El recorrido estuvo silencioso y Lucas se limitó a conducir mientras yo veía por la venta. En pocos minutos estábamos frente a un apartamento, de un lado había unas escaleras y del otro un espacio amplio totalmente vacío, fue en ese espacio en el que Lucas estacionó el auto y salimos de el.
—¿Este apartamento es de Jacob y Lili? —pregunté mientras lo seguía por las escaleras.
—De Jacob y mío —dijo para luego sacar sus llaves y abrir la puerta que se encontraba al final de las escaleras.
Al entrar al apartamento noté un lugar muy acogedor, lo primero que veía al entrar era la cocina y una barra que servía de comedor, un muy típico panorama del apartamento de dos universitarios. Al mirar a la derecha vi la sala que estaba adornada por dos muebles, una pequeña mesa y un enorme televisor y por el pasillo visualicé dos puertas, supuse que eran las habitaciones. Lucas entró a la primera puerta y yo me senté en uno de los muebles.
—¿Compraron este apartamento cuando entraron a la universidad? —pregunté cuando lo vi salir de la habitación.
—Sí —respondió con el mínimo animo como para hacer saber que no quería tener una conversación.
—Lucas, ¿puedes venir? — él se sentó a mi lado y miró a cualquier lado menos a mí— Lucas, —volví a llamarle para que me mirara— ¿pasa algo?
Volvió apartar su mirada de mí— No —contestó con voz gélida.
Su actitud empezaba a sacarme de quicio y es que para aguantar comportamientos tontos sin motivo alguno yo no servía.
—Esto me empieza a cansar, si he dicho o hecho algo que te haya incomodado o hecho sentir mal, házmelo saber. —dije mientras sentía como empezaba a alterarme— Porque la tonta actitud que tienes es hacia mí, con Jacob y Lili estuviste normal. —espere que dijera algo— ¿Ya no hablas? —silencio— Disfruta la fiesta, prefiero pasar el rato en mi habitación y no con un tipo con actitud de inmaduro —terminé de decir para luego ponerme en pie y disponerme a salir.
Llegué hasta la puerta principal y Lucas me tomó del brazo— ¿Realmente solo somos amigos? —preguntó y esto me tomó por sorpresa.
—¿Era eso? ¿Realmente te has puesto así solo porque he dicho que solo somos amigos?
—¿Solo somos simples amigos? —insistió en saber.
—Nunca mencioné lo de simples.
—¿No pasa nada entre nosotros? —preguntó mientras se acercaba un poco a mí.
—Lucas... —susurré.
—¿Vas a contestar a mis preguntas?
—¿Qué quieres que te diga?
—Respóndeme, ¿no pasa nada entre nosotros como para decir que solo somos amigos?
—Lucas no lo sé. Lo que pasa entre nosotros es una linda amistad y por el momento eso es lo que somos... solo amigos.
—¿Hay alguna posibilidad de que algún día podamos ser más que solo amigos?
Su pregunta me tomaba por sorpresa ¿Lucas realmente empezaba a sentir algo por mí? ¿Yo podría corresponderle? ¿Yo estaba confundida con mis sentimientos o realmente también empezaba a sentir algo por él?
—Sí... —susurre.
—¿Qué has dicho?
—Que sí, si lo intentamos... quizá algún día podamos ser más que amigos —dije y luego mire su rostro, su expresión que hasta el momento había sido de total seriedad y un poco mal humorado se transformó y me permitió ver su hermosa sonrisa.
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La promesa de Aly
Novela JuvenilAlison Mendes se convertirá en la nueva niñera de los Rathbone con el propósito de poder ahorrar para sus estudios y así cumplir la promesa que le hizo a sus padres. En el tiempo que estará en New Haven se verá envuelta en amores, desamores, peleas...