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después de arreglarnos, salimos a casa de camila porque dario nos había avisado que javier no estaba. el plan evitarlo estaba muy en marcha, iba de viento en popa.

llegamos a la casa de camila y fuimos directo a la habitación de dario. camila abrió la puerta.

dario se asustó y llevó su mano derecha a su pecho.

-camila, ¿estás loca? ya sabes que tienes que tocar la puerta antes.

-perdón, es que estoy emocionada.

-hola sofi. -saludó dario.

-hola dario, ¿qué tal todo?

-pues bien.

-¿qué pasó con javier? ¿por qué preguntó por sofi? -preguntó camila inmediatamente.

-dario rió. -no sé.

-¿cómo no vas a saber, dario? -dije yo mirándolo fijamente.

-pues no sé, no sé nada. -dijo él con una sonrisa cómplice. era obvio que mentía.

-dale, dario.

-bueno, pero con una condición.

-¿qué cosa? -pregunté yo.

-que sofía tiene que venir aquí todos los días de la semana que sigue.

-¿qué, por qué? ¿eso qué tiene que ver?

-tómenlo o déjenlo. -dijo encogiéndose de hombros.

-¡dario!

-no puedo venir todos los días, mi mamá no me deja.

-dario rió. -no mientas, tu mamá es un amor.

-dario no puedo venir porque aquí estará javier y yo estoy tratando de superarlo.

-entonces lo que tengo que decirles sobre eso, ya no te importará. digo, porque lo estás superando.

-¡dario! -dijimos camila y yo al unísono, él rió.

-bueno, ¿vendrás, entonces?

-depende de lo que me digas.

-es algo bueno.

-está bien. sí vendré.

-a ver, pinky promise. -alzó su dedo meñique.

-bueno. -yo rodé los ojos y alcé mi dedo meñique, él juntó nuestros dedos y dijo:

-si no cumples la promesa, tendrás que cortarte el dedo.

-sí, sí. ahora habla. -dijo camila.

-bien. el otro día estábamos conversando los tres y casualmente surgió el por qué rubén no había podido venir. ¿pueden creer que nos traicionó por irse a ver con una chica? se pasa, yo pensaba que...

-¡dario, al punto! -dijo camila.

-bueno, perdón. entonces nos dijo y le dijimos que estaba bien, que estaba perdonado. -rió. -bueno, entonces yo empecé a molestar a javier con sofía porque ya saben, a sofía le gusta javier.

-sí, pero él no sabe. -dije yo obvia.

-¿quién no sabe? -dijo dario confundido.

-¿¡dario, le dijiste!? ¡no me digas que le dijiste! ¡me mato! -grité yo.

-¡¿dario le dijiste!? ¡era un secreto!

-no no. rubén me dijo a mí, o sea era muy obvio. ¿recuerdas cuando fuimos a comer, los cinco juntos?

eastside ☽ ; bnetDonde viven las historias. Descúbrelo ahora