sofía pov
javi ya se había ido de mi habitación y yo ya respiraba mejor.
no sabía qué más hacer porque no tenía nada, estaba aún decidiendo si debía comprarme un armario o traer el de mi casa.
ví que javi había traído su cama y como no tenía nada qué hacer, fui a su cuarto a ayudarlo. porque a pesar de que no debería gustarme, igual era mi amigo ¿no? podía ayudarlo.
toqué la puerta de su habitación, escuché un leve "pasa". él estaba sentado en el piso.
-hola, ¿qué pasó? -dijo al verme.
¿por qué siempre que yo le hablaba pensaba que pasaba algo? creo que él piensa que le hablo solo cuando necesito algo.
-nada, venía a ayudarte.
-oh, bueno.
me senté en el piso junto a él.
-¿cómo así trajiste tu cama?
-es que estaba cansado de dormir ahí, me sentía como un secuestrado. -rió.
-es cierto, a mí me duele la espalda.
-¿por qué no traes tu cama?
-es que no sé si traer mi cama o comprar una nueva.
-compra una nueva porque cuando vayas a visitar a tus padres, te puedes quedar durmiendo ahí.
-tienes razón, mañana tengo que ir a hacer compras entonces.
-¿puedo ir contigo? es que también necesito comprar un armario.
-tú me ibas a llevar, claro que puedes ir.
a veces era increíble hablar con javi, me transmitía una paz tan grande. no se sentía ni un poco diferente a cuando teníamos diecisiete.
él soltó una pequeña carcajada, lo que me hizo sonreír.
-¿deberíamos ir ahora? aún es temprano.
-sí, deberíamos. ¿les avisamos a los chicos? puede que alguno de ellos también quiera comprar algo.
-claro, como quieras.
-creo que es mejor que vayamos mañana, aún no está lista tu cama. si terminamos temprano, podríamos ir. -dije.
-pero no importa, podemos ir ahora si quieres.
-no, no. primero terminemos con tu cama porque dices que odias dormir como secuestrado. -reí y él también.
después de como tres horas de risas y conversaciones, terminamos.
-me costó más armarla que desarmarla. me tomó como media hora solamente.
-reí. -es que no tenías compañía.
-me distraes.
sonreí. había pasado una tarde muy linda con él, era como si estuviéramos juntos aún.
-perdón pero tú me respondías.
-no te perdono.
me hice la sorprendida y negué. -qué llorón.
su boca formó una 'o'. -no me mereces.
yo comencé a reír y el también, finalmente se levantó y sacó una sábana de una sus cajas y la extendió, se puso a un lado de la cama y dijo:
-¿me ayudas?
-claro, sí.
yo fui a pararme del otro lado de la cama para alcanzar la sábana, así terminamos con su cama.

ESTÁS LEYENDO
eastside ☽ ; bnet
Fanfictioncuando era joven, me enamoré solíamos agarrarnos de las manos, man, eso era suficiente luego crecimos, comenzamos a tocarnos solíamos besarnos debajo de la luz, en la parte trasera del bus