¿ Por qué a nosotros? (1er libro trilogía Hate Or Love)

El Gran Día.

Katherine Fadder.

-¡Carmen! Creí que no abrirías hasta las diez hoy día. -escucho una voz muy a lo lejos.

-Me sentía bastante mal ayer, así que creí que hoy no podría venir a trabajar como siempre, pero ya estoy mejor así que...

-¡Me alegro! Así podremos tomar desayuno juntas. -siento mujeres reírse.

Una fuerte luz comienza a molestarme, es muy clara y llega directo a mi rostro. Así que me doy vuelta para ocultarme un poco de ella, cuando... comienzo a oír muchos sonidos. El de personas abriendo sus locales, gente hablando, perros ladrando y el ruido de los autos. Y entonces abro mis ojos de golpe.

-¡Mierda, Brad! -grito volteándome otra vez, es verdad, lo había olvidado, nos encontramos acostados sobre el techo de un camión y ya es de día.

-Unos minutitos más. -murmura dándome la espalda.

-¡No! ¡Brad! Maldición, despierta. -le digo acercando mi rostro al suyo y le pellizco la mejilla, debe despertar.

-¡Ah! ¿Qué? ¿Qué pasa? -inquiere con sus ojos aun cerrados, la luz no le permite abrirlos del todo, la verdad es que el sol esta justamente situado sobre nosotros, y parece iluminar más que nunca.

-Brad tenemos que...- de pronto su celular comienza a sonar, veo que lo busca con dificultad en los bolsillos traseros de su pantalón y una vez que lo encuentra presiona el botón verde con suma calma, mientras bosteza y refriega uno de sus ojos con su mano. Mientras tanto yo no dejo de ver a todas partes pensando en que momento se nos ocurrió hacer esto.

-¿Alo?

-¡Brad! ¡al fin con estas! ¡¿Dónde demonios has estado?! -se escucha salir de su celular.

-¿Rami? Es... ¿Rami? -pregunto acercado mi oído lo más que puedo.

-Sí, es el. -responde Brad aun sin reaccionar.

-Dámelo Brad, tu aun no despiertas. -digo arrebatándole el celular.

-Ponle altavoz. -me dice Brad.

-¿Rami? Soy yo, Kate, escucha-

-¡Kate! ¡sabía que estarías con el! Mierda, esto es malo, escucha, Verónica llamo a Marcus hoy día preguntándole si tu habías llegado al departamento, ya que Brad no lo había hecho y a Marcus le entro el demonio, comenzó a decir que seguramente ustedes deben andar juntos, que quizás en donde estén y no sé qué, escucha, debes hacer algo ahora... ¿Alo? -la voz de Rami me llama, debo decir algo, lo sé, pero...no sé qué hacer ni que decir, nos tienen, ya salimos pillados.

-Ah, yo... -Brad me quita el celular.

-Menos mal que el que aún no despierta soy yo. -me mira con presunción. -Tranquilo, yo lo arreglo, ¿Verónica aun no habla con Joseph verdad? -le pregunta a Rami.

-No, de hecho yo lo llame hace un rato, pero me dijo que al ver que Verónica lo llamaba insistentemente durante la noche le dio mala espina y prefirió no atender, dijo que no quería meterse en problemas.

-Entiendo, bueno dulce Rami, tu tranquilo, Kate ya estará pronto en el departamento sana y salva. -asegura Brad sin ningún indicio de temor o nervios, y es esa misma actitud la que hace que Rami suelte un aliviado suspiro a través del celular.