Siempre Vuelvo A Ti "Ruggarol" Pausada

Capítulo 9

Karol Sevilla:

Estaba desorientada. Realmente lo esteba, ese enfermo o enferma ahora deja como evidencia una estrella dorada sobre sus victimas, quieren culparme a como de lugar pero lastimosamente no van a poder contra mi. Mi mirada se centra en Ruggero quien no esta más serio que de costumbre, esta celoso y lo entiendo muy bien, pues Daniel no me ha soltado ni un segundo desde que llego a la comisaria, suspiro cansada mientras esperamos a Juan De Dios quien finiquita unas últimas cosas para que yo me pueda ir de aquí, como mi abogado hace su trabajo y se lo agradezco mucho.

Juan: Listo pequeña, ya podemos irnos de aquí. -Anuncia y suspiro más tranquila. Solo quiero relajarme y olvidarme por un momento de todo esto.

Karol: Gracias, Juan De Dios. No sabes lo tedioso que fue todo. -Sonrío a medias y asiente mientras besa mi frente y palmea el hombro de mi esposo.

Daniel: Amigo eres increíble, siempre estas ahí para nosotros y te lo agradezco mucho. -Se dan su típico abrazo de amigos y sonríen.

Juan: No es nada, ustedes son mis mejores amigos y con Kim siempre vamos a estar para ustedes. -Me sonríe y asiento. Ellos platican entre ellos y yo volteo a ver a la oficina de Ruggero, mi corazón se acelera al verlo allí parada en el marco de la puerta viéndome. __Aún así esta bien, vamos. -Regreso mi mirada a los dos hombres frente a mi y alzo una ceja.

Daniel: Vamos hacer un asado en casa mi sol, justo ahora con Juan y tus amigas ¿Te parece? -Acaricia mi mejilla mientras yo estoy ida. Nose que decir solamente quiero estar con Ruggero y abrazarme a el y nada más.

Karol: Eh... Bueno. -Contesto apenas audible. Daniel sonríe y besa mis labios mientras toma mi mano para salir del lugar. __Eh... Amor olvide mi celular en la sala de interrogatorios ¿Me esperas afuera mientras lo busco tantito? -Miento algo nerviosa. Lo beso para convencerlo y sonríe mientras asiente y sale dejándome a mi en medio pasillo, suspiro y me dio media vuelta para ir hasta la oficina de Ruggero, cuando entro lo veo con los ojos cerrados mientras huele lo que al parecer es el pañuelo que llevaba hace unas horas, cierro la puerta con seguro y me acerco a el. __Mi corazón, aún sigo aquí. -Susurro y abre sus ojos.

Rugge: Karol ¿Que haces aquí? Se supone que tienes que estar en tu casa ahora. -Susurra algo cansado. Niego y me acerco más a el, observo su rostro y levanto mi mano, con la punta de mis dedos bajo desde su frente hasta su cuello en una caricia que hace que sus ojos se cierren nuevamente. __Mi amor debes irte... Necesito pensar, pónmela fácil ¿Si? Porque... Porque siento que me la estas poniendo difícil con esta situación, por favor Karol hazme caso. -Susurra suplicante. Unas cuantas lagrimas se deslizan por mis mejillas mientras rodeo mis brazos en su cuello y me abrazo a el.

Karol: No quiero alejarme de ti, en estos momentos te necesito más que nunca mi corazón. -Sollozo a lo bajo y siento su respiración en mi cuello mientras acaricia con delicadeza mi cintura.

Rugge: Ay la mía stella, te lo suplico por favor. Ve mi cielo te prometo que después hablamos ¿Si? No quiero que tengas problemas con tu esposo ya bastante te has tardado aquí conmigo. -Acaricia mi mejilla y yo la suya sin dejar de ver sus labios. __¿Quieres que te bese verdad? Mi amor si te beso no te voy a dejar ir, me conoces y me conozco. -Acaricia mis labios con su pulgar y sonrío.

Karol: Lo se, ya me voy solo quería verte por ultima vez del día de hoy. Mañana es otro día detective, y me gustaría almorzar con usted. -Susurro rozando sus labios y me aprieta a el.

Rugge: ¿En nuestro lugar? -Pregunta deja un beso en mi barbilla y asiento.

Karol: En nuestro lugar. -Afirmo y así atrapo sus labios en un beso pausado. Mis manos acarician el cabello de su nuca mientras el acaricia mi espalda baja. Nuestro beso se vuelve más pasional y mordiéndolo por ultima vez Ruggero abandona mi boca dejándome agitada al igual que el. __Te amo, mi hermoso corazón. -Sonrío y el acaricia mi mejilla.