Draco Malfoy y el mundo mágico

El amigo de un león

Debo de decir que el domingo fue difícil coordinar con los chicos. Blaise quería seguir viendo la serie, al igual que Pansy.

Theo estaba indeciso, Vincent y Gregory no querían hacer nada.

Tuve que ponerme fuerte y insistir, entre algunas maldiciones y molestias mal contenida. Todos se pusieron a practicar el encantamiento patronus. Cada uno pensó en el recuerdo más feliz de su vida, faltaba poco.

Solo teníamos que ser perseverantes y lo lograríamos. Contra todo pronóstico, Blaise hizo un encantamiento patronus incorpóreo. Theo estaba celoso de no haberlo logrado. Quizás Blaise poseía más recuerdos felices que los demás. En todo caso, el avance de Blaise fue lo que nos alentó a seguir intentando.

"Que tan habilidoso podría ser Blaise..."

En los libros poco se mencionó las habilidades de los Slytherins. Salvo las de Draco y su actitud odiosa. Parece que había subestimado a mis amigos, Blaise tenía talento para los encantamientos, Theo era inteligente, igual o mucho más que Granger. Pansy no era tan creída como se le describía, era protectora y le gustaba las cosas que a cualquier niña gustaría. Vincent y Gregory eran tímidos y amantes de la comida, no eran los matones que se suponía que eran

"Quizás fue la influencia de Draco los que torció a estos niños"

Terminamos de practicar el encantamiento patronus. Blaise se jactaba de su avance y habilidad mágica, tanto así que Theo le lanzó una almohada en la cara

-Oye!

-No seas presumido Zabini!

-Asi?! La envidia te corroe, Nott -se burló el moreno

-ya verás...

Cómo la habitación tenía nuevamente sofás y almohadas.

Una pelea de almohadas se desencadenó. Nunca pensé incluirme pero no estaba mal vivir momentos como este.

Al cansarnos, dejamos las almohadas y prendimos la televisión. Puse Alías Grace, todos nos acomodamos en los sofás.

-Solo dos capítulos y seguimos practicando -dije

-Si, mamá -dijeron todos al uniso.

El domingo... No fue mal día. Hubo un poco de lucha al momento de apagar la televisión, pero seguimos estudiando y jugando.

No era tan malo ser niño...

Al día siguiente tuve cierta irritación. Cómo mi expresión era de hielo, o bueno, lo era cuando estaba en multitud. Nadie lo noto hasta Pansy se me colgó sin saber mi estado de ánimo.

Al peinarme, le pedí con voz poco emotiva que no me pusiera broches

-Pero Draco!

-Pansy... -la fulmine con la mirada. Pansy se encogió

-Ok...

Al terminar el desayuno, pensé que solo tendría que ir a clases pero no. El puto director tuvo que presentar al nuevo docente de historia.

-Muchachos! Tal como dije la semana anterior. Tendremos un nuevo docente de historia de la magia. El señor Remus Lupin

Todos los alumnos aplaudieron. Pero mis pensamientos se volvieron turbios cuando ví al hombre. Desvíe la mirada, cosa que vieron todos mis amigos, incluso Theo estaba apunto de hablar pero lo miré con los ojos entrecerrados. Pudo entender mi gesto negativo

Al término del desayuno, nos retiramos a nuestra clase.

La razón de mi mal humor era justo y muy justificado. Los lunes teníamos clases con Gryffindor todo el día. Pansy apenas pudo notarlo cuando ingresamos al aula de pociones.