Capítulo 28.

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Los niños corrían por la casa, evitando el desayuno para que se nos hiciera tarde y no fuesen a clase. Lucas bajó más temprano de lo normal a la cocina completamente listo para salir.

—Hoy te vas más temprano —comenté cuando lo vi.

—Iré a comprar un té, un té que hará que te enamores de mí. —fruncí el ceño— Es broma —dijo burlón.

Se despidió y salió de la casa. Media hora después Sky, Cameron y yo estábamos listos para ir a nuestras respectivas clases. Los dejé en sus escuelas y después fui a mi clase. El profesor aprovechó las horas para repasar unas cuantas cosas que a algunos no les habían quedado claras y después nos asignó grupos de trabajos.

—Traición... decepción. —dijo Camille cuando la clase terminó— Una fuerte amistad ha empezado a quebrarse.

—No empieces. —dije empujando la puerta para poder salir— Será solo por esta vez.

—¡Me traicionaste! —dijo, dramática.

—¿Qué sucedió? —preguntó Andrew apoyado en su auto.

—Nos dejaron un trabajo en grupo. —Camille empezó a hablar— Creí que Aly y yo estaríamos juntas, pero el profesor le sugirió que buscara otro compañero ¡y ella aceptó! Nada será como antes. —movió sus manos de forma dramática— Nos ayudábamos, éramos un equipo y ahora ella es el apoyo de otra persona.

Andrew empezó a reír por el dramatismo de Camille.

—¿Necesitas ayuda con el trabajo? —preguntó Andrew rodeándome por la cintura.

—No, ya lo dividí con mi compañero y es fácil lo que me toca hacer.

—Igual, ella no necesita ayuda, agarra los temas súper rápido, es jodidamente inteligente —dijo Camille cruzada de brazos.

—¿Ya empiezas a dominarlo?

—Lo básico.

Andrew pensó un momento—Ich liebe dich — susurró muy cerca de mis labios.

—Ich liebe dich auch —le sonreí, me besó y después me felicitó por la pronunciación.

—¿En serio se están diciendo que se aman mientras yo estoy sufriendo? —hizo una mueca y se subió al auto— Los odio a los dos, ahora Derek es mi único y leal amigo.

—Grabaste nuestra amistad en tu piel y será para siempre —dije burlona y ella puso una cara malhumorada.

—Ya se le pasara. —dijo Andrew ante la pequeña rabieta de Camille— Te acompañare hasta tu auto.

—Cam. —me incliné para verla— Sabes que eres de mis personas favoritas, será la primera y última vez en la que no estemos juntas.

Su expresión se relajó— Más te vale, no me agradó mi nueva compañera.

Me despedí de Camille y caminé con Andrew hasta el auto.

—¿Puedes apartar este fin de semana para mí? —preguntó.

—En los últimos meses mis fines de semana han sido para ti.

—Pero también han estado Camille y Derek, me gustaría un fin de semana para los dos. ¿Te parece si te recojo el sábado?

—¿A dónde iremos?

—No muy lejos, pero alista algo de ropa para una noche.

—Bien, entonces hasta el viernes.

Me despedí y subí al auto. Después de recoger a los niños y darles el almuerzo pase la tarde cuidando de Cameron y esperando que la clase de ballet de Sky terminara. A eso de las seis y media Lucas y Sky llegaron. Mientras que esperaba a que Sky se cambiara recogí los juguetes de Cameron y después serví la comida.

La promesa de AlyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora