Perder no es opción.

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La pareja de lobos acabó finalmente con su último contrincante: el macho oscuro lo sujetó con fuerza, poniendo todo su peso sobre el y la hembra cobrisa de le lanzó encima, hundiendo sus aliados dientes en su cuello, perforando la yugular y haciendo saltar la sangre por doquier.
Una vez su enemigo dejó de moverse, ambos soltaron su agarre, dejando a la bestia que los había atacado tendido en el suelo completamente inerte...

Jadeaban completamente agotado; la sangre empapaba gran parte de sus pelajes, siendo gran parte de sus enemigos, pero también suya...

Miraron los cuerpos a su alrededor... Eran demasiados... Muchos más de los que creyeron poder vencer solos ellos dos... Pero lo hicieron.

La hembra cobrisa soltó un quejido de repente y casi al mismo tiempo, calló al suelo sobre su abdomen completamente exhausta..

---- Ayame! ----- Le ladró su compañero a su lado mientras pasaba a olfatearla y acariciarla con su nariz, comprobando que sus heridas no eran demasiado graves, sin embargo, había perdido mucha sangre y estaba muy lastimada...

El macho comenzó a pasar su lengua por las heridas de su compañera, sin embargo se interrumpió cuando ella le advirtió:

------ Koga... El bebé...

Fue entonces que el lobo oscuro presto atención al llanto de su pequeño hijo, el cual no había dejado de resonar en todo ese tiempo.

Ambos lobos se apresuraron entonces a la planta alta de su casa y aceleradamente entraron a la habitación del bebé de solo cuarenta días que estaba en su cuna.

La hembra tomó su forma humana a penas cruzó la puerta de la habitación y se apresuró a tomar al niño de su lecho...

------ Oh, mi amor...------ expresó la hembra al acunar en sus brazos a su bebé, apoyándolo contra su cuerpo desnudo...

------- Él está bien?----- Preguntó el macho oscuro tomando también su forma humana y acercándose a su compañera para ver a su hijo.

------ Si... Está bien.----- Respondió Ayame dando palmaditas a la espalda del infante y meciéndolo con suavidad intentando calmarlo. ----- No lo tocaron.

Koga esvozó una sonrisa que denotaba alivio mientras pasaba a acariciar la suave cabecita de su bebé, alborotando su escaso y sedoso cabello cobrizo, igual al de su madre.

Ambos pasaron a sentarse en el suelo, recargados en una de las paredes de la recámara, intentando reponerse de su batalla mientras seguían intentando calmar a su pequeño hijo...

------Ssshh...----- consolaba la madre. ------ Tranquilo, mi vida... No pasa nada... Papá y yo vamos a protegerte, está bien?? Ya pasó... Nadie te va a lastimar... ------ El bebé razguñaba desesperado el pecho de su madre...------ Tienes hambre? ------ Preguntó la hembra a su cachorro para luego acomodarlo mejor contra su pecho y ayudándolo a prenderse a su seno para que de inmediato, se tranquilizara y empezara a alimentarse... ------- Buen niño... ----- le sonrió al pequeño, acariciando su rosada mejilla con uno de sus dedos y después, miró a su compañero: ------Koga...----- le llamó, haciendo que el también apartará la vista del bebé para mirarla a ella. ------ Gracias por llegar a tiempo. ---- le expresó.

Koga le sonrió con cariño a su compañera...

------ Gracias por protegerlo, Ayame...----- le expresó él, pasando a acariciar de nuevo la cabeza de su hijo. ------- No dejaste que lo tocaran... Buena chica.------ Le sonrió. Ella lo hizo también para luego volver a mirar a su bebé...

------- Jamás dejaré que le hagan daño... Por eso vinimos aquí, no es así?

------Si... ------ Koga recargó su cabeza en el hombro de su hembra, permitiendose así, contemplar mejor a su hijo. ------ Así fue...






Han escuchado alguna vez que los animales sienten la muerte?

Pues es verdad. Y en esta ocasión, los lobos podían sentirla como una inmensa fuerza que los aplastaba...

