31;

1.2K 77 27
                                    

después de que manu bajara sus maletas, entramos a su casa y saludamos a sus padres. se veían personas muy serias, no me transmitían confianza.

-buenas noches. -dije con una sonrisa tímida.

nadie me contestó, solo asintieron con la cabeza y pasaron.

bueno, eso me había hecho sentir enojada. un saludo no se le niega a nadie. quizás estaban enojados con manu o algo así.

-ven, vamos al comedor. -dijo manu. ni siquiera pareció importarle lo que acaba de pasar.

-¿y tú que haces por la vida? ¿estudias, trabajas? -preguntó el papá de manuel, ni siquiera intentó parecer amable.

-estaba estudiando y trabajando un poco, pero vine a trabajar acá.

-estando en otro país, viniste a trabajar acá. ¿tenías bajas calificaciones?

¿por qué sus padres estaban a la defensiva, qué había hecho mal? lo peor de la situación era que manu no decía nada.

-no, yo era la mejor de mi clase. vine porque extrañaba a mi familia. -dije seria.

-¿la mejor de tu clase? no parece. -dijo su mamá.

me estaba empezando a enojar, no podía dejar que me trataran así.

-¿por qué no? -pregunté poniéndome a la defensiva, yo estaba muy orgullosa de mis notas.

-no sé. ¿cómo conociste a mi hijo? -habló su mamá.

-¿manu no les contó? nos conocimos en una fiesta. -quizás haber dicho eso había sido un gran error por la reacción de su madre.

-¿una fiesta? ¿y por qué andabas de fiesta en fiesta? ¿cómo tenías las mejores calificaciones si solo andabas de fiesta?

¿qué le pasaba a esta señora? me estaba faltando el respeto y si manuel no hacía nada, yo no me iba a quedar callada.

-¿disculpe? mis notas son algo de lo que estoy muy orgullosa, yo sé que soy una mujer muy inteligente y muy capaz. usted me está faltando el respeto y no se lo voy a permitir, permiso. -dije levantándome de la mesa ganándome la mirada extrañada de manuel.

-qué maleducada eh. -dijo su padre.

-cállase. -le dije y me dirigí a la puerta.

¿quiénes se pensaban que eran? ¿los reyes de inglaterra? viejos mugrosos.

salí de la casa caminando muy rápido, quizás estaba un poco lejos de mi casa pero tarde o temprano llegaría. tenía mucho coraje encima, quería matar a manuel. ni siquiera se tomó la molestia de seguirme o llamarme. no hizo absolutamente nada.

yo iba hecha una furia total, me sentía humillada completamente.

llegué a casa y al parecer abrí la puerta un poco muy fuerte porque todos los presentes me miraron con cara de asustados. y con todos los presentes me refería a camila, rubén, dario, javier y mis padres.

¡lo que me faltaba! justo ahora ellos habían decidido venir a casa, justo ahora que quería matar a cualquier persona que se me cruzara en el camino.

-¿estás bien, qué pasó? -preguntó mi mamá.

-sí, voy a mi habitación.

no esperé respuesta y subí a mi cuarto, si me ponía a ordenar quizás iba a dejar de pensar en lo que acababa de pasar en casa de manuel, así que lo hice, me puse a sacar la ropa de mis maletas y a dejarla sobre la cama para luego guardarla.

-hey, llegaste muy enojada. ¿todo bien? ¿discutiste con tu novio? -preguntó camila desde la puerta de mi habitación.

-no exactamente.

-¿entonces?

-con sus padres.

-¿con sus padres? ¿qué pasó?

-me trataron horrible, cami. o sea yo entiendo que alguien no te guste para tu hijo y tal pero nadie se merece que le traten como esas personas me trataron a mí.

-¿pero qué pasó, qué te dijeron?

-en resumen me dijeron que no merecía salir con su hijo y que mentía acerca de tener las mejores calificaciones.

-¿qué, por qué?

-no sé, lo peor de todo es que el inútil de manuel no dijo nada, no me defendió ni tampoco me buscó o me llamó o algo.

-¿estás hablando en serio?

-sí.

-qué idiota. pero... ¿qué les dijiste? ¿los trataste mal al inicio?

-con decirte que ni siquiera me contestaron el saludo, cami.

-¿qué les sucede a esas personas? por favor dime que vas a terminar con ese novio tuyo, ¿verdad? amiga date cuenta.

-reí. -sí, definitivamente lo haré porque no voy a dejar que nadie me trate como si yo no fuera grandiosa porque yo sé que lo soy.

-claro que sí, sofi. no te preocupes, ya no los volverás a ver.

no sé por qué pero el escuchar eso me llegó al corazón, había pasado dos años junto a manuel y apenas me había dado cuenta que nunca podía contar con él, para nada. había echado dos años de mi vida a la basura, dos años en los que pude conocer un montón de personas más.

-una vez... yo intenté terminar con él, con manuel. -suspiré. -pero él se puso histérico, se puso muy mal diciéndome que no podía dejarlo porque yo era todo lo que él tenía, que él no tenía a nadie más.

-tiene miedo a la soledad, entonces.

asentí mientras sentía cómo las lágrimas se acumulaban en mis ojos, yo sabía que jamás iba a contar con manuel para nada, siempre que le preguntaba sobre algo importante me respondía "no sé amor" como si diciéndome amor podía arreglar todo. siempre que trataba de incluirlo en decisiones importantes, él solo respondía que no sabía.

¿en serio había sido tan tonta durante tanto tiempo? ¿tan ciega? ni siquiera le importaba a manuel, solo perdí el tiempo.

y comencé a llorar, lloré porque había sido ingenua por tanto tiempo, lloré porque yo ya sabía todo lo que pasaba entre nosotros y aún así decidí seguir con todo.

sentí a cami abrazándome y tratando de calmarme.

-tranquila, sofi. yo sé que pasaron mucho tiempo juntos pero es lo mejor, tú mereces a alguien que te ame muchísimo, alguien que te valore, alguien que dé todo por ti, alguien que se sacrifique por ti, alguien que jamás te abandone, alguien que te respete, alguien que te quiera tanto como te quiero yo o tus papás, sofi. no llores.

-es que... me siento una tonta. siempre arruino todo.

-no digas eso, no arruinas nada.

-sí, arruiné mi vida. ¿por qué me fui, cami? ¿por qué tomé esa decisión de irme? perdí tantas cosas importantes, me perdí de sus vidas, es como si ahora fuésemos conocidos, nada más.

-hey, no digas eso. yo aún te siento como mi hermana de diferentes padres, eres muy importante para mí sofi y si hace cinco años me hubiesen dicho tu vida o la de sofi, hubiese elegido la tuya y si ahora me hacen esa pregunta, aún elijo la tuya. eres una gran amiga y una gran persona.

-gracias, cami. en serio te quiero muchísimo pero no puedo dejar de pensar en cómo arruiné la relación que tenía con todos, muchas veces me acuerdo cómo me miraban los ojos de javier cuando le dije que me iba, cómo me habló, lo que me dijo, todo. todo eso aún me persigue y me atormenta.

-¿y por qué no hablas con él?

-porque no, no quiero que piense otra cosa. no quiero sentirme una tonta cuando él me diga que ya ni siquiera se acuerda de esas cosas.

-está bien, no le digas. pero deja de pensar en eso e intenta ganarte su confianza de nuevo, intenta reconstruir lo que se destruyó.

suspiré, no estaba segura de que pudiera hacer eso.

eastside ☽ ; bnetDonde viven las historias. Descúbrelo ahora