Bad Luck || Markhyuck

XIII

—¡Gatito~~! — gritó Jeno, al cerrar la puerta—. Cuéntame todo y con detalles.

Donghyuck lo miró casi con susto, sin saber qué decirle.

—S-son mimos— respondió, bajo, con las mejillas rosadas.

—Awww, eres adorable— el chico apretó un poco su mejilla, haciendo que el minino frunciera el ceño.

No le gustaba que tocaran sus cachetes, apenas podía soportar que Mark a veces lo hiciera.

—De todas las cosas del mundo no podía esperar que Mark Lee fuera así de cariñoso con un híbrido— Jeno rió un poco—. Y pensar que decía que no le gustaban.

Donghyuck frunció un poco los labios.

—Lo hace porque yo se lo pido— murmuró, haciendo que la sonrisa de Jeno se borrara, el chico alzó las cejas un poco—. Él no... Quiere mucho— Donghyuck se encogió de hombros—, ya lo viste— añadió.

—¿Ver qué? — preguntó Jeno de forma retórica—. Hyuckie, conozco a Mark desde hace años, sé que él no haría algo así si no lo quisiera— dijo, el gatito lo miró con duda—. Estás hablando con la persona que lo vió rechazar dinero por besar a una adolescente completamente enamorada de él que no estaba para nada mal.

Donghyuck frunció aún más el ceño, la idea de Mark besando a otras personas no le gustaba.

Escuchó a Jeno reír.

—Pero contigo no es así, Hyuck, Mark te besó porque en serio quiso hacerlo—dijo, con un tono más agudo de lo normal—. No es la primera vez, ¿no?

Donghyuck negó, lo que hizo que Jeno riera más fuerte y se moviera con emoción.

—¡Son tan lindos!

Donghyuck sintió sus mejillas calentarse, comenzó a quitarse el gorro y su abrigo, molesto por tanto calor.

Ignoró al emocionado humano y fue directo a la habitación de Jaemin, sin molestarse en tocar, lo encontró acompañado de Renjun, aunque el castaño peinaba su cabello y acomodaba sus orejas, ignorando al tigre que hablaba de algo que no le importaba.

—¡Donghyuck~! — dijo el conejo con emoción.

—¡Bebé tigre!

Donghyuck sonrió un poco, hizo una mueca molesta cuando Renjun había ido hacia el para abrazarlo, el conejito tenía bastante fuerza y sintió como le faltaba un poco el aire.

Rápidamente sus amigos comenzaron a hablarle, aunque él no los escuchaba realmente, pensando en su humano y en las palabras de Jeno, con algo de duda, y luego de un rato de soportar a los chicos hablar murmuró:

—Chicos, ¿es normal que tu dueño te de besitos?

Ambos híbridos lo miraron con curiosidad.

—¿Si Jeno hyung nos da besos? — preguntó Renjun, el gato asintió—. No...— murmuró el conejo, pensativo—. Bueno, sí, recuerdo que una vez sí... O dos...— el castaño tomó su mentón, intentando recordar, arrugando su nariz.

—A mí si me da besos— dijo Jaemin, asintió—. Desde incluso antes que Junnie llegara.

—¡Eso no es justo! — se quejó el conejo, frunciendo el ceño—. Yo quiero besos— hizo un puchero.

Rápidamente, Jaemin tomó su mentón para dejar un rápido beso en su mejilla.

—¿Te gustó?

Ambos vieron el rubor subir lentamente a las mejillas del chico.

—Tendría que recibir un beso de Jeno hyung para corroborar qué es mejor— murmuró.

Jaemin rió un poco, concebido por la ternura de su compañero.

—Mark también me da besos— murmuró Donghyuck—. Pero últimamente lo hace más seguido y... Me gustan... ¿Está mal?

—Los besos son lindos— dijo el tigre—. A mí también me gustan los besos de Nono— sonrió ampliamente—. No creo que esté mal algo tan bonito.

—No es justo que hablen de eso frente a mí— se quejó Renjun.

Jaemin suspiró con cansancio.

—¿Quieres que te de un beso de Nono para que veas cómo se siente?

Renjun arrugó un poco su nariz, pero no respondió.

Sin pensarlo dos veces, Jaemin se giró más hacia él para tomar sus mejillas y juntar sus labios, cerrando los ojos mientras lo besaba con profundidad.