Devil's Awakening (Madness Has Begun+15)

Capítulo 31: Tierras Orientales.

Corríjanme si la parte de Asia es oriente, aunque lo voy a terminar de buscar de todos modos, ahora si vamos a la acción :D.

Benzou corre a una velocidad tan alta que fue capaz de alcanzar el tren.

Benzou: (ya casi llego, aguanten)

Mientras tanto en la locomotora.

Simón: tratare de para esto, a pesar que no tengo ni la más mínima idea de cómo hacerlo.

Justo cuando Simón se acerca, escucha un sonido similar a los engranajes de un reloj.

Simón: ¡NO!

Acto seguido, todo dentro de la locomotora explota, tanto fue la fuerza del golpe, no solo hizo retroceder a Simón, sino que dejo los mandos de la maquinaria inservibles.

Simón: *se reincorpora* Ah, maldición.

Elan: ese bandido nos ha arruinado.

En la consternación, finalmente Benzou aparece.

Benzou: ¡heeeeey! *cayendo del cielo* ¿los mataron a todos?

Simón: si, pero uno de esos dejo inútil el equipo *ve la herida de su rostro* wow, ten más cuidado con tu apariencia.

Benzou: tú dices esto *señala el corte* tranquilo, mi herida se cerrará con rapidez.

Elan: oye Ben tienes alguna idea sobre este tipo de asuntos.

Benzou: si te soy honesto esto no es lo mío.

Elan: oh *voltea a ver a Simón* ¿Qué tal tú?

Simón: pues he visto como "solucionar" este tipo de problemas, pero no estoy seguro. Puede que lo termine de arruinar aún más.

Elan: vamos, Simón tú puedes.

Benzou: sólo inténtalo, quien sabe tal vez tú idea es mejor que la mía, pero debes apresurarte, en menos de dos minutos este tren se descarrilara en la siguiente curva cerrada.

Rápidamente, Simón va hacia la cabina y trata de solucionar el problema de la máquina.

Simón: mmmm tal vez si jaló esta palanca hacia el otro lado...

Justo cuando la jala, la misma se rompe a la mitad.

Simón: maldición *lanza la palanca al suelo*

Benzou sólo se quedaba parado con los brazos cruzados sin ninguna expresión en su rostro.

Elan: ¿Cuánto tiempo queda?

Benzou: como veo las cosas, un minuto.

Simón por más que movía y hacia lo que estuviera a su alcance, no estaba logrando absolutamente nada.

Benzou: Simón *camina hasta la unión del tren con los otros vagones* Hazte a un lado.

Simón: ¿Qué vas a hacer? ¿Vas a parar el tren con tus manos?

Benzou: *mira a ambos como si nada* No, tengo una mejor idea.

Benzou desenvaina su espada y de un corte limpio, destruye la unión entre la locomotora y los Vagones. Tanto Elan como Simón miraban atónitos la escena, ninguno de los presentes dijo algo.

Benzou: mmmm *guarda su arma* Elan, puedes usar tus poderes de hielo sobre mis miembros.

Elan: *un poco estupefacta* Si-i.

Elan toma los brazos del demonio y en unos segundos Elan congela sus manos y piernas.

Benzou: gracias Elan *con una expresión alegre*