¿ Por qué a nosotros? (1er libro trilogía Hate Or Love)

Elizabeth Part: Mis sentimientos.

Elizabeth Luksic.

Cometí un error, un muy grave error...

Horas antes, 13:00 hrs.

Me levante temprano para ir a comprar algunas cosas a una tienda que suele cerrar temprano, ya que quiero hacer un delicioso espagueti para Joseph después y comer juntos.

-¿Aun no te decides por el color de la tela? -me pregunto la dueña de la tienda mientras acomodaba sus lentes e intentaba leer algo en el diario.

-Ay es que no sé, este rosa oscuro está muy bonito, es casi fucsia pero no alcanza a serlo, no lo sé, nunca vi un color tan lindo -coloque la tela sobre mí y me mire en el espejo imaginando como se vería en alguien.

-Es un color precioso, sea lo que sea que hagas, créeme que se verá perfecto. -me dijo girando la hoja del periódico.

-Sí, tiene razón, ¡lo llevo! -le dije sonriendo de oreja a oreja, me encantan estas tiendas en donde tienen colore y telas más alternativas, los diseños que puedes hacer con ellos son más originales, odio las cosas y personas comunes.

La señora coloco la tela en una bolsa y me la entrego mientras me deseaba mucha suerte, le dije que dentro de unos días me iría a Paris a ejercer como practicante de una casa de moda, algo en lo que Vero me ayudo. Y voy saliendo de la tienda cuando saco mi celular para ver la hora, las 13:30 hrs, perfecta hora para llegar a cocinarle algo a mi cariñito. Iba a cruzar la calle para tomar un taxi cuando la vi, con una cara de muerte, pálida y luciendo totalmente desorientada, como si solo estuviese caminando por caminar.

-¡Kate! -le grite y pareció no escucharme. Ella siguió caminando con la mirada fija en el suelo. -¡Katherine! -le grite otra vez, pero nuevamente ella ni levanto la mirada. Me acerqué lentamente hacia ella y me puse delante de su camino, esperando a que chocara contra mí. Y así sucedió.

-Ah, Elizabeth, ¿Qué haces aquí? -dijo dando un salto al sentir mi cuerpo como una roca de pronto.

-¿Yo? Yo vine a comprar a esa tienda, ¿pero y tú?, ¿en qué mundo estas? Te llame dos veces y ni me escuchaste, ¿vas con audífonos? -pregunte mirando sus orejas.

-No, lo siento, estaba pensando en algo. -me dijo colocando su cabello detrás de su oreja, tenía los ojos rojos y los labios algo agrietados.

-Me di cuenta, ¿y en qué piensas tan profundamente que ni ves por dónde vas?

-Ah, en-

-Por cierto, ¿de dónde vienes? -le pregunte al ver que venía desde la dirección en donde queda el departamento de Brad, aunque puede venir desde allí por cualquier motivo, pero puedo sentirlo, hay algo entre esos dos, además por su cara, estoy segura de que algo paso entre ella y mi hermano.

-De...De la casa de una amiga. -me dijo aclarando su garganta, te tengo ricitos. -Bueno, ya me tengo que ir, tomare un taxi, adiós. -dijo alejándose de mi rápidamente.

-El otro día mentí. -dije con una pícara sonrisa, ella se giró lentamente hacia mí.

-¿A qué te refieres?

-Cuando dije que Brad tenia los labios rojos por la salsa de tomate de la pizza, mentí. La verdad es que de hecho casi ni le coloco salsa de tomate a la pizza, en vez de eso, le coloco harto jugo de tomate, así que...Dime tú, ¿Cuál otro motivo puede haber para el rojo en sus labios? Un rojo que tu traías en tus labios minutos antes de que salieras con él a "acompañarlo a fumarse un cigarro" -dije moviendo mis manos sobre mi cabeza haciendo las comillas. Y lo vi, vi como sus ojos quedaron inmóviles por unos segundos y mordió su labio inferior, te tengo, a mí no puedes engañarme.