Los ojos que me ven de otra forma.

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-¿Qué? ¿en tus piernas? -pregunte extrañada.

-Si.

-Marcus, ya no tengo doce años como para colocarme sobre tus piernas mientras tú me lees algo. -dije haciéndome un pan.

-Solo es un rato. -dijo sin despegar un ojo de mí.

-Si quieres retarme por lo del portaligas te diré que-

-Se te veía hermoso.

-¿Qué?

-Me gusto como...se te veía. -me dijo bebiendo de su café.

-Gra...cias. -dije sintiendo una punzada en el pecho, tragué saliva. -Bueno, ya voy a acostarme, que tengas buenas noches.

-¿Enserio vas a ser así de fría?, voy a pensar que ya no me quieres. -dijo colocando sus codos sobre la mesa. Lo miré y ante su triste frase decidí ir un rato hacia él. Me coloque a su lado de pie y jaló de mi dejándome sobre sus piernas.

-¿Y...bien?, ¿Qué quieres decirme? -dije sintiéndome algo incómoda y ruborizada sobre sus piernas, antes solía hacerlo, pero hace mucho que no estaba así con él y es inevitable sentir nervios.

-Vi a Brad entre el público hoy junto a Lena, y se me hizo algo raro, ya que los demás no pudieron venir hoy debido a que tenían un ensayo importante. -me dijo mientras colocaba mi cabello detrás de mi oreja.

-¿Enserio? Qué raro, ni idea, tal vez lo dejaron salir un momento. -dije mirándolo por un instante y luego comencé a mirarme las manos.

-¿Recuerdas cuando te enojaste mucho conmigo una vez porque me acosté con Camila en el colegio? Ella siempre andaba con una falda muy corta y siempre hacia movimientos muy coquetos, enredaba su cabello con unos de sus dedos mientras hablaba con alguien y solía hablar y reírse muy fuerte, ¿la recuerdas? A muchos chicos les gustaba.

-Si...la recuerdo y también el día en que te metiste con ella, recuerdo que te mande un empujón en el pecho fuera del colegio, fuiste un idiota. ¿Y porque me recuerdas eso ahora?

-Brad se parece a ella, es decir, tienen una esencia muy parecida.

-¿Qué?, ¿De que estas hablando? No se parecen en nada. -dije intentando comprender a que iba esa comparación.

-¿Cómo lo sabes?

-Porque Camila era una tonta, actuaba de cierta forma solo para llamar la atención de los demás, siempre andaba metida en todo, era hartante.

-¿Es por eso que te caía tan mal? O era... ¿por mí? -en cuanto dijo eso mi mirada se volvió inmediatamente hacia la suya, sentía que no podía entender nada, ¿Qué es lo que quiere realmente? Sentí la mano de Marcus subir suavemente por encima de una de mis piernas y me levanté de inmediato tomando mi plato con el pan.

-Me caía mal por como actuaba, no me gusta la gente así y no entiendo a qué va todo esto.

-Katherine, seré un poco más directo, he notado que a veces él y tú se miran un poco raro, de una forma algo...coqueta quizás.

-¡¿Qué?! -dije intentando parecer impresionada. -No tengo ni idea de lo que estás hablando Marcus, ¿estás seguro de que eso es café y no cerveza?

-He visto como lo miras. -me dijo repentinamente mientras yo ya me dirigía a mi habitación.

-Con los ojos. -le dije intentando demostrar lo ridículo que era lo que me estaba diciendo, siento que vomitare mi corazón, pero debo disimular como sea.

-Katherine.

-Marcus, ahórrate esas palabras, sabes que yo nunca me fijaría en alguien como Brad, me conoces mejor que nadie, no entiendo porque estás diciéndome todo esto.

¿ Por qué a nosotros? (1er libro trilogía Hate Or Love)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora