XXXIV - Preparativos Mixtos

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Podía sentir la mirada de Jimin clavada en su nuca como si fuese un puñal o un hacha. No lo extraña para nada que sea así siendo lo que está haciendo bajo su estricta supervisión -también forzada de manera peculiar-. Sea como sea, toma el hacha roma, da un golpe directo a la nariz y el cuerpo pequeño y delgado cae al suelo de inmediato. Retorciéndose al mismo tiempo que cubre su nariz con las dos manos.

—Voy a hundir tanto tu nariz que parecerás una serpiente. No puedo creerme que en serio seas tan malo para esquivar siquiera—Refuta el más alto jugando con el hacha en su mano, Hoseok lo veo con ojos llorosos—. ¿Se supone que eres un perro herido o qué? Párate de una puta vez, nadie que te ataque va a detenerse si le diriges esa mirada. Por el contrario, van a reírse más al matarte.

—Pero-

—Todo el mundo va a querer matarte, incluso yo si creces y veo que pretendes morderme así que levántate y de nuevo.

Hoseok se levanta casi temblando. Llevan mucho rato en esto y empieza a ver estrellas de dolor por la cantidad de golpes que Namjoon le ha dado. Taehyung va mejor con Jungkook, al menos a él no lo han tumbado tantas veces al suelo. Estaba a punto de decir que se resignaba a ser arquero únicamente.

Luego recuerda que su puntería ha sido más que fatal las últimas veces.

Namjoon da con el hacha al escudo que Hoseok había tomado y con la adrenalina a tope logra asestar un golpe a Namjoon que al menos da una queja por el dolor que genera. Su emoción muere muy pronto cuando su escudo fue empujado por el del mayor y finalmente un hacha de verdad clavada a un lado de su cabeza.

—Comienzo a impacientarme y más te vale que esto no sea así. —le dice. Hoseok se levanta aunque trata de darle con esa misma hacha Namjoon se la arrebata sin problema y lo ataca con esta, causa una larga cortada en el pecho.

— ¡SUFICIENTE! —Namjoon retrocede un par de pasos, Jimin levanta a Hoseok del suelo y lo carga en brazos. El niño ya está más grande y resultaba casi impresionante que Jimin pudiera cargarlo con semejante facilidad.

—Así no va a aprender nunca. —Rueda los ojos, Jimin siendo tan sobreprotector comienza a molestarlo. Hoseok va demasiado crudo en el entrenamiento, todo porque Jimin parece sufrir ataques cardiacos continuos de verlo con un arma cerca.

—Puede aprender, pero no lo hará si lo matas.

—Tae sigue vivo y-

— ¡Hobi no es Tae! —Gira violentamente a verlo, Taehyung detiene lo que hace. Está lejos, pero puede escuchar perfectamente la conversación—. Tae ya está acostumbrado a todo esto, no puedo evitarlo aunque quiera; Hobi apenas había sostenido un cuchillo de cortar carne antes de venir aquí y ahora tú-

—Es él quién quiere aprender.

—Y va a aprender si dejas de intentar matarlo.

—Ese es el punto.

Jimin entra al gran salón con total resignación, pero aun llevando a Hoseok en brazos. Nadie puede continuarle la pelea a Jimin a esta altura, no cuando anda demasiado a toque. Su aroma es tan fuerte que está prohibido acercarse a él a menos que seas Namjoon o bien Tae o Hobi, evidentemente el par de cachorros no iban a hacer nada.

Van varios días en la misma dinámica problemática con respecto a Hoseok entrenando. A Jimin no le molestaba en sí que fuese golpeado, eso venía muy adjunto, es inevitable. El problema es que no soporta ver que lo corten. Lo dejaran con cicatrices y ya de por si es complicado que alguien se fije en un Beta. En este lugar donde abundan Alphas es poner una dificultad extra.

Si no lo escogerán por casta, que lo hagan porque es las otras tantas cosas que pueden ser; entre ellas, que no esté lleno de cortadas como un animal al que domesticaron. Ya ha escuchado demasiado de los rumores que, aunque las cicatrices dan algún que otro mérito, en general no les gustan a las hembras, a los Omegas y población en general.

Omega | NamMin || BOOK 1#Donde viven las historias. Descúbrelo ahora