Las semanas y meses próximos siguieron su curso debidamente.
Las guardias no interfirieron ni afectaron la temporada de celo y para cuando está hubo terminado, las vigilias tuvieron que ser duplicadas por los machos y hombres humanos ya que ahora la gran mayoría de hembras y mujeres que no tenían ya cachorros para cuidar, habían concebido.Aguardaron cualquier noticia de la llegada de sus enemigos pacientemente y sus instintos se hacían más fuertes cada día que pasaba, reconociendo el peligro inminente.
El invierno llegó a su último mes finalmente. Las nevadas se habían acabado, pero la que ya había llegado a penas comenzaba a derretirse.
El frío prevalecía y recorría la ciudad, más como un augurio que como algo natural de la temporada... Algo ocurriría y sería pronto.Ese día, Kohaku llamó a la puerta de la anciana Kaede y esta atendió casi de inmediato...
----Hola, Kohaku!----Sonrió la anciana. ------Que te trae por aquí?
------Que tal, anciana Kaede...----Salidó el joven con una reverencia. ------Disculpe la visita improvista, pero quiero preguntar si no sabe algo del señor Sesshomaru y Rin... Hoy le tocaba a él ir a la guardia pero no me llamó para que cuidara de Rin...
-----Es cierto...a mí tampoco me ha mandado llamar...-----Onservo la anciana un tanto sorprendida.
------Cree que haya dejado a Rin sola?
-------No. De ninguna manera lo creo. Ella deberá dar a luz en cualquier momento, no la dejaría sola sabiendo eso.
------Pero aún así nunca ha faltado a la guardia...
La anciana pareció pensar por un momento...
----- Posiblemente Rin ya este en trabajo de parto...------Dijo la anciana.
------Pero...no la iba a asistir usted???
------Solo si las cosas se ponen difíciles y llegará a requerir ayuda...-----La anciana suspiró. ------Aún así...-----Entró rápidamente a su casa y casi enseguida volvió a salir, esta vez poniéndose un abrigo. -----Será mejor que vaya a ver que todo esté bien...
------La acompañaré...
Así pues, ambos humanos se dirigieron a la casa de los Taisho, la cual estaba un poco ms en el bosque.
Al llegar la anciana llamó a la puerta, pero nadie respondió...-----Bueno, voy a entrar...------Dijo la anciana sacando su propia llave de su abrigo. ----Tu quédate aquí, Kohaku. Si están adentro y Rin está en trabajo de parto, Sesshomaru te hará pedazos si te acercas.
Kohaku tragó pesado.
------Bien... Yo esperaré aquí.
La anciana entro entonces a la casa y cerró la puerta.
Todo estaba a oscuras, las persianas habían sido cerradas y ninguna luz estaba prendida.
Fue a las escaleras y desde ahí dio a conocer su presencia:------Joven Sesshomaru, Rin! Soy yo. Solo quiero saber si están bien. -----Nadie respondió. ----Voy a subir.----Advirtió.
Subió entonces las escaleras y se percató de que todo estaba igual de oscuro.
No había nadie en el estudio, en las habitaciones de visitantes ni en la que habían destinado para los bebés por llegar; fue entonces que llamó a la puerta de la alcoba principal...------Joven Sesshomaru?-----Llamó antes de tirar la perilla con cautela y comenzar a abrir la puerta lentamente. Una vez que lo hizo lo suficiente,mes asomó...-----Ahí están. -----Sonrió pues al ver al gran lobo blanco completamente transformado, echado sobre la cama, pero con la cabeza erguida, para ver a la mujer que entraba a la habitación.
