La Elegida de Amón

¿Nasser?

Nasser no podía dejar de pensar en ella. Desde que la vio sus sentimientos se habían reavivado. Los rescoldos se habían vuelto intensas llamas. Desde que llego de nuevo a su casa no quería hablar con nadie, a pesar de que sus padres ya habían concertado su boda con Merseak. Decían que iba a ser la mejor manera de olvidar a Haendel aunque él no estaba de acuerdo. Sabía que los estaba haciendo sufrir,pero nadie lo hacía más que él. Maldecía el día en que Amón hizo esa profecía llevándose a su amada de su lado y ella, ya había realizado su elección. A pesar de que podía haberse ido junto a él a tierras lejanas, había preferido irse con Thutmés, pero seguro que era porque le tenía miedo- pensó este mientras su madre lo llamaba para que se sentase a la mesa. Habían invitado a Merseak y a su hermano para poder acordar la ceremonia.

Cuando entró todos parecían felices, todos menos él que no podía evitar sentirse molesto por todo aquello. Ya sabía que Merseak iba a ser una esposa estupenda. Era guapa, inteligente, modesta y todas esas virtudes que desearía cualquier hombre, pero no la amaba y ella lo sabía, estaba seguro aunque evitaba siempre esa conversación. Ella siempre había estado allí, desde que tenía uso de razón ella siempre había estado a su lado, pero no la amaba...

Nasser ¿Quieres que te sirva un poco de loto? pegunto Merseak solícita. Lo he preparado con mucho cariño

Gracias Merseak, pero no tengo mucha hambre- dijo este sin mirarla.

Debes comer hijo- dijo Karomama. Cada día estas más flaco y eso no es bueno. Además, debes estar en forma para tu boda.

En esos momentos un nudo se le cogió en el estómago a Nasser que le impidió tragar los alimentos.

Mamá- dijo Seneb. Deja al muchacho, no lo atosigues. Ya tendremos tiempo de hablar de la boda.

Como se nota que eres un hombre- dijo esta enfadada- Hay que preparar tantas cosas que cuanto antes se planifiquen mejor ¿verdad Merseak? dijo Karomama intentando aparentar normalidad.

Creo que voy a retirarme a descansar- dijo este mientras se levantaba de la mesa.

No te vayas Nasser, por favor- dijo Merseak mientas le cogía la mano con una mirada suplicante. Te prometo que no hablaremos de eso-

Es que no me encuentro bien, de verdad Merseak- dijo saliendo de la habitación mientras Karomama le indicaba con la cabeza que lo siguiera.

Nasser- grito esta mientras iba tras de el subiendo las escaleras que conducían a las habitaciones-

Dejame en paz Merseak. No estoy de humor para hablar.

Por favor, te lo suplico. No puedo más con esta situación. Todos están felices por nuestra boda menos tu.

No me hagas hablar Merseak. Ya sabes que es lo que me pasa. Nunca te he ocultado nada.

Lo se Nasser. Se que nunca podré competir con Haendel...

No me la nombres por favor. No quiero escuchar su nombre- dijo este mientras la interrumpía.

De acuerdo. Pero quiero que sepas que sé que no me amas, pero que estoy segura que con el tiempo lo harás. Voy a ser una buena esposa. Te lo prometo.

De eso no me queda ninguna duda Merseak. dijo este mientras la miraba- pero mi corazón todavía esta roto y no voy a poder ser un buen esposo para ti. Tu no te mereces a alguien como yo que solo puede ofrecerte un corazón hecho añicos. Tu te mereces a alguien que te lo ofrezca entero, que te ame como un hombre debe amar a su esposa...

Esperaré Nasser. Te prometo que nunca te pediré nada. Sólo déjame estar a tu lado y ser tu refugio, ser el puerto donde atraque tu barca. Creemos un hogar donde podamos vivir tranquilos rodeado de nuestra familia. ¿Hay algo más bonito que la serenidad de un hogar?Ella ya no va a volver, lo sabes- dijo mientras cambiaba la expresión del rostro de Nasser. Karomama me dijo que ella ya eligió, ella prefirió irse con su esposo...