Chance «JackBeom» ✓

✨ Final✨

Jackson lo dudó antes de llamar a la puerta de aquel apartamento. Su mano fue y vino tantas veces sin llegar definitivamente, hasta que, de una vez, reunió el valor y apretó suavemente el botón del timbre. Enseguida sintió como una especie de electricidad recorría su espina dorsal, la expectación comiéndolo vivo con cada segundo que pasaba. Emocionado y temeroso. Sintiéndose, de alguna forma, como si fuera adolescente una vez más.

Y justo cuando la puerta cedió, cuando finalmente lo vio, supo que aquello que había hecho no tendría vuelta atrás. La forma en la que su pecho se estremeció dejaba más que claro que carecía de la fuerza para seguir ignorando lo que sentía.

-¿Jackson? -La voz suave y confusa de Jaebum lo recibió como una brisa cálida, como una confirmación de lo que ya sabía.

El chino apretó sus labios, apretó sus puños, sus párpados, todo. En cuanto vio aquellos cabellos desarreglados y aquel pijama de mal gusto solo cerró sus ojos y deseó que su voz no temblara mientras hablaba. Deseó lucir lo más compuesto y seguro posible.

-Rompí con Mark… -Anunció, como si solo decir eso cargara con todas las explicaciones. Como si eso bastara para que Jaebum entendiera.

-¿Qué? -Pero Jaebum sonaba confuso, sorprendido, viéndose superado por la inverosimilitud de la situación. Y no era para menos, después de todo, él ya estaba casi listo para irse a la cama a sentir lastima por sí mismo. Listo para manejar su dolor y acostumbrarse al rechazo y a la derrota. Lo que menos había esperado esa noche, era que Jackson apareciera en su puerta diciendo algo como aquello.

-¡Que rompí con él! -Jackson alzó el volumen de su voz, sacudiendo su cabeza, aún con sus ojos cerrados-. ¡Y no sé qué demonios hago aquí ahora, pero sé que rompí con él porque aún te amo! ¡Y…y… y no sé para que vine! ¡No lo sé! ¡Pero no quiero pensar en nada! ¡Vine porque te amo! ¡Vine porque quería verte y…!

Todo pasó demasiado rápido. Unos labios se apoyaron en los suyos; o, más bien, se apoderaron de los suyos. Unos fuertes brazos lo envolvieron y todo su cuerpo pareció volar hacia el interior del apartamento. Como si sus balbuceos enredados fueran alguna especie de hechizo capaz de desencadenar todo eso.

Abrió sus ojos, ahora siendo él quien estaba desconcertado, pero los cerró rápidamente al constatar que el rostro de Jaebum estaba a escasos centímetros del suyo. Se dejó llevar, reconociendo que eso era lo que necesitaba, que eso era lo que había ido a buscar.

Jaebum se separó después de que notó que ya Jackson se había calmado, que no gritaba como un poseso en medio de su pasillo a las tres de la mañana. Dio un paso atrás y lo miró a los ojos, casi enredándose en la mirada húmeda y suave del menor, en esos ojos que tanto necesitaba, en esos, labios...

Sin embargo, decidió mantener la seriedad por un momento. A pesar de todo, Jackson lo había rechazado hacía algunas horas, no podía simplemente lanzarse a lo loco aun si era lo primero que le había pasado por la mente cuando Jackson empezó a gritar cosas sin sentido. No quería malinterpretar nada, no quería falsas esperanzas, aunque algo le decía que estaba dispuesto a aceptar lo que fuera que Jackson quisiera darle.
-Lo siento… pero no se me ocurrió otra manera de hacer que te callaras. -Cerró la puerta detrás de ellos con un movimiento de su pie, manteniendo a Jackson aún sujeto contra su cuerpo, envuelto en su agarre.

-Está bien…

-No… no está bien. ¿Qué crees estás haciendo?

-No lo sé… ya te dije… solo rompí con Mark… sigo pensando en ti… no… sé que probablemente me vuelvas a lastimar pero, por hoy…

-No, no, no, no, no… no digas eso, bebé. -Jaebum lo apretó aún más, abrazándolo con fuerza, atrayéndolo hasta que el rostro de Jackson se apoyó en su pecho, en la suave tela de su pijama gastado-. No… -Su voz se quebró un poco, demasiado abrumado al darse cuenta de que realmente tenía a Jackson entre sus brazos. La sensación de victoria iba germinando poco a poco en su ser, aun limitada por su propio recelo-. No te imaginas… -suspiró-. No tienes ni la más mínima idea de lo que he pasado por ti. Te juro que nunca te lastimaré de nuevo… si me dieras la oportunidad…