❝¿Por qué un demonio usaría un teléfono?❞
❥ fantasía au
❥ esto es algo, pero no sé muy bien qué
❥ no acepto adaptaciones de esta historia :( disculpen
AVISO, GENTE
este fic sucede en un mundo fantasioso completamente creado por mí...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
— Número d-
— ¡Hola!
— ... ¿hola?
— Hola.
— Sí, uh, hola. Señor, ¿puedo ayudarlo en algo?
— ¡Hola!
— ...
— Ya, está bien, era broma. ¿Tú eres Minho?
— ... ¿Minho? S-sí, digo no, digo- ¿quién eres tú?
— Por teléfono te oías super imponente, ¿sabes? Con toda la cosa de "cirris piligri Jising" y "vengo del infierno, respétame". Pero cuando llegaste, resultaste tan pequeñito y llorón que me dio ternura.
— ¿Disculpa?
— Disculpado. ¡Ah! Pero al coquetearle al niño tenías cierto aura de respeto, creo. Lástima que nunca llegaste a nada. En serio, me aburrían. La tensión entre ustedes era desesperante.
— ¿Quién eres tú? ¿Qué te pasa o qué?
— Deberías hacer algo respecto a eso, sólo digo. Oh, hola niño. Matthew, te dije que me trajeras el teléfono, no que llamaras a Minho.
— ¿Jisung? Ah, claro, tú eres Matthew, ¿cierto?
— Qué inteligente eres. ¡Hey, Matthew!
— ¿Me pasas con Jisung? Gracias.
— Sí sí, lo que digas. Al niño le emociona mucho llamarte, pero no le digas que yo te dije. Te estoy oyendo, ¿sabes?
— ...
— Por cierto, no me digas Matthew. Llámame BM.
— ¿Me pasas con Jisung de una vez?
— Va, va, nadie quiere hablar con BM hasta que necesitan consejos para ejercitar pectorales.
— ...
— Bien, ya. Hola Minho.
— Hola Sung. ¿Qué con tu ángel?
— No tengo idea, creo que está defectuoso.
— Me llamó pequeñito y llorón.
— Bueno, no eres particularmente alto...
— No digas más. Se entendió.
— Yo tampoco soy muy alto, ¡está bien! Pero en fin, lo siento por Matthew. O BM, lo que sea. Estamos en una tregua.
— ¿Tregua?
— Ajá. Él sigue usando mis cosas, molestando e invadiendo mi cuarto y yo retengo mis ganas de sacarlo a patadas a la calle.