Lamentosos aullidos y chillidos resonaban en cada rincón y taladraban los oídos de toda bestia y humano alrededor.

Sesshomaru sentía que la cabeza le estallaría...
No solo resonaban en su cabeza los lamentos de todos los lobos y humanos de aquella tierra, sino también los gritos y lamentos de su amada compañera, quien daba a luz a sus cachorros no muy lejos de ahí...

Atravesó el bosque aceleradamente dejando rastro de su sangre en el firmamento y sus huellas estampadas en la escasa nieve...
Podía oler a aquel que se le aproximaba...
Podía escuchar sus alaridos desesperados al caer una y otra vez en las trampas que rodeaban el perímetro de la cabaña, pero pese a que lo olía ya mal herido, lo escuchaba seguir corriendo a su encuentro, determinado a acabar con su vida.

No tardaron mucho más en finalmente encontrarse y sin mayor preámbulo, se lanzaron sobre el otro con los colmillos y las garras por delante, mordiendo y arañando todo lo que a su paso había.

El gran lobo blanco hundió sus colmillos en lo bajo del cuello de su enemigo, pero éste, consiguió sujetarlo por la parte posterior de su cabeza, haciéndole daño y obligándolo a soltarlo para entonces, ser lanzado a un lado, golpeándose contra un gran árbol...

------- Siempre se escuchó que eras problemático...------ Hablaba la conciencia del lobo oscuro quien se acercaba al caído blanquecino, dejando su sangre en el suelo a cada paso. -------- Taisho Sesshomaru... El problemático cachorro del grandioso Inu no Taisho, finalmente llevó a su propio clan a la ruina total... ------ la gran bestia blanca se puso de pie nuevamente y le mostró los dientes a su oponente.------- De todas las hembras con las que pudiste aparearte, elegiste a la más valiosa de todo el clan enemigo... Que afán de arruinarte la vida, Sesshomaru... La tuya y la de toda tu manada... Has matado a tu padre por ella y ahora yo voy a matarte a ti. Me convertiré en el Alfa legítimo de los tres clanes: el mío, el tuyo y el de los desertores... ------ Sesshomaru gruñó amenazante. ------ Prometo deshacerme rápidamente de las crías que le engendraste a mi chica favorita... No sufrirán mucho, te lo aseguro.

Dicho aquello, ambos lobos volvieron a lanzarse sobre el otro , dejando que se bramidos golpearan el bosque y su sangre manchara el firmamento...


-------- OOOHHH... OOOOOOOOAAAAAAAHHHHH!!!!! ---- Clamó la joven hembra castaña con inmenso sufrimiento mientras permanecía de pié, con las rodillas ligeramente dobladas y con sus manos apoyadas en la pared... ------ DIOS!!! ----- Jadeaba...----- No... NO PUEDO!!!.. NO PUEDO HACERLO, ANCIANA KAEDE!!!! ------ Sollozaba en medio de sus quejidos...------ AAAAH...AAAAH!! DIOS!!!!! ... MI... MI BEBÉ NO PUEDE SALIR!!!

------ Puedes hacerlo, preciosa...------- le animaba la anciana detrás de ella, quien permanecía lista para recibir al cachorro que nacía. ------ Ya lo puedo ver, pero necesito que sigas intentando...

------- No podré hacerlo...----- lloraba Rin. ------- No lo lograré...

------- Si, Rin, si lo harás... Puedes hacerlo. Tienes que hacerlo. Piensa en el joven Sesshomaru... Se morirá si algo te sucede o a éstos bebés... Por favor, mi niña, tienes que hacerlo!

La joven hembra sollozó y al poco tiempo volvió a quejarse con dolor...

------ OOOH DIOS!!!!

------ Vamos, linda...------ Le animó la anciana ----- Puedes hacerlo. Puja!

Rin cedió con tanta fuerza como pudo. Sabía que no podía rendirse... Solo esperaba que Sesshomaru  tampoco lo hiciera....

MoonlightDonde viven las historias. Descúbrelo ahora