Capitulo 1| Ojos azules.

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El ambiente frío es notable en un cuarto pequeño, sentado sobre el colchón de una de las literas pegada a la pared de plomo se encuentra un chico de cabello oscuro que no emite expresión alguna al ver un copo de hielo caer por la ventana que se encuentra a unos centímetros de el.

El rechinido del suelo de madera atrae su atención, debajo de las literas se encuentran un par de niños vestidos con harapos que lo observan con sonrisas burlonas en su rostro.

Desde hace un año había llegado a aquel lugar extraño un pequeño niño apuesto de ojos azules y cabello oscuro.

Ese lugar donde la comida es escasa, no hay agua caliente, la vestimenta son telas de diferentes prendas cosidas juntas, el edificio grisáceo descuartizado, las habitaciones son pequeñas, hay tres literas en cada cuarto, cada una de ellas con una sola sabana, como almohada se utiliza un pedazo de cartón, en los dias de invierno los niños prefieren pasar la noche en la cocina donde encienden la chimenea para calentarse, prefieren respirar él humo de la leña a morir de frío. La mayoria de las paredes están rayadas por gises, las pocas salas en donde se recibe "educación" las bancas están rotas así que es muy facil de astillarse, el ambiente polvoriento pica en las fosas nasales, en cuanto a la cafetería,
la mayoría de los niños comen en el suelo debido a las pocas sillas y mesas, aun que eso es antihigiénico ya que siempre andan rondando cucarachas y terminan metiéndose entre la comida.

A este asqueroso lugar es conocido como orfanato.

—¡Baja!.— le ordena uno de los niños.

El niño de ojos azules lo ignoro, al cabo de unos segundos recibió un fuerte golpe en la cabeza con un pedazo duro de pan que le había lanzado uno de los niños y ahora emprendían la fuga.

Ya se habia acostumbrado a que lo trataran así. Los niños del orfanato siempre murmuraban cosas acerca del pequeño, le lanzaban objetos, se burlaban de el, lo llamaban «Poseido»
debido a que un par de noches lo habían escuchado murmurar palabras incomprensibles mientras dormía, poco después empezaron a crear rumores acerca de que él pequeño en realidad era hijos de brujos, asi que fue considerado como un demonio. Se creo él mito de que cualquier persona que lo mirara por más de cinco segundos a los ojos sufriría una maldición.

Las encargadas del orfanato como castigó le daban la tarea de plantar flores en el jardin, el pequeño nunca se metía en problemas pero buscaban cualquier excusa para mantenerlo lejos del edificio ya que incluso ellas comenzaron a creer en las historias de los niños.  Lo que más plantaba era el trébol de cuatro hojas.

—¿Te gustan los tréboles?

Un dia se atrevió a preguntarle una encargada del orfanato.

—No.

—¿Entonces?

—Es solo que..— desvío su mirada hacia el cielo nocturno.— El trébol trae la desgracia.

Al dia siguiente la encargada se contagió de viruela, cuando los niños se enteraron empezaron a tratar al niño de ojos azules con mayor crueldad, los insultos pasaron a convertirse en actos de violencia hacia el, a encerrarlo en armarios, cuando hacia uso de las escaleras lo empujaban causándole sangrados en la cabeza, sus comidas se las tiraban sobre su rostro, eso continuó hasta el punto de cortar su brazos con algunos pedazos de vidrios que encontraban en los suelos, la más cruel de esas fue cuando entre muchos niños lo obligaron a abrir su boca para cortar un pedazo de sus labios, afortunadamente no dejo cicatriz.

Sakura card captor "In your memory" Segundo libroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora