Omega | NamMin || BOOK 1#

XXXI - Más Importante

—Jamás imaginé que serías un apóstata.

—Jamás se me cruzó por la mente que me abandonarías tan pronto.

Taemin lo mira fijamente, con el reproche en su mirada como cada vez en la que mimaba a Hoseok por algún logro que hiciera y Taemin lo encontraba innecesario. Se acomoda más en la cama, tiene apenas un grueso abrigo de piel encima y estirado ligeramente. Da un aire demasiado tentador.

—Son retos que impone el señor para demostrar que tanto crees en él y en su salvación. Tu fallaste de manera miserable, sin mencionar que intentas llevar a mí cachorro por el mismo camino. —Se sienta en la cama, con las piernas abiertas y el abrigo cubriendo la zona, deja los hombros al descubierto y luce como una bruma por su color negro en contraste con la piel blanca de Jimin.

—Dios no iba a salvarnos.

—Lo iba a hacer.

— ¿Estás aquí? No. Para mí es suficiente muestra de que Dios no iba a salvarme a mí y no estaba dispuesto a permitir que lastimaran a mí cachorro por una falsedad hipócrita. —Se hace el cabello hacia atrás.

—Pareces no saber que su salvación también viene en la muerte.

—Y Hobi tenía apenas... Seis cuando eso pasó.

—No permitiste que Dios lo salvara, tú-

—Yo lo salve—Se recuesta boca abajo, balancea las piernas con los codos apoyados en la cama hecha de pieles animales—. Yo fui quién nos salvó ¿Apóstata? Que importa, estamos vivos, estamos bien y más importante... No tenemos que aguantar unas leyes que nos aplastaban por la forma en que nacimos ¿Sabes que tu hijo es Beta? ¿Qué ibas a hacer?

—Mi primogénito, sería el heredero al-

—Mentiroso, lo harías jefe de la guardia. Lo harías menos. No me considero apostata, pues tampoco sigo a estos dioses, pero debo reconocer que a pesar de ello han hecho más que tu Dios.

—Como te atreves...—Verlo molesto resultaba muy extraño, el hombre de ropa típicamente cristiana se acercó un par de pasos más—. Finalmente cediste a lo que es ser-

— ¿Un Omega? Nunca me he avergonzado de ser un Omega—Lo ve de cabeza, estando boca arriba, abriendo y cerrando las piernas—. Soy quién te dio un cachorro, quién lo ha mantenido vivo; libertad que en Inglaterra no tendría. Todo eso lo logré siendo un asqueroso Omega al que, de tener en frente, encerrarían para que fuese flagelado ¿No es cierto?

Taemin se pone encima suyo, rodea el cuello de Jimin con ambas manos y presiona. Jimin aprieta los ojos antes darle tal apretón a Taemin en la entrepierna que este no tiene más que doblarse, dejándolo. Jimin se levanta, aun con el abrigo nada más, soba la mordida que adorna su cuello y que jamás se iría de ahí.

—Quise ser fiel. Quise que fueras el único... sin embargo, no puedo estar solo—Ladea un poco la cabeza, con expresión entristecida—. Yo-

—Necesitas... Fornicar con un... animal. —Jadea aun adolorido.

—Ese animal me permitió saber que también merezco sentir que me aman; sentir placer; que justo como siempre quise creer... No soy un desperdicio que pecó y por ello merece lo peor—Sonríe a nada de llorar—. Hizo más de lo que tú hiciste... No te dejaré de agradecer nunca, porque me diste a Hobi, pero antes no vivía en realidad. Es como si yo nací en un mundo equivocado al que debí.

—Jim-

Jimin siente sangre cayéndole encima, un gran salpicón. Oye huesos crujir y seguido unos jadeos animales provenientes del enorme lobo negro en la cama, que con sus colmillos llenos de sangre da con una pata al cuerpo con la intención de ver si sigue vivo. Jimin relame la gota de sangre que había caído en sus labios.

—Por este animal ya no siento que mi cabeza fue atravesada por una espada...

