𝖊𝖑𝖊𝖈𝖙𝖗𝖔 | "La guerra está más cerca y
yo voy a librarla, con todos
los medios necesarios"
#5 en mutantes (13-ene-19)
#3 en alexsummers (24-ene-19)
#6 en mutantes (30-ene-19)
#1 en alexsummers (30-ene-19)
#4 en...
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Los ojos se me fueron abriendo poco a poco cuando sentí que volvía a estar consciente. Me sentí desorientada, pero aún así logré levantarme mirando a los que estaban conmigo.
Peter, Raven, Hank y Moira. Ellos todavía estaban aturdidos, aunque empezaban a moverse. No había rastro alguno de mi hija o sus amigos... ni tampoco de Alex.
Aprieto los párpados al momento que siento como se me cristalizan, y cuando una solitaria lágrima baja por mi mejilla otras la acompañan. Dejo salir un sollozo que amenaza con llamar la atención del resto así que me cubro la boca con la mano ahogando mis lamentos.
No sé ni cómo sentirme en estos momentos. No sé qué hacer o cómo reaccionar, ahora mismo sólo quiero estar en otro lugar alejada de todos para poder dejar salir todo. Las ganas de gritar y golpear todo lo que se me atraviese no se aplacan. Primero eran al enterarme de la tragedia que pasó Erik, ahora son por lo que yo acabo de sufrir. Alex y yo no éramos los mejores siendo esposos, pero más que eso era mi amigo. Un gran amigo que siempre estuvo ahí sin importar nada.
No supe valorarlo, y ahora que no estaba aquí lo necesitaba más que nunca. Sin contar a Charles o a Erik, él era el amigo más cercano que tenía. Era confiable.
¿Por qué se habían llevado a Charles? ¿Estaría bien? ¿También estaría muerto? Si era así, no sería necesario alguna otra razón para derrumbarme por completo. Erik se había unido a ese mutante con ganas de destruir al mundo, él era parte de la muerte de Alex aunque no lo sepa.
—Lara. —me limpié los rastros de lágrimas antes de buscar al dueño de esa voz. Era Hank, quien estaba con su apariencia de bestia cubierto de pelo azul. —Lamento todo lo que dije.
—Eso ya no importa. —estiro mis brazos hacia él hasta rodearle el cuello. Hank duda ante mi repentino movimiento, tarda unos segundos en abrazarme de vuelta. —¿Ahora qué haremos?
—No tengo idea.
—¿Y este lugar? —miro el espacio donde nos encontramos. No había nada por donde pudiéramos salir, sin contar la ventana de cristal a varios metros de nosotros.
Hank se separa de mí mirando por su cuenta. Peter Maximoff se levanta mirando a Hank para después soltar un grito alejándose de él. Raven y Moira, quienes ya despertaron lo miran.
—¿Eso nos va a pasar a todos? —pregunta tocándose los brazos.
Hank rueda los ojos poniéndose de pie y dándome una mano para ayudarme a hacer lo mismo.
