimioterapia.

-Hikari, si quieres puedo hacer que tu cabello no caiga. –Ella me sonrió y negó.

-Ya te dije que no quiero que hagas nada por mí. Yo lucharé contra esto. –Sonreí con un deje de tristeza.

Ella no ha querido que le trate de curar del cáncer. Me dijo que si lo hacía me iba a odiar por el resto de su vida, era su lucha, no mía. Iba a hacer caso omiso, pero me dolería bastante que ella me odie. Suspiré.

Seguí con Hikari por ahí de las tres de la tarde y luego me despedí. Salí del hospital y desaparecí un clon. Me llamó la atención el trabajo que logró conseguir, así que, iré personalmente a ver qué tal.

Tuve que tomar el tren, el viaje duró unos 10 minutos. Bajé y busqué el local. Se supone que trabajaré para ayudar en cabinas de producción, en maquillaje y vestuario. Es un estudio en donde llegan bandas para hacerles entrevistas y en ese mismo local hay habitaciones para que duerman. También necesitaba hablar inglés, así que le fue fácil a mi clon que la aceptaran.

Llegué al local y entré, me quedé facinada por lo grande que era. Había una sala de baile, una cabina de estudio y demás cosas. Me acerqué al equipo de la cabina y me quedé maravillada.

Unic (BNHA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora