🧠 El refugio 🧠

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La pequeña mexicana cerró la puerta de aquel edificio a tiempo, pues casi inmediatamente llegó una ola de zombies que rastrearon el olor que Alemania y Argentina desprendían. La puerta era tan pesada que costaba trabajo cerrarla, afortunadamente las bisagras estaban oxidadas lo que dificultaba más abrirla.

Genial, estamos a salvo, pibe —dijo Argentina con una sonrisa.

Now, we need to know where are we (Ahora, tenemos que saber dónde estamos) —Alemania los trajo de vuelta a la realidad.

Se encontraban en un edificio extraño, se veía algo antiguo. Era como un bunquer de guerra, preparado para una emergencia. México ni siquiera estaba enterado de un lugar así en su país.

Habían diversas puertas de metal con paredes grises de hormigón. El techo tenía lámparas colgantes que emitían una luz blanquecina. Las ventanas estaban fabricadas con vidrio blindado, el cuál le había costado bastante trabajo a México romper. El piso se veía resistente.

La mexicana comenzó a preguntarse si su gente se estaba preparando para algo así. Aquel refugio que les pertenecía ahora no cumplió su propósito de salvar tantas vidas.

Ostia, chaval. ¿Por qué no me habíais contado? —España admiraba cada detalle con detenimiento, admiraba la cantidad de cosas que habían logrado incluir en dicha edificación.

El resto de los países observaban todo maravillados, con un cierto brillo emocionado en sus ojos. Avanzaron poco a poco encontrándose con la primer puerta. En la parte de arriba había un letrero que dictaba «Cocina», la segunda puerta decía «Sala de juegos», la tercera decía «Servicios médicos» y de la cuarta a la sexta eran habitaciones.

No creo que esté lugar haya sido hecho para salvar muchas vidas, che —el aura era misteriosa.

Ya veo que no, pero... Es muy raro. Ni siquiera yo misma sabía de esto —México vio una placa en una de las paredes completamente llena de polvo, lo sacudió y leyó la inscripción en voz alta—. «Este edificio está construido por la ONU con la finalidad de salvar vidas en caso de una catástrofe. Se mantendrá su ubicación en secreto hasta el día que sea realmente necesario».

—¿Qué chucha, weon?

—¡La cincha de la lora! ¡¿Y si el pelotudo de ONU ya sabía de esto?!

México dejó de prestar atención a lo que decían sus hermanos. Un terrible dolor agudo se hizo presente sobre su pecho, como si depronto se le dificultará respirar. Sentía como si alguien estuviera presionando sus pulmones cual pelota antiestrés. Rusia fue el único que notó esto.

Are you OK? (¿Estás bien?) —el de Ushanka posicionó una mano sobre el hombro de la tricolor.

Vio cómo está soltaba un sollozo y una tos constante por la falta de aire. Su cara de volvía roja y sus piernas flaquearon para caer directo al suelo. El ruso la sostuvo entre sus brazos antes de que cayera por completo. México vio el rostro preocupado del auroasiatico.

T-Todo saldrrá bien.

Oscuridad

Todo estarrá bien.

(...)

Abrió sus ojos de golpe sentándose rápidamente. Aquello le causó un dolor muy fuerte en el pecho, por lo que no pudo evitar callar un quejido. Volvió a recostarse sobre la... ¿Camilla? ¿Dónde estaba?

Volteó a ambos lados observando las paredes de hormigón pintadas de verde chicle. La camilla y utensilios médicos a su lado fue lo que le hizo pensar donde estaba. Observó los frascos de medicina y supo que se encontraba en «Servicios medicos». Sonrió al ver que no había muerto, que seguía viva y coleando lista para poder beber otro trago de Tequila.

Привет (Hola) —volteo al lugar proveniente de aquella voz tan grave—. You woke up (Despertaste)

—Así es, Tripalosky —le sonrió, estaba recostada sobre la camilla—. ¿Qué fue lo que me pasó?

—You had an attack (Tuviste un ataque) —se detuvo un momento a pensar—. I think it's because your people is dying (Pienso que es por las muertes de tu gente)

Rusia tomó uno de los frascos de pastillas, sacó dos y se las ofreció a la chica. Esta lo miró dudoso.

Come on, trust in me. You know my father made me study many things in order to be like him (Por favor, confía en mi. Sabes que mi padre me hizo estudiar muchas cosas para ser cómo él)

Mexico las tomó en su mano y las puso en su boca para pasarlas con un poco de agua que le ofreció su acompañante. Agradeció por su atención.

¿Y el resto?

—They decided to choose a room. Chile with Spain and Germany with Argentina (Decidieron elegir habitación. Chile con España y Alemania con Argentina) —eso sólo podía significar algo—. You are with me (Tu vas conmigo)

—No hay problema, wey. Sólo... Quiero estar aquí más tiempo, me duele mucho.

—Take your time (Toma tu tiempo)

México quedó recostada esperando a que el dolor de sus pulmones pasara de un momento a otro. Rusia la observaba detenidamente, ahora no sólo era su rostro, su cuerpo entero le parecía atractivo y sexy. Podía fantasear con ella de la noche a la mañana y jamás se cansaría, pues era ella la primer y única mujer a la que amaba. Su complexión delgada y ejercitada la hacía ver bien a los ojos del ruso.

Sabe que no es merecedor de su corazón, no, ella merece más que un simple hijo de URSS. Se prometió a sí mismo cuidar de ella por siempre, pues era más alto y fuerte que ella, y eso le hacía querer protegerla, que se sintiera segura con él.

Listo —se levantó con dificultad.

Rusia la cargó cómo princesa. La elevó son suma delicadeza entre sus brazos para cuidadosamente envolver su pequeño cuerpo en estos. Era realmente ligera.

Ay, Rusky. Cuántas veces te he dicho que te puedes lastimar —le dijo en un intento de que la dejara caminar por si sola. Ambos sabían que no lo lograría.

Rusia caminó hasta la habitación que compartiría con su amada. En sonrojo en sus mejillas se hizo notorio. Esta era exactamente la forma en la que imaginaba el escenario después de su boda. Cargando a la bella mexicana hacia su nuevo hogar que el mismo se habría encargado de comprar y decorar. Porque en el fondo, el si deseaba llegar a tener algo serio con su dulce latina.

Арocalipsis [RusMex] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora