Como día lunes, voy caminando muy rápido a la universidad. La maldita alarma no sonó otra vez. Sin mirar a nadie en la calle, sólo con la vista al frente y el cubrebocas tapándome la mitad de la cara por el frío que hace en este invierno, me dirijo lo más rápido posible para llegar al primer módulo del día. Tuve que olvidarme del desayuno, así que compraré un café en alguna cafetería cerca de la universidad.
°°°
Abrí la puerta de la cafetería haciendo sonar la campanilla que marcaba la entrada de un nuevo cliente, sacudí mis pies para entrar y cuando estaba a punto de dar el primer paso, salió un chico rápidamente logrando empujarme.
—Hey, ten más cuidado.— me quejé, sobando levemente mi brazo.
El chico aparentemente me escuchó, pero me ignoró rotundamente ya que nunca dejó de caminar. Cuando estaba por doblar la esquina, me miró de reojo y luego siguió con su camino, no pude verle el rostro completamente debido a su capucha de color negro. Miré mi reloj percatandome de que faltaban cinco minutos para que empezara la clase. Compré el café rápidamente y me dirigí lo más rápido que pude a la universidad.
Abrí la puerta del salón abruptamente ganandome algunas miradas de mis compañeros y la atenta mirada del profesor, quien hizo un gesto con su cabeza incitandome a tomar asiento. Hice una reverencia en forma de disculpa por haber interrumpido su clase para luego ir a sentarme junto a Seunghun.
—Llegas tarde.— me miró con una media sonrisa.
—Solo son tres minutos tarde, no es nada — me quejé — aparte la estúpida alarma no sonó. — rodé los ojos en señal de frustración.
—Que casualidad que los lunes no suene.— dijo en un tono divertido, a lo que golpeé levemente su brazo.
Nos sonreímos y volvimos nuestra vista al frente, donde el profesor impartía su clase.
Mientras miraba el gran pizarrón, lo único en lo que podía pensar era en el rostro de Seunghun cuando me sonrió. Sus ojos brillando y esa sonrisa de dentadura perfecta que le sacaba uno que otro suspiro a cualquier chica que se le cruzara por el camino.
°°°La clase terminó, la voz de mi rubio amigo me sacó de mi trance.
— ¿Vamos por algo de comer? — preguntó.— muero de hambre.
— No tengo hambre, pero te acompaño. — sonrió ante mi respuesta, pasando su brazo por mi hombro apegandome a su cuerpo.
Comenzamos a caminar en dirección a la cafetería, nuestra próxima clase comenzaba en treinta minutos por lo que teníamos algo de tiempo. El frío recorrió mi cuerpo cuando Seunghun quitó su brazo de mi hombro, haciéndome temblar levemente. Abrió la puerta de la cafetería dejándome entrar primero, tomamos asiento cerca de la ventana y miramos la carta.
— Iré a pedir un café y un pastel, ¿Segura que no quieres algo?
El frío carcomía mi ser, por lo que no me podía negar a tal pregunta.— Un café.
—Bien, serán dos cafés — sonrió. Por Dios Seunghun, deja de sonreír así, terminarás matándome. — iré a pagar.
Se dió la vuelta pero se lo impedí tomando su brazo. — Espera — dije — toma, para que pagues mi café. — le acerqué un billete, pero él negó con la cabeza.
—Oh, vamos Soyoon. Yo invito, no te preocupes.
—No me gusta que paguen por mí Seunghun...
—Tú invitas la próxima vez, ¿Está bien?
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𝐕𝐎𝐈𝐂𝐄𝐒 [𝐋𝐞𝐞 𝐌𝐢𝐧𝐡𝐨- 𝐬𝐤𝐳]
Fanfiction¿𝗖ó𝗺𝗼 𝘀𝗲 𝘀𝗲𝗻𝘁𝗶𝗿í𝗮 𝘀𝗲𝗿 𝗳𝗲𝗹𝗶𝘇? 𝗔𝗹𝗴𝗼 𝗾𝘂𝗲 𝗰𝗼𝗻𝘀𝘁𝗮𝗻𝘁𝗲𝗺𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗽𝗮𝘀𝗮𝗯𝗮 𝗽𝗼𝗿 𝗹𝗮 𝗺𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗱𝗲 𝗲𝘀𝗲 𝗷𝗼𝘃𝗲𝗻 𝗰𝗼𝗻 𝗰𝗮𝗽𝘂𝗰𝗵𝗮. 𝗗𝗲𝘀𝗱𝗲 𝗵𝗮𝗰í𝗮 𝘂𝗻𝗼𝘀 𝗮ñ𝗼𝘀 𝘀𝗲 𝗽𝗿𝗲𝗴𝘂𝗻𝘁𝗮𝗯𝗮 𝗹𝗼 𝗺𝗶...