Bad Luck || Markhyuck

LXI

—Makku.

—Mjmm...

—¿Me compras juguetes?

Mark rió por lo tierno que era.

Se volteó en su lugar de la cama, quedando de costado, mirando el perfil de Donghyuck, quien tenía sus ojos puestos en el techo. Giró el rostro hacia él al sentir su mirada, el rubio buscó debajo de las sábanas para entrelazar sus dedos y dejar caricias en sus nudillos con el pulgar.

—¿Quieres uno de eso lásers como el de Sunggie? ¿O un peluche?— Donghyuck negó—. ¿Qué juguetes quieres?

—Jae me mostró unos nuevos que les dio Jeno— dijo, se giró para quedar frente a frente—. Hay unos que son largos que tienen colores muy lindos y hay otros que se mueven... Nunca los había visto.

Mark frunció el ceño.

—¿Qué? D-Donghyuck, ¿estás seguro que quieres eso? ¿Sabes para lo que sirven?

Donghyuck asintió con seguridad.

—Jugamos con eso con Jae y Junnie la última vez— dijo, sonriendo—. Fue divertido— el pelinegro mostró sus encías en una tierna sonrisa.

Mark estaba sin palabras.

—Espérame un segundo, bebé.

🐾

Jeno suspiró al atender el teléfono.

—Lee...

—¿Cómo es eso de que tus novios y mi novio jugaron con juguetes sexuales nuevos que tú les habías regalado?

Jeno no pudo decir nada por unos cuantos segundos, y Mark comenzó a enojarse.

—¿Qué mierda estás diciendo?

—A ver... Hyuckie me habló de unos juguetes nuevos que tú le habías dado a los híbridos... De unos largos con colores y otros que se movían. Vamos, Jeno. ¿Dildos y vibradores a unos pequeños?

—Eres un idiota, Lee. Y que me digas que compro juguetes sexuales es una ofensa para Jeno segundo. Ya sabes que uso las pastillas mágicas, pero sólo es eso y-

—¿Por Jeno segundo te refieres a tu polla?

—No puedo decirle mini-Jeno. No coincide con la realidad— lo escuchó reír.

—¿Por qué estamos hablando de lo que te mide la polla?— Mark se desesperó—. Jeno, acá Hyuckie me dijo que básicamente tuvieron una fiesta de consoladores.

Jeno rió.

—Ahora entiendo... Ay. Puta madre, Mark. Estoy lloro de risa... Los juguetes largos que dice Donghyuck es una de esas tipo cañas de pescar que usan para los gatos, que tienen plumas de colores o un juguete al final de la línea. ¿Los has visto?

Mark se frotó el rostro y suspiró.

—Y los que se mueven deben ser el ratón robot que les regalé, se enciende y va por toda la casa... El otro día lo estuvieron corriendo hasta que Jae cambió a su forma de tigre y asustó a Hyuck...

Mark se sentía aliviado.

—Eres muy pervertido. Lávate el cerebro con agua bendita, Lee.

—Está bien. Lo siento, Jen.

—No pasa nada, bro. Me alegraste un poco el día con esta estupidez.

—¿Muy estresado?

—Hoy tuvimos unos problemitas con un incendio y fue un rescate muy complicado de unos cuantos híbridos. Sólo cuatro están a salvo. Otros cuatro murieron, y otros dos... Reza por ellos...

>>Y en casa Renjun pescó un virus o algo así. Está con fiebre y dolor de cabeza, y tiene que hacer dieta hasta que se le pase porque después tiene náuseas. Y Jae no se aleja de él y no quiero que se enferme tampoco pero no se separan...

—Oh, espero que se mejore. Llámame si necesitas ayuda con algo, ¿sí?

—Gracias, hyung. Lo aprecio... Te diría que por ahora no traigas a Donghyuck aquí. Cuando esté mejor te aviso.

—Por supuesto.

—Descansa por mí, Lee.

—Lo haré— Mark sonrió—. Nos vemos, Jeno.

—Adiós, Lee.

🐾

existen conversaciones normales y luego están estas, ahre.