Арocalipsis [RusMex]

🧠 Mi persona favorita 🧠

Gracias a todos por el apoyo que me dieron. Ya hable con ciertas personas y si, me voy a cambiar de bachillerato, sólo necesito que se liberen algunos espacios para poder irme.

Los quiero mucho, mis soldados <3

No los dejaré esperando, aquí está su siguiente capítulo :³

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Look at the stars, look how they shine for you

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—Что? (¿Qué?)

—Lo ha confesado, le gustai, weon —sonrió Chile.

Rusia estaba impactado por la noticia. Se sentía mal, era como si le hubiesen contado el final de una película... ¡De SU película! Miró al argentino con enojo y una mirada de desaprobación.

—You betrayed your sister at telling me her secret (Traicionaste a tu hermana contándome su secreto) —negó con la cabeza—. I don't want to know how many people had been betrayed by you (No quiero saber cuanta gente ha sido traicionada por ti)

—¡No es lo que vos piensas! Te estoy ayudando, pero quiero que te alejes de esta pelotuda arruina relaciones —observó a Chile con odio—. No quisiera ni que se te acercara.

—Sapo culiao, por si no lo sabes...

—¡Deja de mentirme! —una lagrima traicionera resbaló por su mejilla—. ¿Sabés acaso cuánto tiempo llevó con Alemania? ¡Dos años y tres meses, pelotuda de mierda! ¡No viví dos años con él para que vengas tú y me arrebate mi felicidad!

Solo se escuchaban sollozos en aquel cuarto. Rusia estaba procesando toda la información, parecía como si ambos países hablaran diferentes idiomas al español por sus modismos. Traducir sus palabras para él era difícil, sobre todo porque no hablaba español, sólo lo comprendía.

—¿Por qué llegas a arruinar esto justo en este momento? ¿Por qué llegas justo cuando estoy esperando un hijo suyo, maldita zorra? —escupió esas palabras cómo si de veneno se tratase.

Tanto Chile como Rusia se quedaron callados. Los ojos de la Chilena se inundaron de lágrimas y arrepentimiento. Rusia movió sus labios traduciendo la última palabra que dijo el argentino.

«Сука » pensó.

—Arge, yo...

—No siquiera te atrevas a pedirme perdón, ni vos ni nadie tiene derecho al perdón cuando hace algo así —Chile empezó a llorar.

El argentino salió de la habitación. Chile sollozo fuertemente y Rusia permaneció ahí, estático sin saber que hacer. Tan sumido estaba en su mundo de fantasía con México que ni siquiera se percató de la situación con los sudamericanos y su mejor amigo.

—What was that? (¿Qué fue eso?) —Chile secó sus lágrimas, había olvidado que no estaba sola.

—N-Nada... Iré por tu película —también salió de la habitación apresuradamente.

La mente del de Ushanka daba vueltas, no entendía nada. Odiaba tener que traducir peleas, se prometió comenzar a hablar más español.

(...)

—Y ya eres mi persona favorita~
Cada minuto a tu lado es genial~
Y no hay nada en el mundo mundial~
Que ame más que estar contigo~
Cada momento lo haces especial~

Se escuchaba una melodiosa voz en la cocina cantando. Olía muy bien, había una gran olla sobre la estufa con un rico pozole de desayuno. México se encontraba picando los pocos chiles que le pondría al caldo. Rusia entró a la cocina con un papel entre sus manos temblorosas.

—Tu eres mi persona favorita~
Y aunque no siempre lo ando diciendo~
Es buen momento de decirte que te quiero~
Te quiero, te quiero~
Y siempre así será~

Las mejillas rojas y la sonrisa boba de Rusia dedicadas a su amada México hacían bastante obvias las intenciones que tenía en aquel momento. La mexicana caminó hasta la despensa cantando, no sé había percatado de la presencia del ruso. Se giró sobre sí misma tirando la taza de porcelana que sostenía en sus manos.

—¡Chingada madre! ¡Has ruido! —dijo asustada.

—Are you OK? You didn't hurt yourself? (¿Estás bien? ¿No te lastimaste?) —tomó sus manos entre las suyas.

—No me vuelvas a asustar así —se sonrojó ligeramente, notó el papel en la mano de Rusia—. ¿Qué es eso?

—N-Nothing! (¡N-Nada!) —lo escondió detrás de su espalda.

—Oh, no. Ahora me vas a enseñar.

México empezó a correr en círculos alrededor de Rusia mientras este evitaba a toda costa que viera el contenido de ese papel. Si lo leía, no sabía cómo reaccionaria. Si lo leía, tal vez jamás le volvería a hablar.

La mexicana se lanzó sobre el ruso haciendo que este cayera. Comenzó a hacerle cosquillas mientras sus manos se movían velozmente tratando de alcanzar el papel.

—Хахахаха. Нет... Нет! (Jajajaja. No... ¡No!) —dijo mientras sujetaba a México de las caderas intentando apartarla.

—¿Me vas a enseñar? —preguntó con una sonrisa.

La puerta de la cocina se abrió dejando ver a España observando aquella escena comprometedora. México encima de Rusia mientras esté sujetaba sus caderas. El Español cerró la puerta de la cocina perturbado. Los otros dos se miraron a los ojos unos segundos para luego empezar a reír.

—Ay, Rusky —suspiró mientras secaba sus lágrimas.

—Мексика... —... Te amo, te quiero decir algo, casate conmigo, larguemonos de aquí juntos. ¡Dilo, es tu oportunidad!

—¿Qué pasa, Rusia?

—I-I... (Y-Yo...) —se quedó callado. Suspiró—. I want to learn how to speak Spanish (Quiero aprender a hablar en español)

—¡Claro que sí! Yo te enseño —sonrió—. Pero primero...

Las cosquillas volvieron. La cocina se inundó de risas. Habría sido una buena oportunidad para el Ruso, pero no era el momento ni el lugar, y este lo sabía perfectamente.