Cuando llegaron a Palacio, todo estaba igual que lo dejaron. Habían sido solo dos días , pero tan intensos que parecían siglos. Por un intrincado sistema de pasadizos ocultos que se comunicaban unos con otros y que solo unos pocos privilegiados conocían, llegaron sin ser vistos a la habitación de Haendel, donde se encontraba Adama siguiendo las instrucciones de Rahotep.
¿Adama? preguntó Thutmés cuando salio del pasadizo.
Si mi señor, estoy aquí- respondió esta rápida y veloz. He hecho todo lo que Rahotep me dijo y nadie ha notado la ausencia de mi señora, ni siquiera Merseak- dijo esta orgullosa por haber hecho tan bien su trabajo.
Estupendo Adama. Tus esfuerzos serán recompensados- dijo este mientras sacaba a Haendel tirando de ella.
¿Señora¿ ¡Que alegría me da verla! ¿Está bien? Me ha pegado un susto de muerte- dijo esta mientras se acercaba a ella.
Estoy bien Adama ¿no me ves? dijo esta enfadada, dejando a Adama algo cortada.
Ha sido un largo viaje. Estamos cansados. ¿Te importaría pedir que nos traigan la cena aquí? Mientras nos asearemos un poco- dijo Thutmes sin soltar a Haendel de la mano.
Por supuesto mi señor. Enseguida- dijo esta mientras salía de la habitación.
En ese momento, Haendel, dio un manotazo y se soltó de las manos de Thutmés que la miro enfadado.
No voy a dejarte sola, pero me quiero dar un baño para quitarme todo el polvo del camino y el sudor de estos días y como comprenderás no voy a dejarte sola.
¿No pensarás que voy a compartir el baño contigo? dijo esta sin mirarlo.
Pues no me parece mala idea- dijo este mientras de nuevo volvía a cogerla de la mano y la tiraba a la piscina que les servía como baño.
¡Que haces! grito esta totalmente empapada mientras intentaba salir de ahí. ¡Estás loco!
Si, estoy loco, así que será mejor que te tranquilices y me permitas darme un relajante baño antes de la cena- dijo mientras le cortaba el paso a las escaleras de salida.
Está bien, pero no voy a estar cerca de ti- dijo mientras se ponía en el lado opuesto de la piscina.
¿No te vas a quitar la ropa? pregunto este mientras empezaba a desnudarse.
No, así estoy muy bien- dijo esta mientras se liaba con los velos y mantos de su vestido que empapados empezaban a pesar haciendo que estuviese muy incómoda.
Como quieras, pero debes saber que no pienso separarme de ti ni un segundo, así que tarde o temprano tendrás que quitarte la ropa y yo estaré presente- dijo este guiñándole para enfadarla aún más. Uhhhh, que bien se está y que bien huele este nuevo jabón...
De acuerdo, pero date la vuelta y no mires- dijo esta desde el otro extremo antes la sonrisa picarona de Thutmes.
He dicho que no voy a perderte de vista ni un segundo- dijo este riéndose por la situación.
Pues muy bien, dijo esta sumergiéndose en el agua e intentando quitarse la ropa con dificultad.
¿Necesitas ayuda? preguntó este de forma socarrona.
No. Me las apaño bien.- respondió esta mientras echaba parte de las ropas fuera de la piscina.
La verdad es que necesitaba un baño como aquel. Que bien olían los aceites y los perfumes que echaban en el lugar. ¡Era una delicia!
Mira Haendel. Este aceite tiene un olor maravilloso y deja la piel muy suave ¿quieres probarlo? dijo mientras se acercaba peligrosamente a ella, que no tenía escapatoria.
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La Elegida de Amón
RomanceHaendel, una bella germana, va camino de conocer la tierra de su madre, Tebas, capital de Egipto ,sin saber que su destino es muy diferente al marcado por su familia,ya que la muerte del faraón Hatsepsut va a cambiar el devenir de los acontecimien...