Lo curioso de los lazos, es que al romperse tiende a tener secuelas de cómo murió la otra persona si es que ese es el caso. La forma en que el vínculo se rompió de manera tan abrupta. Algunas veces tiene ganas de desmayarse o llorar de dolor por lo insoportable que era.

Con Namjoon es algo que ha ido mermando, así como la sensación de soledad y de ser uno contra el mundo.

Namjoon baja de la cama, sus ojos dorados viéndolo fijamente como si fuese su siguiente presa, pero por su aroma Jimin sabe perfectamente que no es así. Se acuclilla, lo toma suavemente de la cabeza antes de besarle la nariz. Namjoon le lame la cara, con su hocico aun goteando sangre por el reciente asesinato.

Acaba tendido en el suelo con el lobo encima, siendo casi de su tamaño en longitud y mucho más ancho que su cuerpo sea por el pelaje o verdaderamente su cuerpo.

—Mi Alpha.

Pasa los brazos alrededor del cuello de este, abriéndose más de piernas para permitir que pudiera meterse entre ellas. El abrigo que lleva puesto... Casi es como si tuviera la piel de Namjoon encima, como si todo este tiempo lo estuvo cubriendo y preparado para cualquier momento.

«Fornicar con un animal»

No hay problema siempre que sea su Alpha...

—Tienes el sueño pesado. También una buena capacidad para hacerlo sin parar.

Se remueve la cama, ve a Namjoon entrar arrastrando de las astas a un gordo ciervo con pelaje color caramelo. Sonríe manteniendo la posición en la cama—Era un lindo sueño—. Namjoon ríe apretando los ojos, crea una cómica mueca que le ha visto hacer a Taehyung incontables veces. Mayormente cuando hace algo muy tierno.

— ¿De qué trataba?

—Es un secreto.

—Claro, secreto, de la misma manera que es un secreto estar soltando más feromonas.

—Es una manera de recibir a mí Alpha que me trajo de comer.

Namjoon se sorprende de la capacidad de Jimin para soltar excusas y esquivar el verdadero cuestionamiento. Sea como sea no importaba en realidad. Solo que por alguna razón Jimin lo estaba esperando y eso no es más que buenas señales. Cenaron el ciervo entero sin mucho problema, Jimin le hablaba de alguna tontería y viceversa. Iba siendo muy ameno hasta que Jimin ve por la pequeña ventana y su expresión se deformó a una de total susto.

— ¡Hey!

Lo persigue, a duras penas distingue un cuervo que es lo que Jimin está siguiendo. Tras unos cuantos minutos de correr Jimin tuvo que agacharse para impedir que un lobo salido de entre la maleza lo atacara. Namjoon no tarda en cambiar para enfrentarlo sin sufrir mayor daño. Resulta relativamente rápido a decir verdad. El animal mancha el suelo con su sangre ahora.

—Sus ojos...—murmura Jimin notando que son... Extraños. Muy humanos.

—Es lo que pasa a los que tratan de reprimir a su lobo y luego, cuando se liberan, no logran volver en sí. Debió ser humano en algún momento—comenta Namjoon, Jimin tenía el susto plasmado en su expresión. Alza la vista, nota al lobo ahí con su atención clavada en él—. Impedir que nuestra naturaleza salga... Es acercarnos a perder nuestra mente. Por eso considero que los sajones son demasiado estúpidos. Tratan de impedir algo tan normal y posiblemente solo logren que los suyos mueran por esto.

—Podría sucederme.

—No permitiré que suceda.

Namjoon lo hace subirse a su lomo para llegar más pronto a la cabaña.

— ¿Te convertiste en mi guardián o algo así?

—Los dioses siempre han tenido especial apego por mi... Quizá también lo tengan por ti y quieren que te cuide.

Dioses... Jimin se siente un poco harto de dioses y cosas más allá. No obstante, al menos aquí no se siente restringido por ellos. Sino querido...

Y es lo que siempre ha deseado tener.