Más de una vez pensó en irse corriendo.
No podía mentir, eso no no era lo que quería.
Desde luego que no quería quedarse ahí y entregar su primer celo a un completo desconocido que ni siquiera era de su clan.
Por qué carajos tenía que celar ahora??!?
Pero que otra opción tenía??
Estaba herida, miembros de su propio clan la perseguían; que se supone que debía de hacer?
Todo lo que quería era sobrevivir, al menos hasta sanar y poder pensar en un plan para escapar de su manada.
No quería esto.
No quería estar ahí.
No quería estar con él.
Pero no había mejor opción.
Tenía que sobrevivir.
Se quedo dormida en el salón de aquel gran vestíbulo.
Estaba agotada.
Si él tanto la quería fuera podía matarla en ese momento. No le interesaba.
Ni siquiera se despertó una sola vez.
Durmió de corrido por no supo cuánto tiempo hasta que hubo finalmente despertado.
La despertó el olor de algo que se cocinaba. Olía delicioso.
Abrió los ojos y sintió su estómago quejarse mientras dolía terriblemente.
Miró los ventanales y estos habían sido cubiertos por completo por grandes persianas negras.
Todo estaba bastante oscuro a excepción de la chimenea y una luz que venía de un sitio que su olfato le indicó era la cocina.
Había un reloj arriba de la chimenea, éste marcaba las ocho en punto. Ya había anochecido.
No había vuelta atrás...
No tenía ni fuerzas ni ánimos para levantarse, así que se quedó ahí tendida, solo viendo a la nada, intentando no pensar en nada, hasta que una figura se plantó frente a ella. Alzó la mirada y vio entonces su rostro; la miraba fija y fríamente, sin enojo, sin dicha...no había nada en su mirada...
------Tienes que comer. -----Le dijo de la misma forma fría y seca en la que la miraba; ella simplemente bajó la mirada y respondió:
-------Me duele el estómago.
-------Es porque llevas demasiado tiempo sin comer.
-------No quiero.
El frunció el ceño con molestia.
-------Dejarte morir de hambre no es parte del trato.
-------Tampoco lo es que me alimente.
------No seas orgullosa! Ni siquiera puedes cazar ahora. Estas herida.
-------Tampoco era parte del trato que fingieras que te preocupas por mí.
-------Me estás colmando la paciencia!. Te recuerdo que sí era parte del trato no darme problemas, ahora obedéceme y ve a comer algo!!
Ella lo miró fijamente con el ceño fruncido un momento, pero tenía que reconocer que había perdido la contienda... La había perdido desde el momento en que se metió en el territorio del peliblanco. Su terreno, sus reglas y le gustara o no, ella había rogado por quedarse ahí.
Sacó sus piernas del sillón y se dispuso a levantarse, pero su pierna herida no tenía fuerza suficiente, así que casi se desplomó de nuevo al suelo, pero para su fortuna, Sesshomaru la atrapó al instante...
------L...lo...lo siento...------Se disculpó ella.
-------Tus heridas siempre tardan tanto en sanar?
------Eh? Pues...si...lo normal.
--------No. No es normal. Aunque desconozco como sean las cosas para los no cambiantes, para un lobo normal las heridas sanan rápido.
--------Oh...
Ella bajó la mirada. Nunca le había vergonzoso tanto su condición de no cambiante. Nunca se había sentido tan debil.
--------Vamos...------Indico él y acto seguido y para sorpresa de ella, la levantó en brazos para evitar que caminara.
--------Ah! Espera! No...no hagas esto!!------Reclamó ella.
-------Cállate ya. ------Ordenó el caminando hacia el comedor. -------Si agotas mi paciencia....------La sentó en una silla frente a la mesa, en donde la aguardaba un plato ya servido con abundante y humeante comida y una jarra con agua y un vaso de cristal. --------se acabó el trato. -------sentenció el dándole la espalda y marchándose sin más.
No tenía idea de cuanta hambre tenía.
Devoró aquel plato y casi a rastras fue a la cocina para tomar más comida cuando terminó.
Nunca se había sentido así. Jamás había tenido tanta hambre.
Si bien llevaba buen rato sin comer, pensó que no debía ser para tanto. Parecia no saciarse nunca.
Después de varias horas, literalmente terminó con todo lo comestible que había en aquella cocina, lo cual ciertamente era mucho. Ahora no quedaba nada.
Escuchó volver a Sesshomaru y cuando éste fue directo a la cocina, la encontró sentada sobre la barra raspando lo último que quedaba de un bote de yogurt.
El peliblanco miro alrededor y vio todo el desastre de platos, cubiertos y empaques sucios y vacíos así como las alacenas abiertas y completamente desiertas...
------Lo...lo siento...-----Se disculpó ella mostrándose asustada. ------Yo... No se...no sé qué pasó conmigo. Jamás como de esta forma. Perdóname.
-------Está bien...-----Aseguró el con su típico tono seco y frío. Por fortuna no sonaba enojado. -------Es normal.------Aseguró.-------- Las hembras comen mucho más antes y durante el celo porque naturalmente, su cuerpo espera que se apareen y conciban; por lo que absorbe muchos más nutrientes de lo normal. -----El,peliblanco dio media vuelta dispuesto a salir nuevamente de la cocina...------Te traje ropa para que puedas cambiarte a lo largo de este mes. -----Indicó sacando del bolsillo de sus jeans las llaves de un auto. ------Volveré a salir, esta vez por más comida. Si necesitas algo dímelo de una vez porque en cuanto comience el celo no podremos salir de aquí.
-------Aa...Aamm...pues...-----Intentó pensar rápidamente en algo que le hiciera falta. Nunca había estado todo un mes encerrada... -------A decir verdad, si necesito algo...
------Que?-----Él comenzaba a impacientarse.
------Es que...yo... Tendré mi periodo pronto y...
------No vas a sangrar.
------Eh? Disculpa?
--------Las hembras no sangran en el tiempo que dura el celo porque como ya te dije, su cuerpo espera que conciban, por lo que retienen la ovulación por más tiempo hasta que el celo a terminado y no hay concepción. En verdad nadie te explicó nada jamás?!
--------P..pues... Supongo que, mis padres debían hacerlo pero...------La joven bajó la cabeza y la aflicción y la tristeza fueron evidentes en su rostro. -------Lo siento.
Sesshomaru entorno los ojos y suspiró pesado armándose de toda su paciencia, la cual jamás había sido mucha. Se dio media vuelta y se acercó de nuevo a la barra, en donde la joven aún estaba sentada...
-------Como te llamas?-----Le preguntó al darse cuenta de que no sabía su nombre.
-------Rin...-----Respondió ella sin levantar la cabeza.
------Rin que?
-------Himura. Soy Himura Rin...
------Bien...-----Expresó el en un muy ligero suspiró antes de volver a girarse para marcharse.------No voy a tardar. No salgas por ningún motivo, entendiste?
------S...sí...
Así pues él se fue dando otro portazo a la puerta de la entrada...
