#03

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— Número de la Bestia, buenas-

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Número de la Bestia, buenas-

— ¿Realmente el cielo no existe?

¡Maldición, chico!

— Me llamo Jisung.

Acabo de comenzar mi turno, idiota, si llamabas un jodido minuto antes podrías haberte topado con Catorce y él te haría...

— ¿Catorce? ¿Qué clase de nombre es ese?

El suyo, al parecer. ¿Podrías prestar atención al peligro que casi-

— ¿Qué representan los números? ¿Cuál es el tuyo?

Chico, en serio, no sabes en lo que te metes.

— Por favor, señor demonio. Tengo muchas dudas y n-no sé qué hacer con mi cabeza ahora. Siento que me estoy volviendo loco.

Porque no deberías estar haciendo esto.

— Por favoooooooooooooooor.

¡Bien! Tonto. ¿Qué quieres saber?

— ¿Qué representan los números? ¿Son sus nombres, de verdad?

Son algo así como... ah, ¿cómo lo digo? Mira, chico, es parecido a cuando un animal tiene muchas crías y no sabes qué nombre ponerles. Para hacerlo fácil, nos dieron números. ¿Entiendes?

— ¿Son muchos?

Billones. Habitamos toda la extensión del Averno y somos muchísimos más que los humanos.

— Catorce es un número muy pequeño para tantos demonios.

Vamos por tandas, ¿sabes? Aquí es enorme y cada tanda se dispersa por un lugar nuevo. Nacemos cada siglo, de a veinte como mucho. Catorce es de mi tanda y nos encargamos de las llamadas. ¿Feliz?

— ¿Desde hace cuánto que existe esto de las llamadas? ¡Todo lo que me dices es fascinante!

¿Las llamadas? Desde que se inventó el teléfono, supongo. No lo sé.

— ¿Y tú? ¿Hace cuánto trabajas aquí?

Desde que nací, duh.

— ¿Y cuándo naciste?

En el... espera, creo que no tenemos el mismo sentido del tiempo. Pero, ¿sabes? En este siglo pasó una cosa algo rara, como que nuestro comienzo se coordinó con el suyo. Así que... ¿en qué año estás, chico?

— Dos mil diecinueve.

Significa que nací en más o menos por el dos mil. Como te digo, casi a principio del siglo.

— ¡Como yo! ¡Debes tener mi edad!

Uh, no. Aquí el tiempo se detiene. Llevo una eternidad haciendo esto.

— O-okay.

Sí.

— Oye, señor demonio, ¿puedo saber cuál es tu nombre?

Diecinueve.

— ¿Te llamas Diecinueve? ¡Es mi número favorito!

Genial.

— ¿Me explicas lo de las becas?

De acuerdo, chico, mucho por hoy.

— ¡Hey, señor demonio! ¡No cuelgues!

Bienvenido a...

— Bienvenido a

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DEMON LINE ❍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora