Presente.

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Estoy inspirada con esta historia. Aprovéchenme. ❤️❤️❤️

Finalmente fueron a la planta baja.
Sesshomaru abrió la cajuela del auto y le indicó a su compañera:

------- Pon todo ahí adentro. Voy por el muchacho.

El lobo entonces cruzó la calle y fue a la puerta de su anciana vecina, llamando al timbre de la casa y siendo recibido por Kohaku...

----- Estás listo?---- le preguntó al castaño.

----- Si, señor. ----- aseguró el joven sacando su maleta de la casa; Sesshomaru se hizo a un lado para dejarlo salir.

------- Adelante. Ahora voy. ------ le indicó el Taisho al joven quien asintió y se marchó.

------- Se marchan ya???------ preguntó la anciana Kaede acercándose a la puerta, frente al peliblanco.

------ Tenemos que.------ declaró él.------ Aquí ha dejado de ser seguro para Rin.

------- El niño me contó todo.... Gracias al cielo que ella está bien.

------- Yo... Tengo que pedirle un gran favor...

------- Lo que sea, joven Sesshomaru.

------- Necesito que venga con nosotros.----- Soltó.

Los ojos de la mujer se abrieron grandes.

------ Que?!?

------ Escuche... ----- pedía Sesshomaru; era obvio que no quería tener que pedirle eso a la anciana, pero también era obvio que parecía no tener opción.------- Rin... Rin podría haber concebido nuevamente. A dónde vamos es desconocido para nosotros, de ninguna manera podría confiar en alguien para acercársele y que se asegure de que todo está bien durante el periodo de gestación y menos aún si llegara a requerir ayuda durante el parto. Necesito a alguien de confianza con las habilidades necesarias... Se que es mucho pedirle pero... Por favor. No podría confiar en nadie más que usted. Prometo regresarla personalmente una vez que Rin haya dado a luz. Por favor, venga con nosotros.

La anciana guardó silencio unos segundos...

------- Joven Sesshomaru... Dios sabe que no hay nada que no haría por esa niña. Pero... Creo sinceramente que resultaría más una carga que una ayuda para usted. Soy una anciana. Ya no estoy en condiciones de hacer un viaje tan largo... No quiero representar más un problema que una ayuda en todo caso.

------- Solo serán diez días antes de  llegar si nada nos retrasa. Después de eso permaneceremos en ese sitio, al menos hasta que los cachorros hayan nacido. Entonces la traeré de vuelta. De ninguna forma representará un problema... Por favor. Si Rin llegase a necesitar ayuda, yo solo podría dejar que usted se la diera... Por favor...

La mujer guardó silencio nuevamente y suspiró profundo...

------ Muy bien...---- accedió al fin. ------- Solo porque sé que usted no es de pedir ayuda....----- sonreía la mujer.------- Es obvio cuánto ama realmente a esa niña y la verdad es que yo también la quiero mucho...Iré con ustedes.

Solo aguardaron un poco más a qué la anciana Kaede empacara algunas cosas; Rin y Kohaku se mostraron felices de que ella les acompañara y la joven castaña expresó toda su gratitud.
Kohaku evidentemente se sentía muy aliviado; al menos no estaría solo con el par de lobos, a quienes en verdad quería mucho, pero simplemente seguían siendo una especie diferente.

Emprendieron pues su largo viaje hacia un destino que, aunque sabían lo que encontrarían, era incierto la clase de futuro que tendrían una vez llegaran.

Tuvieron que parar más veces de lo pensado debido a qué Rin tenía mucha hambre, además de que nadie sabía que Kohaku se mareaba en carretera.

Durante la noche paraban y no tenien problema en encontrar donde quedarse; el bosque que rodeaba la autopista estaba llena de propiedades con cabañas en renta en dónde se quedaban; desde luego el trato era siempre que Kohaku y la anciana Kaede se quedarán en un sitio a parte de los lobos...por motivos que lo hace falta mencionar.

Volvían al amino al anecer y continuaban hasta tener que hacer una parada nuevamente...

Esa fue la rutina durante las siguientes casi dos semanas...

------Estamos demasiado retrasados. ------ se quejó el peliblanco mientras ambos permanecían junto al auto estacionados en una pequeña plaza de paso, cerca de la estación de gasolina, esperando a que Kohaku saliera del baño.

------ Tranquilo. Llegaremos mañana después del medio día.----- Tranquilizó Rin con voz dulce mientras se recargaba en su brazo.

------Asi así, no se suponía que tardaríamos tanto. Tenemos tres días de retraso!

----- Ni siquiera es como que nos estén esperando, Sesshomaru. Cálmate.-----Ell peliblanco gruñó con disgusto. ------ Hace calor...----- expresó la joven separándose de su compañero. ------ Iré por algo de agua. Quieres?

------- No. Estoy bien.

------ Bueno. Igual traeré suficiente para todos. ------ se despidió besando la mejilla de su amado.----- No tardo.

Entró a una tienda en dónde vendían todo tipo de comestibles, con una farmacia y más artículos que podrían necesitar de durante un largo viaje.
Tomó una canastilla con ruedas y en ella pudo cuatro botellas de agua, después anduvo por los pasillos buscando cualquier otra cosa que pudieran necesitar.

Llegó entonces al último pasillo, era un área dedicada solamente a artículos para bebés: ropa, pañales, shampoo, lociones...

Caminó por aquel pasillo deleitándose con el dulce aroma que era natural de cualquier bebé. Miró en los estantes todas las cosas adorables y suaves dejando que la llenara una sensación de mariposeo en el estómago.

La melancolía la abrumó por un momento al pensar en aquella perdida que había sufrido meses atrás y la angustia la acompañó cuando pensó en que, seguramente ahora llevaba de nuevo cachorros y temía profundamente perderlos también...

------Rin...----- llamó la voz de Sesshomaru detrás de ella; ni siquiera se había dado cuenta entra e su presencia. ------ Estás bien?----- Le preguntó.

------- Si...----- respondió ella mientras dejaba en su lugar un par de zapatos diminutos para luego dar media vuelta y mirar a su compañero. ------- Estoy bien...

El peliblanco suspiró profundamente; acarició el rostro de su amada y la consoló:

------ Todo saldrá bien, Rin. No tienes de que preocuparte.

------- No podemos estar seguros, Sesshomaru...

------ Solo confía...

------ Es que... No puedo olvidar lo que pasó la última vez...

------ No digo que lo hagas, Rin. Solo digo que no le temas más. Déjalo ir. Concéntrate en estar bien ahora, para que todo marche bien en el futuro.

Rin soltó un suspiro y miro a los ojos a su amado, dándole una ligera sonrisa antes de pasar a abrazarlo con sus menudos brazos...

-----Te amo, Sesshomaru.

------ Yo también a ti.------ le aseguró el abrazándola también. ------- No importa lo que pase, eso no va a cambiar jamás.

Retomaron su camino por el pasillo para ir a la caja cuando Rin se detuvo nuevamente.
La joven miró algo que la hizo esbozar una sonrisa, lo tomó con su mano y luego se giró para mostrárselo a su compañero; Sesshomaru observó el objeto: era un pequeño pañalero de algodón de color blanco pero con un estampado en color negro que decía: "Daddy's Little Monster". Con el dibujo de un par de pequeñas garras debajo.

El lobo también esbozó una ligera sonrisa ladina, tomó la prenda y la puso en la canastilla junto con el resto de sus cosas...

MoonlightDonde viven las historias. Descúbrelo ahora