Capítulo 23

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Por Sasuke:

Agarro de la camiseta a Naruto y lo sacudo con fuerza cegado por la irá, mantiene sus ojos fijos en lo míos y las ganas de acestarle un puño en la nariz se incrementan.

- Maldito imbécil.-

Él deja de observarme.

- No me arrepiento de lo que sucedió.-

Entonces mi puño se estrella en su rostro y la sangre vierte. Me alejo de él de forma automática, se reincorpora y limpia la sangre que sale de su boca con el dorso de su mano.

- Eres un cabrón, Naruto.- escupi con furia.

- Eres peor que yo.- murmuró enojado.- Es tu jodida hermana, todas esas cicatrices que tiene son por tu culpa.-

- No tienes idea.- mencione pasando mis manos por mi cabeza.- No tienes ni puta idea, Naruto.-

Salí de la habitación, la puerta suena con fuerza, mis pasos son rápidos. Mis dedos cerrados en un puño.

Maldición, Sakura.

Veo a Karin y Suigetsu caminando en dirección contraria a la mía, ellos no salen de mi camino y supongo que el encuentro será inevitable, que jodida suerte tengo.

........

Estoy en detención, con una gasa presionando encima de la herida en mi comisura superior, y una bolsa de hielo en mi ojo derecho. La madre de Suigetsu una mujer elegante seguida de sus dos guardaespaldas es la primera en entrar al salón de reuniones. Observo el reloj son cerca de las doce del día.

No pasan ni cinco minutos y mi hermano ingresa en el edificio, en compañía de Mei, y contengo las ganas de ir hacia él y descargar parte de mi coraje, frustración e impotencia.

- Me jode que me hagas perder el tiempo por tonterías.- Dijo cuando paso cerca de mí. Shisui y Kisame caminan detrás de ellos.

Los sigo, entramos en la sala de reuniones y las puertas se cierran.

...........

Suspensión de dos días, por agresión física deliberada en más de tres ocasiones, y la próxima vez, nos harán un registro en las actas, y ambos fuimos retirados de un evento deportivo de las intercolegiales. El entrenamiento en la piscina se fue a la basura.

Mei pasa su brazo encima de mi hombro.

- Yo también me metía en problemas cuando era joven.-

No respondí.

- Ve por alguna cosa que necesites. Nos vamos.- murmuró Itachi cuando se detuvo antes de ingresar en el asiento de copiloto.

- Nos llevamos a Sakura.- Fue una orden.

Él volteo para observarme, no es algo que seguramente esperaba. No después de que evito a toda costa la cercanía con la mansión. Sin embargo no puedo dejarla con Naruto.

- No tengo tiempo para estás mierdas, Sasuke. Tengo una reunión en diez minutos.-

- Nos llevamos a Sakura.- Repetí observándolo fijo.

Él cerró la puerta del auto y entro nuevamente al edificio, Kisame lo siguió rápidamente al igual que Mei.

Shisui se acerca a mí.

- No deberías.-

Pero no me quedo a escuchar lo que tiene que decir, voy en dirección al dormitorio de Sakura. Llego a su edificio y golpeo su puerta  algunas veces. La castaña es la que abre.

Veneno (Terminado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora