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ya estábamos todos en el aeropuerto.

isa y javier estaban abrazados, se estaban despidiendo. ella ya se había despedido de los demás, solo faltaba yo.

ellos se separon, todos estaban llorando. incluso a mí se me salieron algunas lágrimas por ver a los demás así, era triste.

cami se abrazó a javier y yo me acerqué a isa, para despedirme.

nos abrazamos, ella se separó y habló:

-no te guardo ningún rencor, sofi. eres muy buena, no olvides eso. te mereces tu historia de amor con la persona que amas. -señaló detrás de mí, yo me giré y me dí cuenta que se refería a javier. -se nota de aquí a china que lo quieres muchísimo, sofi. te mereces ser feliz y él también. -sonrió y tomó mis manos. -si lo cuidas, lo amas y lo haces feliz, él hará lo mismo por ti.

-perdón, yo no...

-no pidas perdón, yo no te guardo ningún rencor. te quiero mucho, en serio.

en este momento ya estaba llorando yo también.

-espero que te vaya muy bien, nunca dudes en llamar si necesitas algo que todos estamos dispuestos a ayudarte. siempre. -dije yo limpiando mis lágrimas.

-asintió. -gracias.

la abracé nuevamente.

nos separamos y ella tomó su maleta y caminó hacia donde tenía que abordar.

yo me acerqué donde estaban los chicos, todos estábamos llorando.

ahora entendía lo que ellos habían sentido cuando yo me fui.

cuando se fue, todos nos quedamos ahí. no sabíamos qué decir, nada de lo que digamos parecía lo correcto en este momento.

-¿vamos a casa? -dijo dario con las manos en los bolsillos.

nadie dijo nada, solo caminamos hacia donde estaba el auto para irnos a casa.

el silencio hacía que no dejara de pensar en lo que me había dicho isa, ¿ella se había dado cuenta que me gustaba javier? yo había intentado guardármelo para mí, ni siquiera se lo había comentado a cami. ¿cómo se había dado cuenta? me sentía un poco culpable, quizá por eso ellos terminaron. aunque no parecía, quizá terminaron como buenos amigos porque hasta el final javier la acompañó y la abrazó y le dijo que la quería mucho.

era un poco confusa la situación, claro que yo quería estar con javier pero no me quería acercar a él porque podía pensar que era una aprovechadora o algo así, aparte apenas isa se había ido. seguro que si yo me acercaba, él me aceptaría pero solo porque extraña a isa más no porque me quiera a mí.

nadie parecía tener ánimos, era de noche y estábamos sentados en el piso. yo me levanté y caminé a mi cuarto, podría arreglar un poco mientras pensaba.

los papás de rubén habían llamado temprano y les dijimos que no podíamos recibirlos hoy porque no teníamos nada y teníamos que arreglar. le hablamos a todos nuestros padres para que no vinieran en esta semana, sino que nosotros los íbamos a llamar hasta que tengamos las cosas listas.

me acerqué al espejo que tenía en mi habitación y me miré. estaba horrible, tenía los ojos hinchados y la nariz roja por llorar, tenía un chichón en la cabeza que parecía otra frente. era un desastre.

suspiré, dejé el espejo de lado y seguí arreglando.

aún no tenía mi armario aquí, así que ni siquiera podía ordenar mi ropa. solo había traído una cajonera.

quizás si empezaba por barrer, podría poner la ropa en el suelo para así ordenarla. busqué la escoba y comencé a barrer mi habitación. me encantaba que fuera enorme pero no ahora porque era un montón de limpiar. ahora odiaba que sea tan grande.

quizás isa se fue por mi culpa, porque ella vió que yo quería a javier o algo así. ¿qué haría si en serio era mi culpa? debía hacer lo posible por mantenerme alejada de javier. quizás no era lo que yo realmente quería pero... es que también isa me dijo que estuviera con él. no entiendo nada. ahora sí que estaba más que segura que jamás podría tener un amor feliz. todo esto era una tragedia.

suspiré y me acosté en el piso con los brazos abiertos y las piernas también, como una estrella. quería gritarle a javier que lo amaba y que me parecía el ser más hermoso del mundo pero tampoco quería quedar mal.

-patricio estrella, vamos al supermercado. ¿vienes? -dijo rubén desde la puerta.

-reí. -no, quiero dormir.

-bueno, dario también se queda.

-no compren nada que necesite estar en la refri porque ya saben... no tenemos. -reí.

-no me había dado cuenta, gracias por la info. -dijo saliendo y cerrando la puerta.

amaba a las personas que cerraban las puertas cuando salían de una habitación. se merecían el cielo.

cuando salí de bañarme, recordé que las camas estaban en el cuarto de cami y estaba sucio.

-¡¡dario!! -grité desde arriba.

-¡¡dime!! -dijo él detrás de mí, asustándome.

¿qué les pasaba a todos? ¿por qué siempre me estaban asustando?

-pensé que estabas abajo. ¿me puedes ayudar a llevar uno de los colchones a mi cuarto? es que ya me bañé y no quiero ensuciarme. cami no ha limpiado su cuarto. mejor traes todos, ¿puedes? por favor.

-como usted mande, patrona.

-te pedí por favor, dario.

-rió. -lo sé, es broma. ya voy.

eastside ☽ ; bnetDonde viven las historias. Descúbrelo ahora